Además, caray, que los trámites apenas, apenitas, duran unos quince minutitos.
Claro, luego de hacer fila durante varias horas.

PASAMANOS: Durante un mes en el Registro Civil el trámite estuvo suspendido.
Ya se sabe, si en el año 1988, el sistema nacional electoral se cayó cuando la elección de Carlos Salinas, con más razón ahora las fallas para el trámite de la CURP.
Pero, bueno, ya está lista. Y desde ayer lunes 21 de julio, a hacer “cola”.
Tantos adultos como niños. Mujeres y hombres. La CURP biométrica es para todos. Y sin excepciones.
Casi casi como una nueva credencial de elector.
El avisito parroquial de la autoridad incluye cinco meses y dos semanas.
Tiempo suficiente para que a partir de la primera semana de enero del año entrante ningún ciudadano de a pie y motorizado se llame sorprendido.

CORREDORES: Se trata de mayor seguridad para los ciudadanos todos en la identificación oficial nacional.
Vaya, incluye hasta una gráfica de la pupila. De hecho y derecho como la huella digital.
Más, mucho más, en el caso de los ancianos, pues con frecuencia sucede que por la edad se borra la huella digital.
Y cuando, por ejemplo, el interesado acude al banco, digamos, para cobrar la pensión, toda una odisea para el registro de la huella.
Incluso, las empleadas bancarias llenas de paciencia infinita y bíblica prueban la huella con los dedos de una mano y/o de la otra, sobre todo, el índice y el anular.
Caray, y si por alguna razón se vuelve tarea imposible, entonces, una ejecutiva bancaria conocida y de confianza (porque con ella se abrió la cuenta) ha de dar fe y testimonio de que la persona es quien dice ser.

BALCONES: Por eso, aun cuando se necesite hacer fila, en un país donde para todos los trámites (hasta para confesarse en el templo) hay que hacer fila, ni modo, “aquí nos tocó vivir y qué le vamos a hacer”.
Es la disposición oficial y ha de entrarse “a Belem cantando”.

PASILLOS: La CURP biométrica “es una versión mejorada de la Clave Unida de Registro de Población”.
Incluye, claro, las huellas digitales.
Pero más todavía, el escaneo del iris.
Así, reducir el “riesgo de suplantación de identidad.
Más confianza en trámites oficiales. Servicios educativos. Servicios bancarios. Servicios de salud”.
En un principio, el plazo era para los meses de enero y febrero del año 2025.
Ahora ampliado al mes de enero del año 2026.
Antes, que veinte minutos duraba el trámite.
Ahora, quince minutitos.
Menos, mucho menos de la espera de una pizza solicitada por teléfono a domicilio. (lv)