No más vivir “atrapados y sin salida” en la ansiedad. La ansiedad del celular.
No más distracciones pedagógicas en los colegios por culpa del celular y que ha llevado a un bajo, bajísimo rendimiento.
No más sentarse a comer al mediodía con la familia y con el celular a un lado.
No más estar en el baño con el celular a un lado.

DOS. No más Chicos Zombies

En el palenque público tanto de maestros como de padres de familia, prohibido el uso de computadoras portátiles, a excepción, digamos, para la tarea escolar y la tarea colectiva.
No más Tabletas.
No más uso de auriculares.
No más uso de audífonos.
No más muchachos, tanto mujeres como hombres, convertidos en unos autómatas.
Casi unos robots creados por la Inteligencia Artificial.
No más Chicos Zombies y en lo que por lo general el celular y la Tableta han convertido a la llamada Generación Z.
Incluso, en vez de denominarse y como hasta ahora Generación Z y con sus propias características le llaman ya la Generación Zombie.

TRES. Nada como la convivencia

En los colegios públicos, los maestros apostando a la convivencia estudiantil de los chicos.
Digamos, como suele mirarse en las películas de Estados Unidos sobre los muchachos en las escuelas sentados en el jardín todos alrededor como si tuvieran una fogata al centro y dialogando.
Y, claro, sin el celular a un lado y/o en la mano y/o en la bolsa.
La tecnología, desde luego, la gran herramienta en materia informativa.
Pero al mismo tiempo, sembrando y generando mentes dañadas y distorsionadas y obsesivas con el aparatito.
Y como si estuvieran resolviendo los grandes problemas de la vida universal.

CUATRO. Lo más duro y rudo

El celular como una obsesión. Vaya, hasta durmiendo con el aparatito en el buró y/o hasta debajo de la almohada para estar pendiente en lo más profundo del viaje onírico.
Y desde que “Dios amanece hasta cuando anochece”, tanto los chicos como las madres y las esposas y los padres y los maridos pegados al celular.
La moda en el mundo. Pero en Florida tomaron la gran decisión.
¡Hosanna, hosanna, Dios existe!

CINCO. ¿Y cuándo la SEP y la SEV?

Ya veremos cuándo la secretaría de Educación Pública (SEP) de México decide y con firmeza tomar la misma filosofía pedagógica y social y mental que en Florida.
Y, claro, de igual modo la secretaría de Educación de Veracruz (SEV).
Digamos, a tono con la firmeza inalterable de combatir la comidita chatarra y el consumo de refrescos de cola en el sistema educativo nacional.
La comidita chatarra, ya se sabe, para frenar, ajá, el desarrollo de la panza y la papada.
Y la prohibición del celular para disminuir el daño neurológico en los chicos. Incluso, niños que suelen llegar al salón de clases con el celular en la mano. (lv)