Se trata, con el hijo desaparecido de la señora Rosalía Castro, de un delito de lesa humanidad, el peor de todos, más, mucho más, en el tiempo de MORENA en el poder sexenal, partido de la izquierda, la izquierda defensora de los derechos humanos en el mundo.
Y por eso mismo, resulta inverosímil el desdén, el desprecio, la indiferencia y la apatía de la Fiscal General, caray, para dialogar una hora, media hora, con el Solecito, y ni se diga con el resto de los Colectivos.

LUNES
Fiscal soberbia

El dolor y el sufrimiento por la desaparición de un hijo nunca termina, como se intitula el último libro de la escritora Celia del Palacio, a propósito de los desaparecidos en la región de Orizaba, más de trescientos cincuenta casos enlistados.
Los exfiscales Jorge Wínckler, Luis Ángel Bravo Contreras y Felipe Amadeo Flores Espinoza ejercieron el mismo estilo de poder que la Fiscal General de la 4T. Cien por ciento reticentes al diálogo. Incluso, hasta los bombardeaban con declaraciones mediáticas.
Bastaría recordar el plantón y la toma del Palacio de Justicia en Xalapa por el Colectivo cuando Wínckler era el titular. Y los plantones de los desaparecidos en la penúltima gira de López Obrador a Xalapa, frente al cuartel militar en el poblado de Emiliano Zapata. Y las madres con hijos desaparecidos en Veracruz en el plantón nacional en el Zócalo de la Ciudad de México.
¡Vaya prepotencia y soberbia de la Fiscalía General!
Caray, y como premisa universal, si la Fiscal está ultra contra súper ocupada siguiendo la pista a los asesinatos cometidos en Veracruz (primer lugar nacional en feminicidios y en crímenes de odio, por ejemplo), entonces, hay un Fiscal para Desaparecidos, a menos que sea como su antecesor en el tiempo de la yunicidad cuando acuñara su frase bíblica de que "Los desaparecidos... desaparecidos están".

MARTES
La silla embrujada del palacio

La vocera Rosalía Castro enlistó los pendientes:
Uno, carpetas de investigación. Dos, diligencias para la búsqueda de los desaparecidos. Tres, Identificación de cuerpos en fosas clandestinas. Cuatro, decenas, cientos de cadáveres pendientes de la prueba ADN.
Insólito: el año terminó con el trascendido de que mil doscientos cadáveres serían arrojados a fosas comunes... que porque nadie los reclamaba.
Por eso, las madres con hijos desaparecidos en los municipios de Veracruz, Boca del Río, La Antigua y Xalapa se plantaron afuera de la Fiscalía General. El desdén de la titular para una audiencia y para organizar mesas de trabajo, ninguna, en el año 2020.
En el fondo, bien podría tratarse de la misma filosofía social de hacer política de las tribus guindas en Veracruz de rechazar el diálogo como la más alta expresión, digamos, ajá, de una vida democrática.
En la cúspide, encumbrados con el cargo público, los políticos sucumben ante la silla embrujada del palacio, como decía Eufemio Zapata, el hermano menor de Emiliano, El caudillo del sur, porque a todos marea, enloquece, perturba y convulsiona las neuronas, el corazón, el hígado y el sexo.
Mil mujeres decía el dictador de la República Dominicana, Rafael Leónides Trujillo, llegó a tener en treinta años de mandato. El emperador Adriano fue dichoso y feliz con su efebo, Antínoo. "Yo como gobernador me volví sexy" decía Javier Duarte.

