Cuarenta millones de paisanos de México en EU. Y de los cuales, más de un millón son originarios de Veracruz y una camada de los cuales deportados.
De aquí partieron desempleados, subempleados y con salarios pichurrientos de cinco y seis mil pesos.
Un ratito, digamos, en el paraíso terrenal.
Ahora, de regreso a Veracruz para enfrentar en la era Nahle el mismo infierno de antes.
El objetivo de Trump con las recompensas es detener y deportar a cincuenta mil ilegales más.
El operador, el ICE, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas.
Incluso, sus policías encapuchados persiguiendo, golpeando y deteniendo a los migrantes.
Todavía peor:
Grandes contratistas privados (y quienes han operado en frentes bélicos de EU en el otro extremo del mundo) a cargo de la feroz persecución.
Contratos millonarios.
Peor tantito: El ICE les entregó una lista de ilegales con domicilios y trabajos para rastrearse y capturarlos.
Trump, con el terrorismo de los aranceles.
Las presiones a México para entrar al territorio nacional para perseguir a los carteles, sicarios y malandros acusados de terroristas.
Diez mil agentes más del ICE.
Tres mil agentes más en las patrullas fronterizas (Milenio, Témoris Grecko).
Y al mismo tiempo, Trump chuleando “a tiro por viaje” a la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.
El doble, triple, discurso.
Además, obsesionado con ganar un Premio Nobel de la Paz.
Simplemente, más, mucho más se esperaría del presidente más poderoso de la tierra.
Trump, apretando las tuercas y en escalada libre.
Y desde México, la convivencia política.
El discurso diplomático.
El buen vecino, ajá.
Mejor dicho, vecinos distantes.
Y en nombre de su poder incalculable, apretando tuercas.
Digno, muy digno, Luiz Inácio Lula da Silva, el presidente de Brasil.
Belicoso, y de frente, Nicolás Maduro, de Venezuela.
Sin rodeos, Gustavo Petro, el exguerrillero presidente de Colombia.
Poder contra poder entre Trump y Vladimir Putin.
Y entre Trump y China.

2 (Jodidez en E.U.)

¡Vaya destino laboral de los migrantes con y sin papeles:
Uno: en los ranchos agropecuarios de Estados Unidos. Como el actor Julio Alemán interpretando a un migrante en el siglo pasado en el filme “Deportados”.
Dos: en la industria de la construcción, ajá, como peones. Pintores de brocha gorda. Albañiles. Etecé.
Tres: en restaurantes. Cocineros. Lavando platas. Aseando los baños. Mandaderos. Meseros.
Viviendo amontonados en un departamento.
Guisándose ellos mismos.
Con todo un migrante lo dice:
“Preferible ser pobre en EU que en México”.

3 (De los Ku Klux Khan a los Rangers)

En EU, la feroz persecución, primero, contra la gente de color. El famoso grupo represivo de los Ku Klux Khan.
Desde hace ratito, en EU, la feroz persecución contra migrantes.
Incluso, rangers, ex combatientes de EU en los frentes bélicos en el otro extremo del mundo, cazando migrantes con escopetas y rifles de alto poder en el paso por el desierto.
Ahora, premiados con trescientos dólares por cada migrante detenido.
En vez de cazar palomas, cazar personas.
¡Ah, la grandeza democrática de EU con Trump!
En México, felices si Trump alaba a la presidenta.
Los gobernadores de México (24 de MORENA), incapaces de animar y reanimar la creación de empleos dignos, estables y pagados con justicia laboral.
En contraparte, “acarreando” vítores y aplausos en cada informe de gobierno.
Con Rocío Nahle, “se escucha con humildad y responde con eficacia” como dijo su vocero en comparecencia en el Congreso local.
¡Hosanna, hosanna!

4 (Un árbol para colgarse…)

Con tanto infortunio en sus países…
Y con Trump en la Casa Blanca…
En la búsqueda de días y noches mejores, ninguna duda de que a veces los migrantes desearían un árbol cerca para colgarse.
Pero, bueno, y por ventura, los hijos, la esposa, los padres ancianos, permiten seguir luchando.
Y con los guantes puestos y trepados en el ring, empujando la carreta aunque la carreta esté destartalada.
Cero desaliento. Cero desguances. Cero titubeos.
En sus países, a cada migrante únicamente espera el infierno laboral.

5 (Migrantes declarados narcos)

La Casa Blanca de EU advierte “moros con tranchetes” por todos lados.
A menos, sea terrorismo puro.
Por ejemplo: Ahora, la alerta (y la orden) a las empresas transmisoras de dinero para revisar con lupa las transferencias de dólares a México.
Uno: el dinero de los migrantes “relacionados con una posible infracción de la ley”.
Dos: el riesgo de lavado de dinero.
Tres: el financiamiento al terrorismo.
Cuatro: el narcotráfico de por medio utilizando, incluso, a laos migrantes.
Cinco: vigilar que los cárteles mexicanos obtengan recursos por tal vía.
Y seis: una alerta sobre el contrabando de petróleo en la frontera suroeste de EU asociado con cárteles mexicanos y manipulando a migrantes.
Nunca un presidente de EU ha vejado y humillado y ofendido tanto a los migrantes.
Y al gobierno mexicano.
Pero, bueno, la actriz Salma Hayek, felicitado por la presidenta Claudia Sheinbaum por defender a los migrantes cuando era indocumentada y más feliz y más dichosa. (lv)