de Studio Ghibli como "El Viaje de Chihiro" hasta dramas existenciales como "The Midnight Gospel", la animación ha demostrado ser un vehículo versátil capaz de explorar una amplia gama de temas y emociones.

Por otro lado, la idea de que la animación es un formato en lugar de un género hace referencia a el medio técnico en lugar de al contenido. Esta perspectiva quiere decir que cualquier género, ya sea comedia, drama, ciencia acción o terror, puede ser representado a través de la animación, ya que esta se convierte en una herramienta artística y no en una limitación temática.

Dicha perspectiva ha sido objeto de reflexión por guras notables dentro de la industria del cine, incluyendo al renombrado director mexicano Guillermo del Toro, aclamado por películas como "El Laberinto del Fauno" y "La Forma del Agua", quien ha aportado un punto de vista valioso en esta discusión, puesto que ha expresado en diversas ocasiones que la animación no debe ser considerada un género, sino un formato de contar historias. Del Toro de ende rmemente que considerar la animación como un género limita su potencial, reduciendo su capacidad de contar historias que pueden llegar a ser impactantes y conmovedoras. Este punto de vista está respaldado por la amplia gama de películas y series animadas que han demostrado que la animación puede ser tanto para niños como para adultos, y que puede explorar temas profundos y emocionales con la misma eficacia que la acción en vivo.

Sin embargo, el debate se complica aún más cuando pasamos al lado de la audiencia, esto porque a menudo se asume que la animación sólo es para niños, pero personalmente creo que esta es una

percepción anticuada y absurda, ya que hoy en día existen producciones animadas que abordan temas maduros y se dirigen a audiencias adultas, como "BoJack Horseman" y "Rick and Morty; demostrando una vez más que la animación también puede trascender las limitaciones de edad y género.

La animación también ha demostrado ser un medio efectivo para abordar cuestiones sociales, políticas y culturales, pero de una manera más creativa. ?ales son las obras como "Waltz with Bashir" y "Your Name", éstas han utilizado la animación para explorar temas históricos y culturales de manera profunda y a la vez emotiva.

El debate sobre si la animación es un género o un formato es una cuestión de perspectiva y enfoque, ya que dependiendo de cómo se mire, la animación puede ser ambas cosas o ninguna a la vez. Pero lo que es innegable es que la animación es una forma de arte que merece ser apreciada por su versatilidad y su capacidad de contar historias poderosas. En lugar de quedar atrapados en una de nición rígida y ambigua debemos de reconocer y valorar la amplitud y profundidad que la animación ha tenido en la industria del cine y la televisión, independientemente de cómo elijamos etiquetarla.