Dinosaurios en el PRI
•Puros cartuchos quemados
•Delegados del nuevo líder
PASAMANOS: El CDE del PRI ha nombrado a sus delegados para la elección de los candidatos a 212 presidencias municipales y a las 3,500 sindicaturas y regidurías.
Y en la lista, y como afirma el de junto, "puros cartuchos quemados" en la hora de la renovación moral del Sistema Nacional Anticorrupción y cuando el dirigente nacional, el taxista Enrique Ochoa Reza, exige a la PGR la cárcel para Javier Duarte por enriquecimiento ilícito, peculado, delincuencia organizada, lavado de dinero e incumplimiento del deber.
Luis Velázquez
Los mismos nombres, las mismas caras y las mismas mañas de siempre.
Además, muchos de ellos que debieran estar jugando con los nietos en un Veracruz que como el resto del país está habitado en su mayoría por una población menor de 30 años de edad.
Y si los mismos priistas visualizan la derrota en las urnas el próximo 4 de junio, entonces, peor tantito, pues nada produce más rechazo en la militancia y la población de que entre las elites políticas se reciclen, como si fueran las únicas. Y más, y como en el caso, gente que trabajó al lado de Duarte y Fidel Herrera Beltrán, con las mismas y peores mañas y con una dudosa y cuestionable biografía política.
Nada, entonces, posibilita que el tricolor pueda levantar en los próximos meses, y por el contrario, parece confirmarse la tesis de que la gran disputa estará entre el PAN y MORENA de Andrés Manuel López Obrador, la misma, incluso, que se daría en el año 2018 con cinco elecciones de por medio.
Los nombres de Anabel Ponce (delegada en Tuxpan) y Ricardo Landa (Papantla) y Luis Sardiñas (Martínez de la Torre) sólo siembran la duda y la incertidumbre, porque están habituados al PRI exitoso, cuando ahora son oposición.
Ellos mismos, incluso, que del corredor nunca pasaron, ni siquiera, vaya, ganando una elección en las urnas.
Nada puede esperarse, por ejemplo, del otro dinosaurio, Tomás Montoya Pereyra como delegado en el puerto jarocho, donde desde ahora la derrota priista está anunciada en un territorio escabroso sin figuras rojas populares y menos con un panismo creciente.
Ene número de veces Ismael García Huesca, el otro yo del ex cacique de pescadores, Ramón Ferrari Pardiño, ha sido delegado del tricolor en Boca del Río, siempre con derrotas, y ahora de nuevo lo envían, incluso cargando encima una derrota anunciada.
Peor tantito: tan mal anda el PRI que la ex diputada local por el dedazo, fast track, de Fidel Herrera, la profe Elena Zamorano Aguirre, fue nombrada delegada en Medellín, como si fuera la gran ideóloga, luego de que su paso en el Congreso fue oscuro y gris.
BALAUSTRADAS: Juan Humberto García fue secretario de Desarrollo Agropecuario en el Fidelato y el góber fogoso le endilgó el apodo de "El Johnny Walker" por su adicción al whisky, y luego de que perdiera la candidatura a diputado federal, el PRI lo resucita, como a los anteriores, y lo envía de delegado en Orizaba, sin que se le conozca ninguna operación política exitosa.
Otro resucitado es Raúl Ramos Vicarte (sus dos hijitos notarios públicos fast track) enviado a Córdoba, donde Javier Duarte conociera a su trío de amigos (Moisés Mansur, Jaime Porres y Franky García) y quienes lo acompañaron en el duartazgo, uno que otro hasta como su prestanombre.
Y, por tanto, si hay indignación popular en contra del duartazgo en el resto de Veracruz, peor en Córdoba, donde el alcalde es panista y por ningún concepto entregará la ciudad a la oposición priista.
La reserva electoral del tricolor, partido de oposición en Veracruz, es tanta que, por ejemplo, también resucitaron a Crisóforo Hernández Cerecedo como coordinador regional en la Zona Norte cuando apenas hacia el primer semestre del año anterior sufrió una derrota con su candidato a gobernador, Héctor Yunes Landa, operando la misma región geográfica.
El único que, digamos, podría salvarse del paquetito de delegados es Mario Tejeda Tejeda, líder estatal de Vía Veracruzana, mejor conocida como "Los viagras", porque fue enviado al distrito de Cosamaloapan, donde se ha especializado en la materia.
Con todo, incluso, que siempre lo envían a la misma zona como si fuera, oh paradoja, el único capaz.
ESCALERAS: Discípulo de Adolfo Mota, a quien el senador Emilio Gamboa Patrón ha salvado de la Yunicidad, apadrinado por Sebastián Lerdo de Tejada, QEPD, y el elbista Roberto Campa Cifrián, quien lo salvara en varias ocasiones cuando pretendían tumbarlo del ISSSTE como delegado federal, Renato Alarcón es el nuevo presidente del CDE del PRI.
Nunca, claro, estará a la altura, digamos, del profe Rafael Arriola Molina líder priista con Rafael Murillo Vidal (1969/1974) y de Manuel Carbonell de la Hoz dirigente del tricolor cuando Fernando López Arias (1962/1968).
Incluso, tan mal empezó que unos priistas (Érika Ayala, Carlos Aceves y Marlon Ramírez) le levantaron un muro Donald Trump y "brillaron por su ausencia" en su toma de posesión.
Ahora, su primer acto partidista ha sido nombrar a los delegados de norte a sur y de este a oeste para llevar las elecciones municipales, pero como en el arcoíris ha resucitado tantos dinosuarios expresa la pobreza política en que están atrapados, sin nuevos cuadros en un Veracruz cambiante.
Y lo peor, con un gobernador de oposición fuerte, poderoso y vigoroso que trae azorrilladas a las elites priistas que apenas, apenitas en el sexenio anterior eran los jefes máximos.