Es domingo hacia el mediodí­a. El góber azul nada en su alberca en la mansión frente a la desembocadura del rí­o Jamapa en el Golfo de México que como dijera Andrés Manuel López Obrador “ya quisiera Barack Obama”. Está (y sigue) feliz como dijo en la toma de posesión. Nada y toma un ligero buche de vino blanco, bien frí­o, tibia el agua de la alberca, tranquilo el mar, la brisa marina, el sol, su paraí­so.
--¿Cuál es el último libro que leí­ste?
-- Releo “La maleta de mi padre” de Orhan Pamuk. Es una filosofí­a de vida.
--¿Te impactó?
--Todos los libros me impactan. Leo desde mi niñez.
--Era famosa en el pueblo la leyenda de que en las noches te tapabas con una sábana, prendí­as una lámpara y leí­as.
--Siempre he leí­do. A veces tres, cuatro libros a la semana.
--Y todaví­a el ejercicio diario.
--Soy disciplinado y soy espartano.
--Tu biógrafo dice que como estudiante en la UV fuiste muy pobre.
--Mi vida fue austera. Luché contra la pobreza y luché en la facultad de Leyes por ser “un niño de dieces”.
--Espérate, Héctor Yunes Landa, tu exprimo, alardea de que él fue “el niño de dieces”.
--Cada quien en su tiempo.
--¿Le guardas rencor?
--El odio no ha nacido en mí­.
--Esa es frase de Gustavo Dí­az Ordaz.
--Yo se la oí­ a Jesús cuando perdonó a Judas.
--Sí­, sí­, Plutarco Elí­as Calles y Francisco I. Madero creí­an en los médiums.
--Acuérdate, a Elí­as Calles apodaban “El turco” igual que a nosotros en mi familia allá en el pueblo.

“GENES SON GENES Y VíSCERAS, VíSCERAS”

--En la mayorí­a de las fotos siempre andas con la mirada a la defensiva y contraofensiva, en estado de alerta.
--Es mi estado de ánimo. Así­ he sido siempre. Genes son genes, ví­sceras son ví­sceras.
--Pero ¿y los años en la polí­tica, y la experiencia, y las derrotas, y los triunfos, y las batallas?
--La vida como la polí­tica es una batalla diaria. Y las guerras como la polí­tica siempre “sacan lo peor de los hombres” como decí­a Lázaro Cárdenas en la novela histórica de Pedro Angel Palou, “Tierra roja”. Yo sólo me defiendo.
--26 años priista, 13, 14 panista. Batallas duras has tenido.
--Y aquí­ estoy. El fogoso quiso aniquilarme. Y me lo chingué. Duarte quiso despojarme de mi triunfo y me lo fregué.
--Eres un peleador callejero. También te llaman fajador de cantina.
--Soy.
--Pareciera que el destino de la polí­tica “es la lucha de todos contra todos” como también exclama Cárdenas en “Tierra roja”.
--¡Qué viva Cárdenas, pero Lázaro!
--Te citan en “Los demonios del Edén”. Duarte interpuso denuncias penales en tu contra en la PGR.
--Nunca Lidya Camacho demostró sus acusaciones. Y Duarte tampoco. ¡Pobrecito! Anda huyendo de la PGR desde hace 78 dí­as. Se los voy contando.
--¿Vives para odiar?
--Vivo para ser. Antes, estaba solo. Ahora tengo a mis hijos, a mi esposa, a los nietos. Tengo, vaya, 39 sobrinos.
--¿Ninguno está ni estará en el gabinete?
--¡Ninguno! Reuní­ a todos y les dije que me dejaran gobernar.
--¿Por eso hablas de absoluta, absoluta, absoluta honestidad?
--Así­ será. Al primer funcionario que descubra, y a todos tengo vigilados, los refundaré en la cárcel.
--Entonces, tú serás el más honesto. El honesto entre los honestos.
--¡No seré! ¡Soy!

“LO DEJO CLARO: NADA DE REPRESIÓN”

