“Tiempo de las mujeres”
**Pero de Mujeres Políticas
**Una elite femenina
**Mujeres indígenas
DOMINGO
Grito Patriótico
Un grito patrio suena y resuena en la nación. “Es el tiempo de las mujeres”. Cierto. Más, considerando que seis de cada diez habitantes del país son mujeres.
Pero… única y exclusivamente Tiempo de las Mujeres Políticas.
Las Mujeres Políticas escalando los peldaños de la escalera para aposentarse en la cima.
La silla embrujada del palacio y que, de acuerdo con el hermano menor del Caudillo del Sur,
Emiliano Zapata, a todos encanta y seduce y hasta hace levitar.
Por ahora, gobernadoras, diputadas locales y federales y senadoras, secretarias de Estado, presidentas municipales, síndicas y regidoras.
Y funcionarias públicas en los gabinetes legales y ampliados.
Y quieren más, claro. El poder es una droga. Peor que la cocaína. La presidencia de la república como objetivo central.
Luis Velázquez
En contraparte, el resto de las mujeres llevando todos los días una vida con sencillez y modestia, fregándose el lomo desde antes del amanecer y hasta el anochecer, las últimas en acostarse desde el tiempo de los olmecas, nahuas y totonacas, las tribus fundadoras de Veracruz.
LUNES
Sexenio huracanado
“El tiempo de las mujeres”. "Ta’gueno".
Veracruz, campeón nacional en mujeres secuestradas, desaparecidas y asesinadas.
Feminicidios en la mayor parte de la historia.
Niños huérfanos en número incalculable. Parejas viudas. Padres ancianos dependiendo de las hijas a la deriva económica y social.
Un dato indicativo: En el gobierno de Veracruz hay unas seis mil burócratas, la mayor parte con licenciaturas, maestrías y doctorados y laborando como secretarias.
Acaso desempeñando un cargo público con bajo, bajísimo perfil.
“Tiempo de las mujeres”. Los Colectivos, integrados con padres con hijas y mujeres parientes plagiadas y desaparecidas y buscando rastros, pistas, huellas, en lotes baldíos reportados como fosas clandestinas.
Las madres marchando en la vía pública y protestando en el zócalo y en las giras de AMLO, el presidente, y cargando una cartulina con la foto de la hija desaparecida.
Las madres, levantando el Árbol Navideño, el Ábol del Dolor, con las fotos de sus hijas secuestradas y desde hace doce años (sexenio de Javier Duarte) desaparecidas.
¡Vaya “hora de las mujeres”: miles de mujeres de Veracruz migrando a Estados Unidos para contratarse como trabajadoras domésticas, afanadoras, cocineras, lava-platos.
Dato escalofriante: de acuerdo con la investigadora Patricia Ponce, Veracruz, en el primer lugar nacional como productor y exportador de trabajadoras sexuales.
MARTES
Desigualdad social y económica
Las mujeres eligiendo la administración pública y la política-política abriendo oportunidades y presionando para encumbrarse.
Incluso, hasta para la ofensa y la humillación como el caso de la diputada local de MORENA, Margarita Corro, con la indígena chinanteca por cometer el delito de hablarle en chinanteco.
“A mí se me habla de frente y en español”.
Y en contraparte, si en el estado de Veracruz, por ejemplo, hay un millón de indígenas viviendo en las ocho regiones étnicas…
Y si de acuerdo con la estadística oficial, seis de cada diez habitantes son mujeres…
Entonces, en las zonas montañosas del Estado jarocho existe un promedio de 600 (seiscientas) mil mujeres indígenas.
Y el 96, 97, 98 por ciento, en la miseria y la pobreza.
Y acaso, con la esperanza que al marido indígena, migrante en Estados Unidos, le vaya bien.
Y nunca, jamás, los olvide a la familia.
Mujeres cuyo único destino, además de la jodidez, es el metate, el brasero, la parcelita sembrando hortalizas, los ríos y lagunas para lavar la ropa, y acaso, estudiar únicamente la escuela primaria.
