AMLO, camino a los altares
1 (Fiesta nacional el día de su nacimiento)
Igual que con los emperadores Moctezuma, Cuitláhuac y Cuauhtémoc...
Igual que con los Virreyes españoles...
Igual que con Porfirio Díaz Mori y su paisano Benito Juárez...
Igual que con Antonio López de Santa Anna...
Igual que con el jefe máximo, Plutarco Elías Calles
Igual que con los más de setenta años de la denominada “Dictadura perfecta” de los priistas…
En México, “hoy, hoy, hoy” (Vicente Fox Quesada), el desarrollo exponencial del llamado “El país de un solo hombre”.
El país de Andrés Manuel López Obrador. AMLO. El expresidente.
Por ejemplo, la propuesta en el Congreso de la Unión de una diputada federal y del Partido del Trabajo, filial, anexo y conexo de MORENA, de establecer como día patrio la fecha de nacimiento de AMLO.
El 13 de noviembre.
Además, de una vez por todas fijar que el 13 de noviembre (¡te queremos, AMLO, te queremos, hosanna, hosanna!) sea el día, el gran día del Bienestar Social.
El gran bienestar social con las bequitas bimensuales de seis mil pesos (tres mil al mes) para la gente en la miseria y la pobreza y las señoras de sesenta años en adelante y los jóvenes construyendo el futuro y los campesinos sembrando árboles.
Además, insólito pero el 13 de noviembre Día Mundial de la Bondad.
La bondad de AMLO.
La diputada del PT, Ana Karina Rojo Pimentel, “cortándose las venas”, inmolándose en la mesa de los sacrificios, por AMLO.
Gratitud eterna.
Admiración eterna.
Amor eterno.
“El país de un solo hombre”.
El jefe máximo del siglo XXI.
La adoración sin límites a un hombre.
¡Qué Porfirio Díaz y Benito Juárez y Francisco Ignacio Madero ni que nada!
AMLO. AMLO. AMLO.
El día de su nacimiento, fiesta patria.
Fiesta nacional.
Digamos, como el 15 de septiembre… con la fiesta patria.
El 20 de noviembre… con la revolución.
Pero, bueno, si en el país hay días sacrosantos como, por ejemplo, el día de las madres, el día del niño, el día de los profes, el día de la Raza, el día de los abuelos, el día de los compadres, el día de los amantes, el día de la comunidad sexual, ningún inconveniente para crear y recrear el Día de AMLO con su fecha de nacimiento.
Lo decía Calígula, el emperador romano: “Hay días cuando me siento un dios”.
¡Hosanna, hosanna!
Ojalá que pronto, antes de que el gallito bíblico cantara tres veces, la jerarquía eclesiástica cavile y sopese la posibilidad de convertir a AMLO en un santo laico.
Sabrá el chamán el número de niños, hijos de morenacos, bautizados con el nombre de Andrés Manuel.
Pero nada raro ni extraño sería que en los cuatro puntos cardinales de la república amorosa y humanística sean bautizados con el nombre de AMLO pueblos, rancherías, ciudades, calles y avenidas, escuelas, centros de salud, parques y jardines, etecé, etecé.
Incluso, rebasando por la izquierda, el centro y la derecha a Miguel Alemán Valdés, el expresidente con mayor número de evocaciones en pueblos y entidades federativas.
AMLO, camino a los altares.
Con todo y que los panistas Vicente Fox Quesada y Felipe Calderón Hinojosa fueron los primeros en derrotar al PRI con los más de setenta años en el poder presidencial.
Deificar al jefe máximo.
Entronizarlo como un dios.
El ser superior enviado a la tierra para redimir a esta nación con seis de cada diez de habitantes en la miseria, la pobreza, la jodidez, el desempleo, el subempleo, los salarios pichurrientos, la migración a Estados Unidos, la zozobra, la incertidumbre, la inseguridad, la impunidad y las peores calidades educativas y de seguridad.
AMLO, más, mucho más allá de Francisco Ignacio Madero y Lázaro Cárdenas del Río.
Los feligreses de su capilla, cien por ciento fanáticos.
Y, bueno, si Lázaro Cárdenas fue bautizado como “El Tata”, AMLO sería “El Tata Dos”.
“El Tata” del Edén que refugiado en la selva chiapaneca… como cuando en momento estelar, Antonio López de Santa Anna se aisló en la cueva de “La tía Chana”, en Soledad de Doblado.
2 (Crear santos para el altar patrio)
Si la iglesia católica tiene número insólito de santos…
Y si en el siglo pasado el PRI creó y glorificó y enalteció a tantos héroes patrios…
Y si el Vaticano sigue creando santos para honrarse en los altares…
Y si Benito Juárez nunca ha muerto…
Y si en cada pueblo hay estatuas de ex presidentes de México…
Entonces, caray, en el tiempo guinda y marrón también se necesitan nuevos héroes.
Nuevos mesías.
3 (Basta una palabra de AMLO…)
La naturaleza humana es así:
Amor y desamor.
Dicha y desdicha.
Perdón y resentimiento.
Días buenos y días malos.
Inclusión y exclusión.
Vacas gordas y vacas flacas.
Y también, humildad y petulancia.
Humildad y frivolidad.
Humildad y soberbia.
Ego y súper ego.
Engreimiento.
Altivez.
Soberbia en el más alto decibel.
Hombres mortales e inmortales.
Hombres enanos y hombres gigantes.
Una sola palabra de AMLO, el ex, bastaría para frenar el tsunami de admiración del PT para cabildear que su fecha de nacimiento sea festín nacional.
Y si llegara a establecerse significaría que AMLO estuvo de acuerdo. (lv)