--Muchos te respetan por el (presunto) grado de información que tienes. La CIA y la KGB quedarí­an impresionados. Casi casi el rey del espionaje.
--Información es poder decí­a Fernando Gutiérrez Barrios. La guerra sucia. Siqueiros y Demetrio Vallejo, presos. La captura y liberación de Fidel Castro y Ernesto “El ch锝 Guevara. Para qué sigo…
--¿Se puede domeñar a Veracruz como si fuera un potro salvaje, como dice Palou del paí­s en tiempo de Cárdenas?
--Se ha de gobernar con la ley por delante. Y en el tiempo de la corrupción polí­tica, con la honestidad a prueba de bomba.
--Entonces, ¿nada de represión?
--¡Nada! ¡Simplemente la ley!
--¿Y la lideresa priista, Topacio, presa en el penal de Pacho Viejo?
--Es una provocadora. Me la enviaron.
--¿Quién, quiénes te la enviaron?
--El priismo que patalea como dinosaurio!
--Lo dice Tito Monterroso: “Y al despertar el dinosaurio seguí­a ahí­!”.
--Es el cuento más corto del mundo. Pero la polí­tica es de realidades.
--¿Fuiste priista durante 26 años?
--Fui. Cárdenas también lo fue. Y Andrés Manuel López Obrador. Y Porfirio Muñoz Ledo. Y Manuel Bartlett. Y Dante Delgado. Y Arturo Núñez. Y Jaime Rodrí­guez, “El bronco”. Y mi compadre José Luis Lobato Campos, QEPD. Y Rafael Moreno Valle.
--¿Reproches a ellos?
--¡No, no, no! Historia. Simplemente, historia.

“PACHO VIEJO ESPERA A JAVIER DUARTE”

--¿Dónde te gustarí­a vivir?
--¡Aquí­, en Boca del Rí­o!
--Dicen que te estás construyendo una recámara en el palacio de gobierno, porque ahí­ vivirás, para estar disponible las 24 horas del dí­a.
--¡Déjalos que hablen!
--¿Qué cárcel prefieres para Javier Duarte?
--Pacho Viejo es mi preferida.
--¿Y para Arturo Bermúdez y Gabriel Deantes Ramos?
--Pacho Viejo.
--¿Y para Gina Domí­nguez y Alberto Silva Ramos?
--Pacho Viejo.
--¿Y para Fidel Herrera Beltrán?
--Lo enviaré a Amatlán. Allí­ van los narcos. Él siempre ha sido el Zeta 40.
--¿Cómo puedes odiar tanto y hacer el amor sin urgencias?
--No odio, insisto. Sólo aplico la ley. Y soy un mí­stico del amor.
--Dicen que el poder polí­tico es más intenso que el poder del amor.
--Son pasiones paralelas. Y cada una en su lugar.
--¿Duermes tranquilo, odiando tanto?
--No duermo. Ronco. Y el estado máximo del sueño es roncar.

“QUISIERA QUEDAR ATRAPADO CON DUARTE EN UN ASCENSOR”

--¿Con quién te gustarí­a quedar atropado en un ascensor?
--Con Duarte. Lo mirarí­a a la cara. Lo retarí­a. Y le partirí­a la madre. Causó mucho daño social en Veracruz.
--¿Te gustarí­a que Duarte fuera el primer polí­tico muerto este año en Veracruz?
--Quizá. Pero que muriera de angustia en Pacho Viejo, sin las tortas de “La rielera” y sin atragantarse con Frutsis.
--¿Ni siquiera eso le permitirí­as?
--Nada. Además, dada su peligrosidad social será encajuelado en la peor crují­a, la más solitaria, en un cuarto con la luz prendida dí­a y noche, con perros amaestrados vigilándolo, con celadores de tres turnos para que nunca se cansaran ni fueran corrompidos.
--¿Le permitirí­as la visita conyugal?
--¡Claro, es un derecho humano! Pero siempre y cuando fueran sus barbies.
--¿Serí­a una prueba muy dura para ellas?
--Los amores sólo se confirman en la enfermedad y en la cárcel.

“LA POLíTICA ES VIVIR SIEMPRE EN TENSIÓN”

--Si pudieras tener un súper poder ¿cuál te gustarí­a?
--Ser Dorian Gray.
--Ya lo eres...
--Sí­. Pero me faltó tiempo para el hedonismo. He vivido para hacer polí­tica las 24 horas del dí­a.
--¿Qué es la polí­tica para ti?
--Vivir siempre en tensión.
--¿Te relaja nadar?
--Cada minuto lo vivo a plenitud alrededor de la polí­tica. Por eso arrastro una deuda paternal con mis hijos y ahora dedico la mayor parte del tiempo a los nietos. Quiero recompensarlos.
--Tus hijos están en todo a tu alrededor.
--Ya lo dijo José López Portillo. Son “el orgullo de mi nepotismo”.
--Claro, en la polí­tica sólo se hereda a los hijos.
--¡Claro!
--¿Qué le recomendarí­as a Duarte?
--¡Que se entregue!
--Eso mismo le dijo Héctor Yunes.
--Pero nunca lo obedeció.
--¿A ti he escucharí­a?
--Si la PGR no lo detiene en tiempo y forma, iré por él. Estoy afinando el expediente con los recursos estatales mal habidos.
--Eso mismo dijiste que acalambrarí­as a México.
--¿Y cómo sabes que no acalambré a México? ¡Acalambré a Los Pinos! (lvr)