De largas a cortas temporadas: la evolución del formato televisivo
Ana Camila Hermida Hernández
Facultad de Comunicación
Universidad Cristóbal Colón
En la última década hemos sido testigos de un cambio significativo en la forma en que se producen y consumen las series de televisión. Antes, las series solían contar con múltiples temporadas y una cantidad agresiva de capítulos, mientras que hoy en día se ha vuelto común encontrar series con temporadas más cortas y capítulos que no rebasan los diez. Este cambio de formato ha despertado debates en la industria del entretenimiento y ha traído consigo una serie de razones que explican por qué las series han optado por la brevedad en lugar de la abundancia.
Cambios en los patrones de consumo
Una de las razones más destacadas para este cambio es en los patrones de consumo de la audiencia, ya que en la era de la inmediatez y el streaming los espectadores han desarrollado una preferencia por las series más cortas y fáciles...
de consumir, abriendo así la posibilidad de ver una serie completa en un fin de semana o incluso en una sola sentada y por esa misma razón se ha optado por la creación de series más compactas y efectivas.
Calidad antes que cantidad
La competencia en el mundo de las series se ha vuelto feroz, y eso ha traído consigo un enfoque en la calidad por encima de la cantidad. Las series de formato corto a menudo pueden mantener una calidad narrativa y visual más consistente a lo largo de toda la temporada, ya que no necesitan extenderse para llenar un número determinado de capítulos. Esto ha llevado a un aumento de series que son narrativamente más ricas y visualmente impresionantes.
Reducción de riesgos financieros
Algo negativo que la producción de series largas conlleva son los riesgos financieros. Es por esto que las productoras (hablando económicamente) optan por los proyectos cortos, ya que permiten a los estudios y productores minimizar estos riesgos, y al mismo tiempo probar nuevas ideas y conceptos sin comprometerse con un compromiso a largo plazo, abriéndole así las puertas a un aumento en la diversidad temática y la innovación en la televisión.
Enganchar al espectador
Las series más cortas a menudo generan al espectador una sensación de urgencia y fomentan la fidelidad del espectador, ya que los espectadores están más dispuestos a invertir tiempo en una serie que saben que no se extenderá indefinidamente. Esto ha generado una mayor interacción de la audiencia (en especial de los fans), debates y especulación sobre el desarrollo de la trama, lo que a su vez se puede decir ha contribuido a la popularidad de las series.
Cambios en la narrativa
El enfoque en la acortación de las series ha llevado a un cambio en la forma en que se narra una historia en la televisión. Puesto que, las series más cortas a menudo se centran en una narrativa más compacta y un ritmo más rápido, lo que se adapta a la mentalidad actual de "binge-watching", es decir, no poder parar de ver una serie. Esto ha logrado que los guionistas y directores experimenten con estructuras narrativas creativas y más que nada innovadoras.
El cambio de formatos en las series de televisión, de capítulos extensos a temporadas cortas, ha sido impulsado por una serie de factores, incluyendo cambios en los hábitos de consumo de la audiencia, la búsqueda de la calidad sobre la cantidad, la reducción de riesgos financieros y la necesidad de fomentar la fidelidad del espectador. Este cambio ha llevado a una nueva era de creatividad en la televisión, con series más innovadoras y experimentales, lo que beneficia tanto a los creadores como a los espectadores. La televisión se ha adaptado a la era de la inmediatez y la diversidad, y este cambio promete un emocionante futuro para las series de ?V.