SIDA en Veracruz
**Segundo lugar nacional
**Historia repetitiva
ESCALERAS: Veracruz se mantiene, inderrotable, en los primeros lugares nacionales de SIDA. Antes, invicto en el primer lugar. Hoy, alternando en los primeros cinco espacios en el país. En el último balance, segundo lugar nacional.
El informe es de la secretaria de Salud federal, pues la estatal “entre más callada más bonita”.
De igual manera como, por ejemplo, suele callar sobre el primer lugar nacional con menores embarazadas.
Y callar con el primer lugar nacional en legrados. Por lo general, aplicados por comadronas.
En el transcurso de los meses de este año, 777 (setecientos setenta y siete) nuevos contagios.
607 (seiscientos siete) hombres. 170 (ciento setenta) mujeres (La Jornada Veracruz, agencias).
PASAMANOS: En un principio, las únicas con el VIH eran mujeres de alquiler. Sobre todo, en los puertos de Coatzacoalcos, Veracruz y Tuxpan, con el desembarco de marinos de todas partes del mundo y buscando el placer sexual.
Después, la fiebre alcanzó a los hombres cuando, por ejemplo, incluso, le entraron al sexo con los homosexuales contratados en la vía pública.
Entonces, un viraje de más ciento ochenta grados cuando los de los migrantes en Estados Unidos infectaban a las esposas en alguna estancia vacacional en el Estado jarocho.
CORREDORES: El virus se fue extendiendo y, caray, como si fuera el Apocalipsis, hasta los hijos empezaban a nacer con el SIDA.
Las madres contaminadas por los maridos.
Alguna vez, las secretarías de Salud federal y de Veracruz lanzaron campañita para el uso del preservativo.
Pero como decía uno que otro machito: “Está bien, pero no sabe igual”.
Y aun cuando los globitos están a la venta en las farmacias, el VIH sigue causando estragos en la población.
Mujeres y hombres dice Salud federal.
De hecho y derecho bien estaríamos en un asuntito de seguridad nacional. Un pendiente del Estado de Derecho.
BALCONES: Tiempo existió en el siglo pasado cuando en cada Ayuntamiento de Veracruz (y/o en la mayoría) un médico estaba encargado de la vigilancia sanitaria de las mujeres de alquiler en los congales.
Y cada quince días, las trabajadoras sexuales eran supervisadas en sus órganos íntimos para detectar el estado de salud.
Se ignora si todavía. Pero, bueno, dado que Veracruz está en el segundo lugar nacional del VIH mucho se dudaría.
En todo caso, allá cada hombre y mujer cuidándose.
PASILLOS: Algunas jóvenes mujeres suelen pedir al galán un examen de SIDA antes, mucho antes, de sostener relaciones sexuales.
Incluso, tan desconfiadas son (¡qué bueno!) que hasta los acompañan, primero, para confirmar el análisis.
Y segundo, para quedarse con el recibo del pago en el laboratorio químico y ellas mismas recoger el dictamen.
Y si sale bien, entonces, a la intimidad.
Pero por desventura no todas las chicas son así.
Ninguna duda que, en el caso de las mujeres, todo indica, son más confianzudas.
Y allí suelen perder. (lv)