Y justicia social para corregir 103 (ciento tres) “pensiones millonarias” de igual número de exfuncionarios públicos y que en el transcurso de los seis años de AMLO, el ex, y sexenios panistas y priistas anteriores, nunca fueron tocados.
Por ejemplo, el trascendido del director general, Martí Batres Guadarrama, revelando que el expresidente Vicente Fox Quesada tenía una pensión de 309 (trescientos nueve) mil 54 pesos.
Y únicamente por los seis años como gobernador de Guanajuato y los seis años como presidente de la república
Ahora, dice Batres, quedó en 32 mil 906.70 pesos.
Caray, desde el año 2002, Fox recibía su pensión de más de trescientos mil pesos mensuales.
Es decir, veintitrés años en el paraíso terrenal y celestial de las pensiones.

DOS. Privilegiados 102 mil políticos más

En igualdad de circunstancias, ciento dos políticos más abusando con todo y en todo con las pensiones.
Y en nombre de la política y los cargos públicos desempeñados.
Y tanto de MORENA como del PAN y el PRI y el PRD y partidos anexos y conexos.
Todos ellos, dice Batres, interponiendo y ganando resoluciones judiciales para quedarse con “hacha, calabaza y miel” con las pensiones.
Y peor, mucho peor, cuando miles y millones de pensionados apenas, apenitas, reciben una pensión de dos mil pesos mensuales.

TRES. La profe millonaria

El mismo caso, por ejemplo, de una modesta y sencilla maestra de un jardín de niños.
En el mes de enero del año 2000, con Vicente Fox como presidente de la república, la maestrita empezó a recibir 210 mil 207 pesos mensuales de pensiones.
En los 25 años que la siguió cobrando recibió, ni menos ni menos, 63 (sesenta y tres) millones de pesos de pensión.
Ahora, con la cuchilla Batres Guadarrama, le quedó en 31 mil 366.80 pesos al mes.

CUATRO. Derechos humanos atropellados

Muchos, demasiados, excesivos abusos y atropellos a los derechos humanos de la mayoría poblacional con el asunto de las pensiones.
Sabrá el chamán del número de abusos cometidos por montón de políticos y exfuncionarios públicos en todas y cada una de las dependencias federales.
Y las dependencias estatales. Y en un descuido, en las dependencias municipales.
Caray, otro caso expuesto y sin exhibir el nombre de un funcionario del gobierno de la Ciudad de México que con una resolución judicial logró una pensión mensual de 179 (ciento setenta y nueve) mil 182.20 pesos.

CINCO. El cochinero, pues…

Las cañerías más hediondas de la administración pública.
Un olor nauseabundo que nunca, jamás (todo indica) quiso combatir el presidente de “la honestidad valiente y la purificación moral”, Andrés Manuel López Obrador.
De acuerdo con el boletín, el director Martí Batres seguirá jalando la cobija a los políticos con pensiones millonarias.
Ya se verá cuándo y cómo procederán en el resto de las dependencias federales y estatales. (lv)