Chica nudista
•En camellón jarocho
•La nueva Nahui Ollín
ESCALERAS: El lunes 11 de mayo, en la ciudad de Veracruz, apareció la encarnación de Nahui Ollín. Una chica de unos treinta años se quitó la ropa y la ropa interior también y trepó al monumento en el camellón central de la avenida Miguel Alemán. Y mostró su desnudez al derecho y al revés. Y bailó. Bailó de manera sensual. Incitante.
Luis Velázquez
Luego de la contemplación mística y toma de fotos y videos con el celular, los peatones avisaron a la policía. Y un par de hombres y una mujer policía llegaron al centro del espectáculo y lograron bajarla.
En el trascendido aseguraron que la mujer tiene problemas con el tinaco mental. Se ignora. Pero, si así fuera, las neuronas le permitieron ofrecer el mismo reality-show que en el siglo pasado ofreciera Nahui Ollín, 1894/1978, la primera mujer que posara desnuda en México.
PASAMANOS: La chica de 30 años pulverizó el aburrimiento por los meses que llevamos encerrados, hartos ya, la mera verdad. Su cuerpo, como bandera nacional sobre el pedestal. Cuerpo robusto. Piernas largas y fuertes. Cabellera alborotada. Ombligo grande.
Nahui Ollín, la hija del general Manuel Mondragón a cuyo cargo estuvo el asesinato de Francisco Ignacio Madero y José María Pino Suárez, citó una tarde de 1924, 25, a sus amigos en el penthouse en la azotea de un departamento donde vivía en la ciudad de México. Los esperó con sandwiches y vinito. También citó al fotógrafo Edward Weston, pareja entonces de otra fotógrafa internacional, Tina Modotti.
Y en el momento estelar, Nahui Ollín se plantó delante de todos en la azotea y se fue desnudando con movimientos sensuales escuchando “El hombre del brazo de oro”. Weston, disparando el obturador.
Muchos años después, enferma del tinaco mental, Nahui, de seductores ojos verdes color mar, solía caminar en la Alameda acompañada de unos treinta perritos a los que daba de comer.
Luego, trepaba al autobús urbano para toquetear a los chicos.
CORREDORES: Ningún cineasta se ha puesto de acuerdo sobre la primera actriz mexicana en posar desnuda. Unos dicen que fue Ana Luisa Peluffo en el filme “La fuerza del deseo” en 1955. Otros, que Kitty de Hoyos.
Pero en 1907, en el cine mudo, ya filmaban desnudos. Y en 1915, la revelación fue Annettle Keellerman, quien baila desnuda, solo cubierta por la cabellera larga que le resbalaba hasta la espalda, en una película.
BALCONES: En 1933, el director checo, Gustav Machety, filmó la película “Éxtasis”, donde la actriz Hedy Lamarr se baña desnuda en un río y primero, luce la parte superior del cuerpo con las bubis por delante, y luego, emerge del río y exhibe el cuerpo completito.
El cuerpo desnudo como una tentación espectacular, siempre seductora
En la cultura azteca, los jefes tribales, desde Moctezuma I y II hasta Cuitláhuac, ofrendaban doncellas a Huichilobos, todas vírgenes y todas desnudas porque así lo exigía el dios de la guerra.
PASILLOS: En el festival de rock en Avándaro, una chica menor de treinta años de edad, alta y delgada, trepó al templete y bailando se fue desnudando hasta quedar cubierta solo por su cabellera larga y fue la sensación de todos los rockeros y fans.
En las películas de los vampiros, las mujeres se acuestan desnudas a dormir en la madrugada en el sarcófago.
Memorables los campos nudistas de Europa.
Por eso, la chica de 30 años del camellón central en la avenida Miguel Alemán en el puerto jarocho quedará para siempre en la memoria colectiva.
Son los hechos y circunstancias que hacen feliz a un pueblo de cara al mar.
Elvira GarcÃa M. 20 May, 2020 - 23:26
Cuando ya no estaba bien de sus facultades, se paseaba en la Alameda Central con gatos, no con perros. Le decÃan la mujer de los gatos.