La era Nahle
**Pueblo desmotivado
**Los días sin huellas
ESCALERAS: Nahle, la góber, se sentó en la silla embrujada del palacio de Xalapa con la carreta llena de miel. Siete meses, de seguro, la carreta está llena de hiel.
Pronto, pronto, la luna de miel se diluyó.
Por ejemplo, el mal fario en Veracruz:
1) La derrota de MORENA en Boca del Río y Poza Rica, dos plazas importantes. En el caso de Boca del Río, los morenos derrotados por segunda ocasión. Y en Poza Rica, el desplazamiento de José Luis Lima, ex titular de la SEFIPLAN.
2) En términos generales, menos municipios gobernará MORENA de los años 2026 a 2029. Y en la víspera de la sucesión de gobernador.
PASAMANOS: 3) El pleito y la riña entre las tribus guinda y marrón por el resultado electoral. Unos contra otros. Tirios contra troyanos. Ángeles de Dios contra los ángeles del infierno. Los puros contra los más puros.
4) Con las derrotas de MORENA y los triunfos de la oposición bien sería conveniente una lupa para detectar los Ayuntamientos donde ganaron políticos ligados a los malos, y como de hecho, Nahle ha aplicado con los primeros tres. Tihuatlán. Nanchital. Y Las Choapas, tarea que debió ser de otros.
5) Siete meses después, ninguna obra pública trascendente se conoce. Vaya, los mal pensados y peor querientes hasta pensarían que el erario está, estaría, sudando por ahí. Únicamente en intereses el dinerito público depositado en los bancos deja extraordinario margen de ganancia.
CORREDORES: 6) La incertidumbre y la zozobra y los sobresaltos en cada amanecer y anochecer. Más feminicidios. Más niños huérfanos de madre. Y de padre. Más sangre escurriendo en las calles y caminos. El crecimiento exponencial de la delincuencia organizada. Vaya, hasta la percepción de un incremento en los días y noches huracanadas y turbulentas.
BALCONES: 7) Un Veracruz con un millón de paisanos como migrantes en Estados Unidos. Y lo peor, en la era Trump. En Los Ángeles, por ejemplo, tremenda redada de migrantes. Un montón de mexicanos detenidos. Los jarochos huyendo de Veracruz por el desempleo, el subempleo y los salarios pichurrientos. Ningún empleo animado y reanimado por la secretaría de Desarrollo Económico, su chamba. Claro, los bienaventurados dirán que crear un empleo significa años de cabildeo y gestión y tocar puertas empresariales.
8) Más todavía: migrantes que partieron de Veracruz a Estados Unidos desde hace 20, 25 años, y nunca han regresado. Por una razón poderosa: son ilegales y tiene miedo con que las puertas se les cierren para volver. 20, 25 años sin abrazar a la familia. Los padres. Los hijos. Los hermanos. Los abuelos. Y, cierto, constituye un pendiente añejo. Pero hasta donde se sabe si bien se sabe, ningún puente de dignidad construido por la SEDECO y la secretaría General de Gobierno, de quienes depende el asunto migratorio.
PASILLOS: 9) La población en el desaliento y la desesperanza. Desde el gobierno del Estado, ningún aliento optimista. De seguro, a pocos, excepcionales ciudadanos entusiasma el apellido Nahle. Más cuando varios funcionarios se han bajado o los han bajado del caballo a mitad del río. Y cuando Nahle gobierna con frases deseosas de volverse bíblicas para levantar el ánimo. Y cuando los días pasan sin que la calidad de vida social crezca un poquito.
La vida en Veracruz (Antón Chéjov) “quita la alegría de vivir y sumerge en la apatía”.
Y ni siquiera excita la imaginación para soñar con un buen gobierno. (lv)