MIÉRCOLES
Dolor y sufrimiento

Dijo la vocera del Solecito al reportero Noé Zavaleta: "La Fiscal General siempre nos manda a sus segundos y terceros de a bordo, los cuales no saben nada. Tenemos cientos de carpetas paradas, búsqueda de desaparecidos, cuya hoja base no trae ni el ADN de los padres del joven que se está buscando. El año que se fue no hicieron nada”.
Por un lado, los secuestros, desaparecidos, asesinatos y fosas clandestinas, quizá pozoleadas con ácidos, continúan en Veracruz, irrefrenables, desdibujando la tarea de la secretaría de Seguridad Pública.
Por el otro, la incompetencia de la Fiscalía General para procurar justicia... y tantos pendientes.
Y por el otro, caray, insólito, que hasta una audiencia niegue la Fiscal a los Colectivos.
Lo peor, mientras los Colectivos se duelen de la misma actitud oficial, el gobernador, tampoco el secretario General de Gobierno, ángel de la guarda de la Fiscal, son humildes y generosos y simplemente, ordenan a la Fiscal que escuche a las madres con hijos desaparecidos, sin duda, el peor dolor y sufrimiento de la vida, a partir de la incertidumbre y la zozobra sobre su destino y paradero.

JUEVES
Entre Colectivos y Autodefensas

Preguntita básica: ¿Por qué han transcurrido quince meses y semanas sin que la Fiscal General otorgue una audiencia al Colectivo "El Solecito"?
Hipótesis una. ¿Se deberá a que los desaparecidos y los derechos humanos de los familiares le valen?
Hipótesis dos: ¿Acatará, interpretará, órdenes superiores para el desdén, la indiferencia y la apatía?
Hipótesis tres: ¿Será que acaso ha perdido toda sensibilidad social y únicamente le importa ella, y luego ella, y al último ella?
Hipótesis cuatro: ¿Creerá que con el desdén social los Colectivos dejarán de existir, de igual manera, como la secretaría de Seguridad Pública mira y trata con menosprecio a las autodefensas y guardias comunitarias?
Hipótesis cinco: ¿Será que los Colectivos son a la Fiscalía General lo que las autodefensas a Seguridad Pública?
Hipótesis seis: ¿Será que la Fiscal General creyó que viviría luna de miel en el cargo público y por eso el desdén con que actúa desde la toma de posesión?
Hipótesis siete: ¿Será que la Fiscal trata con menosprecio a "El Solecito" y se apertura con otros Colectivos? De ser así, ¿actúa tal cual por qué Jorge Wínckler y Luis ángel Bravo Contreras eran así, como copia Xerox?
Más todavía cuando hay una subsecretaría de Gobernación, encargada de los derechos humanos y los desaparecidos (Alejandro Encinas), y aquí, en Veracruz, el valemadrismo.

VIERNES
Desaparecidos politizado

l asunto de los desaparecidos en Veracruz fue politizado.
Uno. El secuestro de diez horas de la señora Elvira López Gómez, del Colectivo "Madres Luna de la Cuenca", en Tierra Blanca, luego de una protesta con otras ONG en la escalinata de la Catedral de Xalapa frente al palacio de gobierno.
Dos. La rebatinga por la elección de la nueva directiva de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, y en donde se anotaron trece aspirantes, entre ellos, María Guadalupe Arguelles Lozano, ex secretaria de Trabajo y Previsión Social en el gobierno de MORENA y la 4T, despedida por el góber de López Obrador luego de un reality-show de un hijo en Huayacocotla.
Tres. Y como el góber tiene (o tenía) de favorita a la directora de la Comisión por la Paz, Mayra Ledesma, de por medio hay cortocircuito porque Arguelles Lozano es amiga del diputado federal, Mario Delgado (gente del senador Ricardo Monreal y del secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubón, recién elegido líder nacional de MORENA, opositor a Cuitláhuac García porque se la jugó por Porfirio Muñoz Ledo.
Cuatro. En contraparte, parte de los Colectivos de Veracruz se pronunciaron por la reelección de su amigaza, Namiko Matsumoto, la tía política de Érick Lagos, secretario General de Gobierno con Javier Duarte.
En medio de tantas pasioncillas políticas, los desaparecidos como el gravísimo pendiente social de la 4T.