Es más, y hasta por añadidura, entre quienes dan la vida por una astróloga y quienes nunca consultan el zodíaco antes de iniciar cada mañana.
Los emperadores romanos y los Césares griegos siempre consultaban a los astros antes de lanzarse a una batalla. Y hasta batallas en medio del mar.
Ahora, número insólito de políticos y funcionarios públicos consultando, por ejemplo, a los santeros de Cuba.

DOS. Brujos eficaces

Pero, bueno, más allá de las creencias, hábitos y costumbres y, claro, de las influencias religiosas y esotéricas de cada persona late la certeza de que los brujos son eficaces y eficientes.
Además, una astróloga por ahí asegurando que puede hacer que el amado, el amante, la pareja, vuelva al redil en casa.
El señor M., por ejemplo, siempre consulta su signo zodiacal en el periódico y de acuerdo con el pronóstico va aplicándose en el transcurso de las horas.
A veces, cierto, la astróloga falla. Pero el señor M. le tiene mucha fe y esperanza.

TRES. Brujos contra brujos

El señor Z. dudaba de los brujos. Pero sus neuronas se estremecieron cuando un pariente fue embrujado.
Y quedó ido. Ausente. Mirando sin mirar. Y con una mirada dura, ruda, siniestra y sórdida.
Entonces, el señor Z. lo visitó. Y apenas, apenitas cruzaron la mirada para el saludito, el señor Z. se desmayó y tirado quedó en el piso.
Aquel efecto brujeril fue exterminado cuando la familia contrató a un brujo de Catemaco.
Y en viaje especial a la ciudad estuvo varios días con la familia hasta el exorcismo.
El familiar había sido embrujado por un brujo del mercado popular.
Y el brujo de Los Tuxtlas era, es, “a todas leguas”, más eficaz y eficiente.
Brujo contra brujo, pues.

CUATRO. Un zíper en la boca

Por eso, mil, dos mil, tres mil veces “andarse con cuidado”.
En todo caso y si los brujos y astrólogos se miran con incredulidad, nada mejor que ponerse un zíper en la boca para evitar hablar mal de ellos…, vaya a ser que por ahí se atraviese una maldición.
Lo dijo el indito de Oaxaca, Benito Juárez García:
“El respeto al derecho ajeno es la paz”.

CINCO. Ganar batallas

Famosas las esposas de los presidentes José López Portillo y Vicente Fox Quesada y que tenían un brujo de cabecera.
La fama pública de que la esposa de López Portillo hasta enviaba un avión al aeropuerto de Veracruz para trasladar a Los Pinos a su brujo de Catemaco.
Famosa la travesía del gobernador Fidel Herrera Beltrán a Cuba para consultar a los santeros.
Cada año, el congreso brujeril de Los Tuxtlas.
En la Ilíada, Homero cuenta la intervención de los dioses mitológicos y los brujos al lado de sus feligreses para ganar batallas en la guerra. (lv)