de Zongolica.
Entonces, la familia y los vecinos siempre inculparon a unos soldados del Ejército.
Pero el presidente Felipe Calderón Hinojos y el gobernador Fidel Herrera Beltrán siempre defendieron a los soldados.
La Corte Interamericana de Derechos Humanos (COIDH) declaró que el Estado mexicano es responsable por la “violación sexual, tortura y muerte” de Ernestina Ascencio Rosario, perpetradas en 2007 por parte de un grupo de soldados en la sierra de Zongolica, Veracruz.
El Estado incumplió su deber de brindar atención médica oportuna, por lo que concluyó que la violación sexual y “graves lesiones” causaron la muerte de la mujer indígena náhuatl que tenía 73 años de edad.