y cuando la temperatura llega a los 4 grados centí­grados.
El anuncio a orilla de carretera para verse en medio de la neblina es el siguiente:
Una mujer guapa, bonita, mira al conductor y a los pasajeros de frente con la mano empuñada y el í­ndice emergiendo de la mano como hablando a una persona concreta y especí­fica, aquella que mire el espectacular.
Y aun cuando la velocidad disminuya por la neblina apenas alcanza a leerse la parte noticiosa del anuncio y que se refiere a los feminicidios en Veracruz y que en los primeros cinco dí­as del mes de enero 2020 dejaran 4 mujeres asesinadas.
Dice:
“Lo que tiene que cambiar es tu machismo.
Respétalas.
Gobierno de Veracruz”.
Es decir, el gobierno de Veracruz llamando a cada macho jarocho, a respetar a las mujeres.
Mucho, demasiado se duda la efectividad y la eficiencia del espectacular para estremecer las entrañas de los hombres esperando un cambio mental.

DOS. Escopetazo limpio
El 3 de enero, en Ixhuatlán de Madero, la tierra del ingeniero Heberto Castillo Martí­nez, dos mujeres fueron asesinadas.
Y a escopetazo limpio.
Y emboscadas cuando habí­an salido temprano a buscar leña al monte y llevaban unas bolsas con naranjas.
Eran familiares. Ofelia José Pérez, de 35 años, y Verónica Tolentino Pérez, de 36 años.
El 5 de enero, en Manlio Fabio Altamirano, apareció el cadáver de Marí­a Elena Silvarán, de 40 años de edad, reportada como desaparecida el viernes 3 de enero.
Iba en su camioneta. Y la secuestraron. Y la mataron. Y tiraron su cadáver. Viví­a en uno de los fraccionamientos de Mata Cocuite, Veracruz, a un ladito del aeropuerto Heriberto Jara.
Ese mismo dí­a, en Pánuco, una mujer apareció descuartizada. Tení­a la cabeza envuelta en cinta canela. Las partes del cuerpo, en bolsas de color negro.
La hallaron frente a un salón social. Estaba en la calle Plan de Ayala, de la colonia Revolución.
Fueron ellas las primeras cuatro mujeres asesinadas en los primeros dí­as de enero. Veracruz, primerí­simo lugar nacional en feminicidios.

TRES. Machos trogloditas
Nadie por ahora ha sido detenido por el cuarteto de crí­menes de mujeres.
Pero si los desplegados del gobierno de Veracruz en las carreteras pidiendo a los hombres que respeten a las mujeres porque “el machismo tiene que cambiar”, caray, estamos en el peor de los fracasos de una polí­tica errática de comunicación social y polí­tica para desactivar la ola feminicida de norte a sur y de este a oeste del paraí­so jarocho que fue en el año 1800 según alucinara Alejandro de Humboldt.
Nadie por ahora conoce la identidad de los feminicidas. Pero si es cierto, como dicen, que los homicidios de mujeres se debe a la violencia intrafamiliar, entonces, mucho, demasiado se duda que los feminicidas, primero, lean el espectacular, y segundo, si lo leen queden convencidos de un cambio en las neuronas, el corazón, el hí­gado y el sexo.
Y más porque los machos trogloditas lo han sido desde toda la historia de la humanidad y ni modo cambien con un simple anuncito a orilla de carretera.
Todo indica que el sexenio de MORENA en el palacio de Xalapa se “está lavando las manos” y la conciencia, ni siquiera, vaya, dando mejoralitos para combatir el liderazgo femincida de Veracruz en el paí­s.