Y con frecuencia, desertando de la escuela cuando los padres se las llevan como migrantes en Veracruz al corto de cítricos, café y caña de azúcar.
El tiempo de las mujeres, ajá.
MIÉRCOLES
Machismo pleno
Desde la llegada de Hernán Cortés, cuando los caciques indígenas le obsequiaban en cada pueblo por donde pasaban veinte chicas, todas vírgenes, de unos veinte años de edad, para el consumo sexual, el machismo “en la plenitud del pinche poder”.
La Malinche, a quien, incluso, Hernán Cortés facilitó a sus lugartenientes porque venía de España enfermo de sífilis.
El machismo atravesando los siglos quince, dieciséis, diecisiete, dieciocho, diecinueve, veinte y veintiuno, sin acotarse, disminuir, reducirse, incluso desaparecer.
Y nada, absolutamente nada, garantiza que con una mujer política como gobernadora y/o como presidenta de la república, la tendencia cambie.
Como tampoco ha cambiado, por ejemplo, el racismo laboral en las oficinas públicas y privadas en contra de las mujeres.
Entre otras cositas, cuando desempeñando las mujeres un cargo perciben un salario menor a los hombres en la misma tarea.
Además del menosprecio y el desdén.
Y por lo regular, consideradas sujeto y objeto sexual con todo y el delito de acoso y hostigamiento.
Las mujeres en casa trabajan más, mucho más, que el hombre en su chamba y nunca la pareja les asigna un salario digno.
Peor, si el marido anda con pobrezas…
JUEVES
“Reeducando a Papá”
¡Ay, el tiempo de las Mujeres! Por ejemplo:
Si en una familia la pareja trabaja…
Y la esposa gana más, mucho más, que el esposo…
Y la esposa ostenta un cargo público o privado…
En la mayoría de los casos, el marido se trauma y acompleja y frustra.
Y lo revierte y desquita con la pareja.
Y luego enseguida piensa, siente, cree, termina convencido de que la esposa lo engaña con el jefe de jefes.
Y, bueno, se trata de un cráter sicológico en el hombro datando de siglo en siglo, sin que nunca, jamás, la autoridad lance una campaña tipo Pepita con su libreto “Reeducando a papá” para reeducar a los hombres.
Una campaña, digamos, tipo del refresco de cola tan efectiva.
Y/o en todo caso, cuando los políticos se creen merecedores del siguiente cargo público y hasta colocan espectaculares en las carreteras y caminos y en las plazas comerciales mostrándose (y exhibiéndose) como seres enviados por un Ser Superior para salvar a la tierra.
Mucha, demasiada, excesiva desigualdad social y económica y sicológica entre mujeres y hombres.
Por fortuna, las mujeres políticas siguen escalando. Ahora, camino a la presidencia de la república y las gubernaturas.
VIERNES
Vaya silencio de Mujeres Políticas
Veracruz “arde o se hunde. El incendio y el fango” (Octavio Paz Lozano):
Tiempos luminosos: Veracruz fue entidad federativa talismán.
Benito Juárez y Venustiano Carranza, refugiados aquí en tiempo de feroz persecución política.
Antonio López de Santa Anna, Miguel Alemán Valdés y Adolfo Ruiz Cortines, de gobernadores a presidentes de la república.
Jesús Reyes Heroles, líder nacional del PRI y secretario de Estado.
Fernando Gutiérrez Barrios, secretario de Gobernación.
Tiempos resplandecientes con Agustín Lara, Toña la negra, Paquita la del barrio, Yuri, Salma Hayek y Meche Carreño.
Ahora, Veracruz, el reino feminicida.
Indicativo: ninguna de las mujeres políticas aspirantes a la candidatura a gobernadora se ocupa de los feminicidios.
Digamos, una cortesía a la 4T. Quizá, tema prohibido para evitar broncas innecesarias con el góber y los suyos.
¡Ah!, todas exigiendo “piso parejo”.
El feminicidio, la peor herencia política, social y fatídica de la 4T, MORENA y el obradorismo en Veracruz.
Y el silencio de las mujeres políticas.