Manicomio ideológico
•Iluminados de Dios •Mucho daño han causado
UNO. Manicomio ideológico
El peor daño a los pobres ha sido y es el manicomio ideológico en que el mundo vive. La lucha de los fanáticos por la ideología ha dado al traste. En el país, por ejemplo, como en Veracruz, de los 8 millones de habitantes de Veracruz seis están declarados en la pobreza y la miseria por el INEGI y el CONEVAL.
Luis Velázquez
Medio millón de habitantes de Veracruz solo hacen dos comidas al día y mal comidas.
600 mil personas de 14 años de edad en adelante son analfabetas. No saben leer ni escribir…, por más más cacayacas oficiales del Instituto de Educación para Adultos.
Antes, mucho antes, el manicomio ideológico giraba, por ejemplo, alrededor del comunismo. Luego, el socialismo. Luego, sus derivados, como el marxismo, el leninismo, el estalismo, el franquismo, el hitlerismo, etcétera.
En México, por ejemplo, el priismo, el panismo, el perredismo y ahora el morenismo.
La ideología reducida en el “ismo” y que ha llevado “a tirios y troyanos” a ofrecer mundos inimaginables, irrealizables, pura venta burda y tosca de esperanzas, utopías, ilusiones, quimeras.
DOS. Los iluminados
El manicomio ideológico llevó, por ejemplo, a José Vasconcelos, convertido en un mesiánico, a soñar con la Raza Cósmica.
Y a Carlos Marx y Federico Engels a gritonear la Dictadura del Proletariado.
Y a Tomás Moro y Eufemio Zapata a cacarear la Comuna, donde todos los seres humanos serían iguales. Igual en pobreza. Igual en miseria. Igual en riqueza.
Y a Francisco Ignacio Madero a soñar con el “sufragio efectivo no reelección” y que era una de las banderas del periódico Regeneración de Ricardo Flores Magón.
Adolfo Hitler soñó con la raza pura.
Los iluminados de Dios que en cada tiempo histórico han existido listos con sus rollos y chorizos para entrar al manicomio ideológico y que tanta daño han causado las ideologías a los pobres.
Ahora, los cristianos evangélicos sienten que Dios los ha bendecido y se creen dueños del poder político, y como son fanáticos, los creyentes más incendiarios, tercos y tozudos, entonces, como ninguno ha visto a Dios ni platicado con él ni tocado, entonces, A.M.L.O., el presidente de la república, es su dios terrenal.
Y, claro, lo defienden con ardor y amor chairo.
Ya se verá dentro de 5 años y cachito el país de miseria, pobreza y jodidez, desempleo, subempleo y salarios de hambre y baja calidad educativa, de salud, seguridad y justicia.
TRES. Demagogia pura
El manicomio ideológico, sin embargo, ha dejado en cada sexenio nuevos ricos y mejores fortunas familiares.
La estadística de los investigadores sociales es infalible:
4 familias (Ricardo Salinas Pliego, Carlos Slim, Bailleres y Germán Larrea) son dueños del 8 por ciento del Producto Nacional Bruto, beneficiados todos desde el poder político.
El Sistema de Administración Tributaria, SAT, con Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto, perdonó miles de millones de pesos a un montón de políticos, empresarios y artistas en impuestos.
Entre ellos, a Marco Antonio Solís, El Buki, José José y Juan Gabriel, Lorena herrera, y háganos favor, a Angélica Rivera, “La gaviota” de Peña Nieto, y a morenistas, claro, Epigmenio Ibarra y Yeidckol Polensky.
Se trata, entonces, de un manicomio ideológico donde los dueños del poder político se reparten las mieles, en tanto el país cada vez se empobrece más y más.
El priismo, el panismo, el perredismo y el morenismo, anexos y conexos, alardean que han mejorado la calidad de vida de la población, pero es mero rollo, fuego pirotécnico, discurso insustancial, demagogos les llamaban en el siglo pasado.