El millón de indí­genas y los dos millones de campesinos y los tres millones de obreros, la mayorí­a en la pobreza y la miseria, estarán felices y echarán cohetes al cielo para festinar al par de nuevas criaturas polí­ticas.

PASAMANOS: Durante unos 40 años, Morgado militó en el PRI. Nunca pudo alcanzar a sus contemporáneos Dante Delgado Rannauro y Miguel íngel Yunes Linares, quienes gobernaron Veracruz.
Pero Morgado es una especie de ave fénix como polí­tico, pues nunca en sus 4 décadas ha sido acusado de pillo, ladrón, deshonesto ni corrupto.
Su maestro en polí­tica fue don Rafael Hernández Ochoa, quien lo ungió diputado local y presidente del CDE del PRI a los 24, 25 años de edad, y su enseñanza de un polí­tico austero y modesto y honesto “a prueba de bomba” fue bien aprendida.

CORREDORES: Pero conforme pasaron los años, Morgado fue registrando las desviaciones sociales, económicas y polí­ticas en el tricolor hasta que “una gota derramó en el vaso” como fue en el duartazgo.
Y comenzó a soñar con migrar del PRI y que ahora se traducirá en su partido polí­tico alternando con el ex diputado local, Francisco Garrido, uno de los expertos más reconocido para formar partidos.
En Podemos, por ejemplo, han tomado la filosofí­a en sus estatutos de que ningún dirigente aspirará a un cargo público, como suele estilarse en todos los partidos.

BALCONES: Héctor Yunes, todo indica, tendrá su primer partido polí­tico. Se llama Juntos por Veracruz, y cuyo significado es demasiado ambicioso.
Ya tiene su Alianza Generacional y a la que decidió mantener como organización polí­tica.
Y según sus fans seguirá militando en el PRI, y con lo que se convertirá en el único polí­tico del paí­s jugando al mismo tiempo en tres carriles. Juntos por Veracruz, Alianza Generacional y el PRI.
Así­, y de entrada, tendrí­a desde ahora amarrado, digamos, un millón de votos para buscar la candidatura a gobernador en el año 2024 y que significa su más alto ideal obsesivo, y más porque su primo ya le ganó la jugada.

PASILLOS: Se habla de que en total serán 4, 5 partidos polí­ticos aprobados por el OPLE.
Y por eso mismo, ha de preguntarse el beneficio social que generarán en la población, pues a la fecha, de los 8 millones de habitantes de Veracruz 6 millones están atrapados y sin salida en la miseria y la pobreza.
Y medio millón solo hacen dos comidas al dí­a de tanta precariedad en que viven.
Y uno de cada 3 jefes de familia lleva el itacate y la torta a casa con el ingresito derivada del changarro en la ví­a pública vendiendo picadas y gordas, tacos y tortas.
Un Veracruz, pródigo en recursos naturales, habitado por familias con graves limitaciones económicas.

VENTANAS: Y en contraparte, en cada sexenio siguen apareciendo nuevos ricos, luego de que las elites polí­ticas alcanzan la plenitud social y económica con el trono imperial y faraónico.
Tal cual, partidos con elites pudientes y militantes en la precariedad dejándose “acarrear” para eventos públicos con la esperanza de mejorar su calidad de vida.
En Estados Unidos solo hay dos partidos polí­ticos, pero en Venezuela hay más de cuarenta. Y allá y acá, también, la pobreza y la miseria.