Y hubo quienes, por ejemplo, la ubicaron como la más gigantesca de América Latina, excluyendo las fosas de los presidentes militares en el siglo pasado.
Luego, se afirmaba que en Veracruz habí­a más fosas que municipios.
Entonces, llamaron genocidio a la matanza de personas.
Ahora, con la Búsqueda Nacional acuñaron nuevo término. Le llaman exterminio.
Exterminio, digamos, con Adolfo Hitler con los diez millones de judí­os asesinados en las cámaras de gases… solo en Alemania.

PASAMANOS: La Búsqueda inició el mismo dí­a cuando en Rí­o Blanco, en la zona centro, apareció el cadáver de un empresario dulcero, Roberto Cruz Garcí­a, en una fosa clandestina.
Estaba secuestrado. Los malandros pedí­an diez millones de pesos por su rescate. Y cuando la familia se declaró incapaz de cubrir el pago, le quitaron la vida.
Un crimen más, de seguro, en la impunidad.
Veracruz, tiradero de cadáveres. Pero también, el reino insólito de la impunidad.

CORREDORES: La Búsqueda Nacional empezó cuando en Veracruz hay muchos, demasiados, pendientes en materia de derechos humanos.
Por ejemplo, cada vez más fosas apareciendo en municipios insólitos, como por ejemplo, en Huiloapan.
Por ejemplo, la Universidad Veracruzana reiteró que Veracruz se mantiene en el primer lugar de feminicidios con los municipios de Xalapa (MORENA), Coatzacoalcos (MORENA) y Veracruz (PAN) como lí­deres.
Por ejemplo, ene número de restos humanos descubiertos en fosas clandestinas sin aplicar el ADN.
Por ejemplo, los veinte Colectivos integrados con padres con hijos y familiares desaparecidos, viviendo en la incertidumbre y la zozobra, la desesperación y el miedo, porque siguen buscando a los suyos sin resultados.

BALCONES: Con todo, se fue un gobernador priista, Javier Duarte, y está preso en el Reclusorio Norte de la Ciudad de México, condenado a 9 años de cárcel, sin que en el expediente aparezca “el delito de lesa humanidad” como es la desaparición forzada.
Se fue otro gobernador, el panista Miguel íngel Yunes Linares, y Veracruz siguió en manos de los carteles y cartelitos, adueñados de la agenda pública.
Ahora, hay un nuevo gobierno. De la izquierda, festinan. MORENA. El partido que siempre luchó, ajá, por los derechos humanos.
¿Y?

PASILLOS: Y en Veracruz siguen desapareciendo personas. Y secuestrando, primer lugar nacional. Y asesinando. Y sepultado en fosas clandestinas. Y tirando los cadáveres en la ví­a pública.
Y lo peor, la ola de violencia recrudecida. Por ejemplo, cadáveres colgando de los puentes, cabezas decapitadas y exhibidas en las mesas de los antros, mujeres decapitadas y arrojados los cuerpos en la ví­a pública. Menos asesinados.
Del paraí­so terrenal que fue Veracruz, convertido en el infierno desde el gobernador Patricio Chirinos Calero, Carlos Salinas presidente de la república.
Y en el largo y fatí­dico camino sembrado con espinas y cardos, por ningún lado asoma una lucecita de esperanza.
Los dí­as y noches, sórdidos y siniestros. La vida, prendida con alfileres.

VENTANAS: Hace mucho tiempo que Veracruz dejó de ser un pueblo feliz. La muerte acecha y todos los dí­as es un infierno.
Y así­ cacareen desde el lado oficial, la realidad es una sola. Nadie tiene la vida comprada .Nadie está seguro. Nadie puede festinar que libró un secuestro, una desaparición, un asesinato, una fosa clandestina.
Nunca antes pensamos que terminarí­amos igual que Sinaloa, Ciudad Juárez, Guadalajara, Michoacán, Tamaulipas y Guerrero.