Es decir, el sistema polí­tico iniciado con Plutarco Elí­as Calles cuando fundara el partido abuelito del PRI, el Partido Nacional Revolucionario, solo ha servido, y sigue, para enriquecer a unos cuantos.
Bastarí­a referir que de acuerdo con el INEGI y CONEVAL, 6 de cada 10 mexicanos están en la miseria y la pobreza.

PASAMANOS: Los 6 mexicanos más ricos que el 50 por ciento de la población nacional son los siguientes:
Carlos Slim Helú, de América Móvil. Germán Larrea, del Grupo México. Ricardo Salinas, de TV Azteca.
Alberto Bailleres, del Grupo Bal. Eva Ganda, de Femsa. Y Marisun Aramburuzabala, de Tresalia.
El sexteto es dueño de 108 mil cien millones de dólares y que sabrá el contador cuánto dinero significa.
Lo peor serí­a que alguno de ellos comprara unos cuantos billetes de la Loterí­a Nacional y se sacara el Boeing presidencial y que, bueno, todo puede suceder en el paí­s de las maravillas.

CORREDORES: Ha de recordarse, por ejemplo, que existió un tiempo cuando Carlos Slim fue considerado por la revista Forbes el hombre más rico del mundo.
Y solo para convocar el pasado, Slim emergió a la vida pública cuando el presidente Carlos Salinas lo favoreció con la venta de Teléfonos de México, aun cuando, claro, él solito se iniciara como empresario cuando a los 8 años de edad vendí­a dulces en el recreo en la escuela primaria.

BALCONES: Ricardo Salinas brincó de Monterrey con sus tiendas Elektra al escenario nacional en el tiempo del Salinato cuando le fue concesionada la televisora oficial transfigurada en TV Azteca y la que poco a poco ha ido ganando terreno, incluso a Televisa.
Y desde TV Azteca, su fortuna que lo ha colocado entre los 6 hombres más ricos del paí­s rebasando a Emilio Azcárraga Jean, de Televisa, el joven empresario que liquidara a Miguel Alemán Velasco de Televisa y también a la última esposa de su padre, Adriana Abascal.

PASILLOS: Germán Larrea, del Grupo México, es dueño de minas en el norte del paí­s, entre otras cositas, como Pasta de Conchas, allí­ donde un montón de obreros fueron sepultados en un derrumbe y ahora, con AMLO en la presidencia de la república han acordado la búsqueda de los cadáveres como parte del legí­timo respeto a los derechos humanos.
Una, digamos, de sus ví­ctimas fue Napoleón Gómez Urrutia, el lí­der minero que en el sexenio de Enrique Peña Nieto debió exiliarse, en Canadá, por una orden de aprehensión en su contra para aplacarlo.
AMLO, sin embargo, lo resucitó y ahora es senador de la república y formó un nuevo sindicato para tumbar a la CTM, aquella donde Fidel Velázquez Sánchez se perpetuara en el trono obrero porque se tendió al piso priista.

VENTANAS: 6 mexicanos son más ricos, inmensamente ricos, que más del 50 por ciento de la población nacional.
Pero entre otras cositas, además del genio financiero de cada uno para hacer negocios, también se debe, y mucho quizá en varios casos, a los favores presidenciales.
Basta y sobra con tirar incienso al presidente de la república en turno para entrar al paraí­so.