de AMLO para la candidatura de MORENA a la sucesión presidencial.
Y por añadidura, el góber jarocho está con ella “con todo el aparato gubernamental”.
Más cuando el trascendido es que la esposa y los tres hijos mayores de AMLO también sueñan con Sheinbaum en el Palacio Federal. Incluso, Cuitláhuac García congelando al secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubon y ni se diga, al senador Ricardo Monreal Ávila. Y en el caso del secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, el otro presidenciable, alterna, convive y finge “tirarse a su piso”.

LUNES
Siervo de la Nación

3) En la percepción ciudadana, y dado el juego político recibido, también hay la creencia de que AMLO, el presidente, tiene en la zacatecana Rocío Norma Nahle García, secretaria de Energía, como la favorita de MORENA para la nominación a gobernadora de Veracruz. Y en automático, Cuitláhuac, con ella, a morir. El desdén y el menosprecio, entre otros, a Manuel Huerta Ladrón de Guevara, delegado federal, y al diputado federal, Sergio Gutiérrez. Luna. Incluso, Manuel Huerta lo exhibió en el palenque público diciendo que la cultura priista domina a MORENA con sus prácticas bíblicas, entre otras, el acarreo, la cargada, el apoyo oficial y las columnas políticas pagadas a favor de Nahle.

4) El góber jarocho actuando como el Siervo (modelo) de la Nación en la Conago, Conferencia Nacional de Gobernadores. Incluso, y cuando lo encargaron de la Política Migratoria aceptó el cargo sin chistar, casi casi, un puesto público burocrático, para salir del paso teniendo un juguetito que jugar.

MARTES
Igual que Goebbels

5) Tanta fuerza política, social y quizá económica significa y encarna que alcanzado Veracruz el liderato nacional en feminicidios y en secuestros y extorsiones, y los crímenes de tantos políticos, nada pasa. Y, bueno, si hacia los primeros años del sexenio obradorista a cada rato “los tirios y troyanos”, enemigos y adversarios y partidos opositores profetizaban que sería destituido y relevado del cargo, ahora, el silencio brutal. Como si en verdad nada pasara. La frasecita bíblica, propiedad de Javier Duarte, preso en el Reclusorio Norte de la Ciudad de México, sirvió para empinarse él solito en el carril político. Fue cuando el presidente Enrique Peña Nieto le retiró su protección.

6) Si AMLO vive obsesionado con encarcelar a su antecesor, Felipe Calderón Hinojosa, Cuitláhuac tiene la obsesión de los narco/alcaldes. Y aun cuando solo gritonea en el palenque público sin aportar pruebas concretas y específicas, apuesta al prodigio de la comunicación política tipo Joseph Goebbels. Una mentira repetida un millón de veces se convierte en verdad”.

MIÉRCOLES
Síndromes de Cuitláhuac

7) Tan poderoso se cree y siente el góber quedó manifiesto cuando declarara la guerra política, social y mediática al senador Ricardo Monreal Ávila con el caso de su secretario de la Junta de Coordinación Política del Senado, José Manuel del Río Virgen, preso en el penal de Pacho Viejo. Aquel manotazo le sirvió para congraciarse más con Claudia Sheinbaum Pardo y con AMLO, a quien ambos acusan a Monreal de torpedear el triunfo electoral de la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México en la última elección de alcaldes. Y enfrentarse a Monreal son palabras mayores. Más cuando Monreal alardea de una relación amical con AMLO desde hace más de veinticinco años. El góber, todo indica, inmune a los escándalos.

8) Cuitláhuac está padeciendo el Síndrome Fernando Gutiérrez Barrios. De policía, a director de Caminos y Puentes. Y a la gubernatura. Y a la secretaría de Gobernación. También, claro, el Síndrome de Miguel Alemán Valdés y Adolfo Ruiz Cortines, de gobernadores a secretarios de Gobernación y Presidentes de la República. Y el Síndrome Ignacio Morales Lechuga, de secretario General de Gobierno en Veracruz, a coordinador de Seguridad Nacional, Procurador de Justicia en el Distrito Federal, Procurador General de la República y Embajador. Tiene ante así un desafío que bien le puede llevar al éxito político y social que necesita. Luego de la gubernatura, ultra contra súper amarrado su éxito económico.

JUEVES
Carácter mercurial

9) Cada día que se va, Cuitláhuac es más Cuitláhuac. Y se siente con menos frenos políticos que lo amarren. “Desde el poder ha dado rienda suelta a su carácter mercurial” (Jan Martínez Ahrens, El País). Si sale Sheinbaun la candidata y gana, ya la hizo. Si sale Nahle y gana en las urnas, también. Pero si pierde Nahle y gana Sheinbaum, los astros pueden acomodarse en su contra. Igual que si Sheinbaum pierde y gana Nahle. Las dos van en el paquete. Más, porque en par de ocasiones, AMLO, el presidente, lo lanzó como su candidato a gobernador. Simplemente, Cuitláhuac, en deuda política, social y moral con AMLO. Y como dice AMLO, “amor con amor se paga”. Con todo, a base de tuitazos en sus redes sociales festina sus decisiones, un mundo color de rosa, a su medida, en tanto los ciudadanos de a pie sienten vivir en un mundo incierto y lleno de zozobra. Basta y sobra recordar el Feminicidio en Veracruz.

VIERNES
El Presidente da y quita…

10) Los vientos sucesorios se antojan turbulentos. Pero el góber ha coqueteado sin disimulo con sus preferencias sin conocer, por ahora, un cortocircuito. Se estará dando una tormenta entre los aspirantes y suspirantes, pero Cuitláhuac sigue “mirando los toros desde galería”, seguro y consciente, y sin la ayudadita del brujo mayor de Catemaco, que su decisión fue, y es, acertada. Sheinbaum y Nahle. Y AMLO, desde luego, aun cuando en las últimas giras ha dejado de levantarle el brazo y vitorearlo como el político más honesto del Golfo de México. En su oportunidad demolió los muros de Berlín que los opositores le levantaron. Y hasta alardea que zarandeó a los emisarios del pasado. Hacia el final del día es el jefe del Poder Ejecutivo estatal, el dueño de los centavos públicos, el comandante en jefe de las fuerzas armadas, el jefe máximo de parte de los diputados locales y federales y senadores. Y de ñapa, tiene la bendición de AMLO y que por alguna razón poderosa será y que bien pudiera escapar “a los simples mortales”. Teodoro A. Dehesa permaneció diecinueve años en el poder por el Dedazo del dictador Porfirio Díaz Mori. El presidente de la república (ya se sabe) da y quita.