Y, segundo, porque si un amigo busca en el otro al Hombre Perfecto rastreado por Diógenes con su famosa lámpara en las calles de la Grecia clásica, está perdido… Nunca, jamás, lo encontrará…

ROMPEOLAS: La experiencia enseña que en la relación amical por lo general suele aplicarse la cuchilla… Y cuando un amigo comete un error voluntario e involuntario la relación suele tronar… Peor tantito: muchos casos donde nunca más uno al otro se perdona… Y siempre se inculpan y acusan… Y por más cabildeo de amigos comunes, jamás un paso atrás para el revire… Fue el caso por ejemplo de los escritores Mario Vargas Llosa y Gabriel García Márquez y de Octavio Paz Lozano y Carlos Fuentes Macías… Por fortuna, el único consuelo para sus esposas, Marie Jose y Silvia Lemus, eran que los dos (Paz y Fuentes) se habían querido mucho en momento estelar...

ARRECIFES: Por eso es que la vida se convierte en un gigantesco cementerio de amigos dejados y abandonados en el camino… Y desde luego, se comete una imprudencia cuando los otros cuates intentan buscar un culpable, el punto de la ruptura, una posibilidad de la reconciliación… Siempre hay (y habrá) fans y feligreses de cada parte y cada una con su verdad… Entonces, nada mejor que “llevar la fiesta en paz” y dar la bendición a todos…

ESCOLLERAS: El ideal superior es aprender a aceptar a los amigos como son… Y partiendo de un eje central sin olvidar que todos los seres humanos tenemos cualidades y defectos… Y la tierra fértil solo germina cuando se ejerce la gran virtud de la tolerancia… Y de la prudencia… Y de la paciencia… Como el caso de la mayoría de hermanos que pueden distanciarse, pero pasado un ratito unos a otros se perdonan y siguen pateando el balón y remando la canoa y empujando la carreta para mejorar la calidad de la vida familiar…

PLAZOLETA: Alguien por ahí (quizá un iluso) escribió que un amigo “es el otro yo”… Y que el patrimonio de un ser humano son los amigos… Y de igual manera que los amigos son los únicos que traicionan porque los enemigos enemigos son… Con todo, nada acerca a la dicha y la felicidad (tan efímeras que son) como aceptar a los amigos como son… (lv)