La ex titular del Instituto Veracruzano de Acceso a la Información, I.V.A.I., Yolli Garcí­a, fue detenida el mismo dí­a cuando la LXV Legislatura nombró sustituta a la reportera y académica Naldy Rodrí­guez, quien vení­a desempeñándose como jefa de la Unidad de Transparencia del secretario General de Gobierno, el vicegobernador Éric Cisneros Burgos.
Fue detenida acusada de abuso de autoridad, coalición y ejercicio indebido del servicio público en agravio al patrimonio del I.V.A.I.
Por lo pronto quedó bajo prisión preventiva.
Un manotazo de la Fiscal Verónica Hernández, antes, mucho antes de que Yolli Garcí­a escapara, como el caso del exfiscal Jorge Wí­nckler prófugo de la justicia desde el 4 de septiembre de 2019 cuando fue destituido.
En tanto, se ignora el destino de la exfiscal de Córdoba, cesada de manera fulminante porque solí­a cobrar un billetito a las madres de los desaparecidos.
También sigue prófugo de la justicia Marcos Even Torres Zamudio, exfiscal Anticorrupción.
Y en tanto hay un montón de denuncias penales de los secretarios del gabinete legal de Cuitláhuac Garcí­a, todos los expedientes parecieran estar durmiendo el llamado "sueño de los justos".
Todo indica que Yolli Garcí­a era investigada desde hace ratito cuando, por ejemplo, en la cancha pública trascendieron sus viajes por el mundo.
Al momento van tres polí­ticos internados en el penal de Pacho Viejo en el sexenio guinda y marrón.
El primero fue el cacique de Chicontepec, luego de un viejo pleito con la secretarí­a de Trabajo y Previsión Social y su esposo.
Después, un funcionario de la secretarí­a de Finanzas y Planeación en el tiempo de la yunicidad con el titular, Guillermo Moreno Chazzarini.
Y ahora, Yolli Garcí­a, ex del I.V.A.I.