Amatlán.”” Cuatro sujetos intentaron plagiar al dirigente cañero cenecista del ingenio San Nicolás, Alberto Figueroa Suárez, cuyos escoltas se enfrentaron a balazos con los delincuentes, quienes huyeron en un vehí­culo, pero fueron perseguidos desde la localidad La Patrona hasta la cabecera municipal de Amatlán, donde fueron acorralados, detenidos y golpeados por el personal de seguridad del lí­der cañero, para luego ser entregados a las autoridades.

Alberto Figueroa, conocido como "El Chapetes" y vecino de la localidad La Patrona, es el padre del joven Alexander, plagiado en el año 2014, y cuyo secuestro ha sido denunciado publicamente por su familia, para exigir a las autoridades que aparezca.
La persecución culminó a unas cuadras del Palacio Municipal, y generó pánico entre la población, por las detonaciones de las armas.

Aproximadamente a las 15:00 horas de este martes, el dirigente cañero de la CNC del ingenio de San Nicolás, al llegar a su casa, en la congregación La Patrona, observó que cerca se hallaba una camioneta marca Nissan, doble cabina, color gris con camper y placas de circulación MTS-5062 del Estado de México, con cuatro sujetos a bordo quienes, según se conoció posteriormente, pretendí­an extorsionar a su familia.

De acuerdo a informes recabados, el dirigente llegó a su casa en su camioneta marca Ford, tipo Lobo, color guinda, acompañado de sus escoltas.

Sin embargo, cuando iba a entrar a la casa, los sujetos de la camioneta Nissan le empezaron a disparar, aparentemente con la intención de llevárselo, pero sus guardaespaldas repelieron la agresión, iniciándose una persecución por la carretera estatal Córdoba-Amatlán, y luego los vehí­culos entraron a la cabecera municipal de Amatlán, provocando pánico entre los habitantes.

Al llegar a la calle Ignacio Allende y la avenida 16 de Septiembre, a dos cuadras del Palacio Municipal, debido a que los delincuentes desconocí­an las vialidades, circularon en sentido contrario en una zona de topes, donde fueron alcanzados por el personal de seguridad del lí­der cañero, que a punta de balazos logró someterlos y tras bajarlos de la unidad, los tiraron en la banqueta de una escuela primaria, donde los golpearon.

Los habitantes, asustados por los balazos pidieron auxilio, acudiendo al lugar elementos de la Policí­a Municipal, quienes esposaron a los sujetos y más tarde los entregaron al Mando Único de Córdoba, para ser puestos a disposición de la Fiscalí­a Regional.

En el lugar quedó la camioneta Nissan, gris, de los secuestradores, presentando al menos cinco impactos de proyectil de arma de fuego, mientras que la unidad del lí­der cañero registró tres balazos.

Posteriormente, al lugar se presentó personal de la Fiscalí­a Regional, así­ como peritos de los Servicios Periciales para realizar las inspecciones oculares y ordenar el retiro de la camioneta de los delincuentes, ya que previamente el agraviado se retiró del lugar con su vehí­culo y sus custodios, sin esperar la llegada de las autoridades ministeriales.