Peor tantito si se considera que un polí­tico encumbrado, dueño del aparato gubernamental, dueño de los centavos, jefe máximo de las corporaciones policiacas y hasta de los Poderes Legislativo y Judicial, ha tirado la oportunidad de su vida en menudencias.
Un caso concreto, especí­fico y macizo, Cuitláhuac Garcí­a Jiménez.

LUNES
Pacificaron Veracruz

Un gobernador apostando siempre a la concordia fue Fidel Herrera Beltrán. Y si bien durante el sexenio Miguel íngel Yunes Linares se la pasó con los guantes puestos se trataba de un pleito amical legendario.
Dos más, Dante Delgado Rannauro y Fernando Gutiérrez Barrios, tejieron y empalmaron el sentir social, y como en el caso de Dante, por ejemplo, realizó la más ambiciosa obra pública respaldada en el programa Solidaridad de Carlos Salinas.
Y ni se diga cuando ambos pacificaron Veracruz, aniquilando los cacicazgos con sus pistoleros y que fueron los antecesores de los carteles flagelando hoy el territorio jarocho.
Rafael Murillo Vidal fue un gobernador bueno, generoso, prudente y mesurado, que por su edad siempre buscó la concordia, sin conflictuarse, y en todo caso, aplicando la ley a través de su operador, Manuel Carbonell de la Hoz, subsecretario de Gobierno.
Fernando López Arias también apostó a la concordia. Operador polí­tico llegó a Veracruz con su experiencia como senador de la república y Procurador General de Justicia de la Nación, además con el apoyo del presidente, su amigo Adolfo López Mateos.

MARTES
Peleado con la iglesia

Los gobernadores priistas tendieron puentes y vasos comunicantes y cabilderos con los obispos de Veracruz.
Desde la campaña electoral solí­an reunirse en corto, con bajo perfil si era necesario, con las elites eclesiásticas de cada Diócesis.
Primero, la relación cercana con el obispo santo, don Rafael Guí­zar y Valencia.
Después, con el cardenal emérito, Sergio Obeso Rivera.
Luego, con el arzobispo Hipólito Reyes Larios.
Hoy, sin embargo, fuego amigo, enemigo y adversario del góber bendecido por López Obrador con los obispos y arzobispo.
Su regla universal es una sola. “Entre más lejos, mejor”. Cada parte a su tarea. El polí­tico, a gobernar. Los ministros de Dios, a salvar almas.
Pero como las cosas de la vida terrenal también son incumbencia de la iglesia, entonces, los obispos, el arzobispo y los sacerdotes evidenciando en cada oportunidad la fallida y errática polí­tica de seguridad y procuración de justicia que ha desembarcado con el peor tiempo de la impunidad.
En contraparte, el gobierno de Veracruz, actuando siempre con desdén, y la mayor parte, la indiferencia, el menosprecio y el desprecio.
Se ignora si porque en sus canchas prefieren a los cristianos evangélicos.

MIÉRCOLES
Tiempo de la discordia

El gobierno de Veracruz, en la discordia total con los siguientes sectores y autores y actores polí­ticos y sociales.
Uno. Las cúpulas empresariales. Cuitlalandia, prefiriendo a las empresas foráneas para la concesión de obra pública por dedazo.
Dos. Parte de los diputados locales. Los crí­ticos, un sector, encabezado por el legislador guinda, Magdaleno Rosales Torres.
Incluso, en la locura del poder sexenal, la fallida iniciativa que interpusiera una diputada guinda conocida como la Ley Bozal para evitar que la LXV Legislatura evidenciara al gobierno de Veracruz bajo la advertencia de ser acusados con denuncias penales en la Fiscalí­a General de calumnias y difamación.
Tres. El desdén contra los medios crí­ticos. “Si hay convenios, dijo el góber, pero chiquitos”. En cambio, 4 millones de pesos para que el secretario de Salud remodele la oficina.
Cuatro. La persecución contra los antecesores en la yunidad, duartazgo y fidelismo con montón de denuncias penales y que 19 meses después se han traducido en un funcionario menor, de SEFIPLAN, internado en el penal de Pacho Viejo.
El resto, pura faramalla, fuego artificial, elementos distractores. O en todo caso, manifiesta incompetencia, ineficacia e ineficiencia de la Fiscalí­a General.
Diez meses y medio, los ex Fiscales, Jorge Wí­nckler Ortiz y Marcos Even Torres Zamudio, prófugos de la justicia.

JUEVES
El polí­tico Estadista

Un polí­tico con vocación de Estadista y grandeza pública siempre suma, nunca resta, menos divide, menos desdeña.
El polí­tico con alteza de miras es el Estadista apostando a la concordia.
Dueño del poder público está en ventaja sobre todos los demás.
Manda, gobierna, ordena, ejerce el poder y pontifica y sus deseos y caprichos y berrinches son órdenes.
Incluso, ninguna mujer se le resiste, y/o en todo caso, ninguna mujer a quienes encante el olor a poder y los otros satisfactores, digamos, polí­ticos y sociales, pero también, materiales.
Más si se considera que entre un polí­tico y un empresario, por lo regular, hay mujeres que prefieren al hombre público, quien además del billete fácil, también incide en la vida pública y privada de los demás.
Dueño del presupuesto, también suele convertirse en el propietario del destino común.
Nada, entonces, enaltece más al jefe máximo como ejercer el poder con toda la concordia del mundo.
Todo indica, sin embargo, que Cuitláhuac Garcí­a nunca ha conocido la humildad y los ideales y principios morales y sociales… le valen.
Así­ son los fifí­s y sabadabas.

VIERNES
El destino ajusta cuentas

Desde la cresta más alta de la montaña polí­tica ha de mirarse el destino de algunos ex gobernadores, digamos, para mirar la vida con alteza.
Miguel íngel Yunes Linares, en la Renata, Reserva Nacional del Talento, rumiando su derrota con el primogénito.
Javier Duarte, encarcelado en el Reclusorio Norte de la Ciudad de México.
Fidel Herrera Beltrán, en una silla de ruedas.
Miguel Alemán Velasco, en los negocios. De Interjet, a grupo radiofónico comprado a Televisa.
Patricio Chirinos Calero, retirado. Asesor polí­tico, se afirma, de Carlos Slim Helú.
Dante Delgado Rannauro, senador de la república.
Fernando Gutiérrez Barrios, fallecido en el quirófano cuando lo operaban.
Agustí­n Acosta Lagunes, fallecido, luego de la gubernatura, nada.
Rafael Hernández Ochoa, fallecido, luego de la silla embrujada del palacio de Xalapa, el retiro.
Rafael Murillo Vidal, fallecido, director general del Diario Oficial de la Federación luego de la gubernatura.
Cuitláhuac Garcí­a, sembrando la discordia polí­tica, sabrá el chamán si enfrentará un mal karma, pues como dice el gurú, todo lo que aquí­ se hace… aquí­ se cultiva, y quienes siembran tempestades cosechan huracanes.