Y con Fernando Gutiérrez Barrios, Veracruz, la leyenda con "El hombre leyenda" de gobernador que así­ le llamó Carlos Salinas.
Y con Agustí­n Acosta Lagunes, el estado del paí­s con su "Sonora Matancera".
El Sistema Nacional de Seguridad Pública emitió su dictamen. En el primer año de MORENA aposentada en la silla embrujada del palacio y embrujada porque a todos marea y enloquece según afirmaba Eufemio Zapata, el hermano menor de Emiliano, Veracruz cobró más de trescientos secuestros.
En veinte años de historia, digamos a partir de Miguel Alemán Velasco a la fecha, jamás la tierra jarocha un año tan desastroso en plagios, casi casi como cuando en el siglo pasado los guerrilleros anunciando el nuevo mundo, una sociedad mejor, secuestraban personas, pero más aún, magnates, para financiarse.
Es, digamos, y como describiera el cronista Ignacio Carvajal Garcí­a, uno de los grandes logros de la 4T en Veracruz.

PASAMANOS: El gabinete de seguridad del gobierno de Veracruz, en la lona. Una piedrota en el zapato.
El Sistema Nacional (y ahora que lo desmientan desde Xalapa) reveló la numeralia de secuestros:
En el año 2019, 329.
En el año 2018, de Miguel íngel Yunes Linares, el peor año, 187 plagios.
En el año 2016, con Javier Duarte, el peor año, 142.
En año 2010, con Fidel Herrera Beltrán, el peor, 17 secuestros.
En el año 2003, con Miguel Alemán Velasco, el peor, 16.
Faltó, claro, documentar que con MORENA en el palacio de Xalapa, Veracruz también ascendió al primer lugar nacional en feminicidios.

CORREDORES: Los secuestradores operan con tanta impunidad en Veracruz que, por ejemplo, aunque la familia paga el rescate de cualquier manera asesinan a la persona plagiada.
Peor aún: se dan casos donde los malandros ofrecen facilidades a los familiares para efectuar el pago del rescate. Incluso, hasta cobrar una parte para liberarlo, y pasado un ratito, cobran la parte faltante. Y si la familia o el secuestrado se niga, entonces, van por otro miembro de la familia, así­ sean niños como ha sucedido.
Veracruz, en primer lugar nacional de secuestros por encima del Estado de México, en segundo lugar, y la Ciudad de México, en tercer lugar, y eso que están más pobladas.
La secretarí­a de Seguridad Pública sigue fallando, incapaz de garantizar la seguridad en la vida y en los bienes como establece el llamado Estado de Derecho.