Por el otro, Trump en contra del gobernador de California, miembro del Partido Demócrata.
Por el otro, la protesta masiva de migrantes extendiéndose en Estados Unidos:
Los Ángeles, Chicago, Nueva York, Nebraska, etecé.
El toque de queda en Los Ángeles de las ocho de la noche a las seis de la mañana.
Treinta millones de mexicanos en EU y de los cuales un millón son originarios de Veracruz.
Y en todos los casos, los paisanos huyendo a EU buscando un empleo digno, estable, pagado con justicia laboral.
Y huyendo porque aquí, en México (y en Veracruz por añadidura), la manifiesta incapacidad gubernamental para animar la creación de empleos en las regiones indígenas, campesinas, obreras, suburbanas y urbanas.
El desempleo como eje central.
El subempleo como eje paralelo.
Los salarios insuficientes, miserables y pichurrientos "al rojo vivo".
La iniciativa privada reclamando seguridad en la vida y los bienes para invertir.
Y las tribus morenacas en el poder federal y estatales cargando la cruz en el camino al Gólgota, lleno de espinas, cardos y abrojos porque la delincuencia organizada (carteles, cartelitos, sicarios, pistoleros, malosos y malandros) se han adueñado de la vida colectiva, la vida personal y la vida familiar.
Incluso, de la vida institucional como la denuncia oficial en Veracruz de que el Movimiento Ciudadano abanderó a candidatos ligados a los narcos para las presidencias municipales.
Por eso, y ante la insuficiencia para crear empleos en el país treinta millones de paisanos en el otro lado.
Uno de los peores fracasos sociales de las elites gobernantes.
El círculo vicioso sigue cerrado:
Los empresarios se abstienen de invertir como desearan por tantos secuestros, desapariciones, asaltos, robos, asesinatos y fosas clandestinas.
Y los partidos políticos en el poder sexenal en el principio de Peter.
No pueden.
No han podido.
Se ignora si podrán.
La migración de México a EU inició en el Porfiriato.
Fue cuando en EU construyeron el ferrocarril en la frontera sur y ofrecieron chamba.
La mayoría de paisanos de la frontera norte partieron al estado de Texas.
Y desde entonces hasta el día de hoy con tantos millones de mexicanos en el otro lado.
Por eso, los migrantes del continente latino en gran protesta declarados en contra de la política Trumpiana.

2 (Ha de conocerse el trabajo de la SEDECO)

Sería interesante, por ejemplo, que la secretaría de Desarrollo Económico de Nahle revelara las gestiones, los trámites, los cabildeos, que en los siete meses del sexenio han sostenido para animar la creación de empleos.
Lo único que publicitaron fue un viajecito (turístico) a Berlín para un congreso económico y según ellos (ajá) atraer inversiones a Veracruz.
Y a todas luces, una vacilada.
Una ocurrencia.
Una broma.
Incluso, revelar la lista de los empresarios y negociantes y comerciantes con quienes habrían, digamos, suscrito un pacto para empujar juntos la carreta explorando posibilidades.
Y es que sin la alianza de los industriales y fabricantes, el Gobierno de Nahle está a la deriva.
Dando "palos de ciego".
La única estrategia para disminuir la migración es crear empleos dignos y estables y pagados con justicia laboral.
Vaya, un migrante lo expresó del siguiente modo: "Mil veces ser pobre en Estados Unidos que en Veracruz".
Caray, la mayoría de salarios entre cinco y seis mil pesos mensuales.
Un privilegio un sueldo de ocho mil pesos en adelante.
Y más, mucho más, un privilegio con las prestaciones económicas, médicas y sociales establecidas en la Ley Federal del Trabajo.
Un solo dato estremecedor:
Hay trabajadores de la información en los cuatro puntos cardinales de Veracruz con salarios a destajo.
Y si bien les va, cada semana mil pesos.
Cuatro mil al mes.
Pero ni hablar, tal es el sistema político, económico y social:
Ricos los dueños de los medios de producción.
Pobres y jodidos y viviendo a la quinta pregunta los trabajadores.
Estados Unidos, con todo y Trump y sus redadas y su Guardia Nacional y su Muro en la frontera norte y sus boyas en el río Bravo, el paraíso tan deseado y soñado y fantaseado.
Así los migrantes pasen diez, veinte, años sin regresar a Veracruz por miedo y temor a la muralla Trump para reingresar a EU. (lv)