¿Los despidieron?
¿Quiénes y por qué?
Más en las horas que caminan y trotan sobre la elección del nuevo Rector.
Y más, cuando el sociólogo de la Sorbona, Martín Aguilar Sánchez, tan ocupado de los movimientos sociales de Veracruz en su tiempo de investigador, ha manifestado su deseo de reelegirse… que porque la ley lo posibilita.

PASAMANOS: Una, la doctora Angélica Buendía, de la Universidad Autónoma Metropolitana y secretaria de la Unidad Xochimilco.
Dos, el doctor Alfredo Sánchez Castañeda.
Tres, el doctor Hugo Casanova.
Y cuatro, la doctora Érika Maldonado.
Los tres últimos dejaron la Junta de Gobierno entre los años 2023 y 2025.
Es decir, con Martín Aguilar como Rector de la máxima casa de estudios.
En el sistema político mexicano (y también académico) nadie renuncia a un cargo por voluntad propia.
Por lo general lo renuncian.
En el caso, ¿por qué, por qué, por qué?

CORREDORES: La comunidad académica (maestros, estudiantes y burócratas) y también los ciudadanos con credencial de elector, merecen una explicación.
Por lo pronto, indicativo y significativo el hecho siguiente:
En momento estelar de los días y noches turbulentos y revolcados de la elección del Rector, la Junta de Gobierno expidió un comunicado revelando que algunos de ellos y hasta sus familiares “han sido objeto de amenazas y presiones”.
En la mirada de ellos, “dichos actos buscan interferir en la labor de consulta que actualmente se encuentra en curso”.
Ok.
Pero… dada la opacidad y hasta la ambigüedad del comunicado (“tirar la piedra y esconder la mano”, por ejemplo”) en el misterio también quedó precisar el tipo de amenazas y presiones.
Incluso, y considerando que bien pueden verse como anónimos, la posibilidad de los sospechosos.
Bastaría recordar lo que como gobernador Miguel Alemán Velasco refería: “Todos hemos sido amenazados”.
Incluso, y hasta en la vida privada. Y con mucha mayor razón, en la vida pública.
Y más, cuando tantos intereses encontrados se atraviesan y están en juego.
El dicho popular es certero: “Si no deseas ver fantasmas evita salir de noche”.

BALCONES: Por lo pronto, el gran misterio:
Las razones de peso y con peso para que un cuarteto de miembros de la Junta General de Gobierno de la UV (la gran electora) se hayan separado.
Y/o hayan sido renunciados.
Y/o renunciaran por decisión personal.
Más, y en el caso de la doctora Angélica Buendía, cuando de por medio hay una consulta académica para conocer la tendencia de la comunidad y que, dada la experiencia pública con las encuestas y consultas políticas, siempre se prestan al manipuleo.
La elección del nuevo Rector de académica a populachera.
Lo dicen los filósofos de la Cuatro T (y que ya lo preconizaban Herodes cuando ordenó decapitar a Juan Bautista, el primo hermano de Jesucristo: “El pueblo manda”.
“Ta’gueno”.

PASILLOS: Ya se vería si en los días y noches trotando, la Junta de Gobierno y/o el Rector Martín Aguilar tienen voluntad, más que académica, social y política para esclarecer el asuntito anterior.
Si lo hacen, manifiesta actitud democrática.
Si lo dejan de hacer y les vale, actitud autocrática.
Mucho se lograría si los otros aspirantes a la Rectoría (Jorge Manzo Denes, Marisol Luna Leal y Rafael Vela Martínez) removieran las piedras para esclarecer “la cruda verdad”. (lv)