cargando

En twitter:

Las 3 del Patí­bulo
Lunes 01 septiembre, 2014

Secretario de Seguridad se lavó las manos…

El secretario de Seguridad se lavó las manos en Coatzacoalcos, diciendo que sólo cuidan las avenidas y poblados, y cada familia atienda su casa. Fosas clandestinas han sido en la calle

Ellos cuidan las calles, pero todas las fosas clandestinas aparecidas en la tierra jarocha han sido en ranchos, donde los malosos han sepultado a los secuestrados en la ví­a pública

En Coatzacoalcos, el secretario de Seguridad Pública de Veracruz (SSP) pronunció un discurso estelar. Igual que Poncio Pilatos, se lavó las manos… sobre la inseguridad de norte a sur de Veracruz.

Dijo, por ejemplo, que la dependencia es responsable de garantizar la seguridad en la vida y en los bienes, pero solo en la calle, en las carreteras, en los pueblos.

Y que en cambio, cada familia es responsable de la seguridad en sus hogares.

Oh paradoja, un repaso deja testimonio inapelable de que si Veracruz ocupa el segundo lugar nacional en secuestros, por ejemplo, la mayorí­a, más del 90, 95 por ciento, han sucedido en la calle.

Pero, además, lo peor acontecido de norte a sur de la tierra jarocha en los últimos tres años con nueve meses han sido las fosas clandestinas que en el Veracruz de Agustí­n Acosta Lagunes eran los pozos artesianos, convertidos en cementerios privados, sobre todo, en la ruta de Omealca a Tezonapa, en los lí­mites con Oaxaca, el poblado de Cosolapa, donde una calle divide al par de entidades federativas, tiempo aquel del cacique Toribio “El toro” Gargallo.

Así­, y por ejemplo, bastarí­a recordar los siguientes episodios ocurridos, todos, en la ví­a pública.

Las fosas clandestinas en el puerto de Veracruz, donde cuatro marinos ajusticiados por los malosos fueron sepultados.

Las fosas clandestinas en Cosamaloapan, donde hallaron unos cuantos de los 26 desaparecidos, entre ellos, la sobrina del exalcalde de Carlos A. Carrillo.

Las 11 fosas clandestinas en Tres Valles, en el rancho “El diamante”, con un total de 32 cadáveres.

La fosa clandestina en Las Choapas, donde fuera sepultado el reportero de la fuente policiaca, Gregorio Jiménez.

Las fosas clandestinas en Agua Dulce, con cuatro cadáveres y un cráneo.

Las fosas clandestinas en Tecolutla, en la franja costera de Costa Esmeralda.

El tiradero de 32 cadáveres en el paso a desnivel de la avenida Ruiz Cortines, en Boca del Rí­o, frente a la plaza comercial “Las Américas”, en la ví­spera de la cumbre nacional de procuradores de Justicia y de presidentes de los Tribunales Superiores de Justicia de la república.

La cabeza humana dejada en la madrugada, un fin de semana, en un antro de Boca del Rí­o para aterrorizar a los boqueños y jarochos y turistas.

El cadáver tirado frente a las antiguas instalaciones de Telever, la filial de Televisa, en las inmediaciones de la avenida Salvador Dí­az Mirón, a unos cuantos pasitos de la Central Camionera del ADO.

Los tres cadáveres tirados en las goteras de la ciudad de Xalapa, a un ladito de la entrada a la plaza comercial de “Las Américas”.

Es decir, las visiones más apocalí­pticas en Veracruz del sexenio próspero han ocurrido en la ví­a pública, y de acuerdo con la Constitución Polí­tica, la Secretarí­a de Seguridad Pública es la encargada de garantizar la seguridad en la vida y en los bienes para así­ fortalecer el llamado Estado de Derecho en un Veracruz definido por el sacerdote José Alejandro Solalinde Guerra, director del albergue de migrantes, “Hermanos en el camino”, como el peor rincón del paí­s para transitar.

En Coatzacoalcos, el titular de la SSP habló, pero la lengua terminó sangrándole, porque su discurso se le ha revertido, y más, mucho más con el último acontecimiento, como es el secuestro de la niña de 5 años, Karime Alejandra, que ya lleva dos meses, y que fuera ocultado la semana anterior, porque Veracruz era la sede de la República Federalista con algunos gobernadores de la CONAGO, los senadores priistas y del partido Verde y una parte de secretarios del equipo legal del presidente Enrique Peña Nieto que cacarearon en Boca del Rí­o los grandes beneficios (ajá) de las reformas estructurales y leyes secundarias.

De cara hacia el pasado, nunca, antes, la prensa escrita ni tampoco la memoria colectiva habla de fosas clandestinas. Quizá se dieron en el porfiriato, cuando el castillo de San Juan de Ulúa, por ejemplo, con todo y su reliquia histórica, era utilizado como cárcel para los disidentes, inconformes y contestatarios al dictador.

Pero en fin, está claro que el secretario de SSP ha llegado a su principio de Peter y los hechos lo han rebasado desde hace ratito… (lvr)


1 comentario(s)

Rosendo De la Paz Zúñiga 01 Sep, 2014 - 14:10
Bermudez
Róbate un bozal, y digo róbate, por que es lo único que sabes hacer.

Deja un comentario

Acerca del blog

Blog de noticias desde Veracruz.
Aquí, deseamos contar la historia de cada día.
Y cada día es un nuevo comienzo.
Y todos los días se empieza de cero...

Portal de noticias de Veracruz.