La maestra Mayra Ledesma Arronte renunció a la dirección general de Cultura de la Paz y Derechos Humanos.
Se fue lueguito de cumplir tres años trepada en el barco de la 4T.
Todo indica, distanciada del gobernador y del secretario General de Gobierno.
Y también, claro, ni se diga, y más, de la Fiscal General.
Aquella de frase memorable, citable, recordable y bíblica.
"Aquí mando yo", dijo mirando el edificio de la Fiscalía.
Y que, claro, ahora mostró su talente con la académica de la Universidad Veracruzana.
Llegó al cargo avalada por los Colectivos (unos veinte, parece) integrados con padres con hijos desaparecidos.
Y trabajó con dignidad para tratar con dignidad a los familiares.
Y más a las víctimas.
Secuestradas.
Desaparecidas.
En el caso de mujeres, quizá ultrajadas.
Asesinados.
Pero... de pronto, ¡zas!, las puertas del palacio cerradas.
Mínimo, desde el 29 de febrero del año 2020, cuando se reuniera con "El Uno" y "El dos del palacio" y con los Colectivos.
Luego, sobrevendría un choque con la Fiscal General, cuando el Diagnóstico del Manejo de Fosas Comunes en el Estado de Veracruz y que molestó, encorajinó, irritó a la Fiscal General.
Entonces, le aplicaron "la congeladora".
La exclusión.
El desdén.
La indiferencia.
En su Facebook dejó un mensaje a los seguidores: "Ya no contaba con buenas condiciones de trabajo".

CELOS DEL PODER
Varios factores de forma y fondo en su renuncia. Entre otros, los siguientes:
1) Según las versiones, entre Mayra Ledesma y el secretario Éric Cisneros ninguna química.
La académica de la UV era una posición del góber.
Digamos, desde cuando ella sentara al señor Cuitláhuac García como candidato de MORENA a la gubernatura con los Colectivos, pues ella organizaba foros, incluso un debate con candidatos, a tal grado que la fuerza moral de los Colectivos obligó al panista Miguel Ángel Yunes Márquez, candidato del PAN, a sentarse en un debate.
2) La versión de que en el trabajo en la secretaría de Gobierno, Mayra Ledesma y Cisneros Burgos nunca congeniaron.
Eran “como agua y aceite”.
Más porque ambos son temperamentales y tienen carácter explosivo.
Más cuando Mayra (académica, investigadora, con sus grados de maestría), tuteaba al secretario de Gobierno en las reuniones.
Y, claro, ya se sabe que los hombres en el poder les gusta que les hablen con el cargo por delante.
Y los encomiendan.
Y les tiren incienso a su paso.
3) También, claro, hubo uno que otro raspón con el gobernador.
Por ejemplo, cuando en una reunión, el góber hizo una referencia que era revictimizante y la académica de la UV lo corrigió en público.
Y se molestó.
4) De acuerdo con las versiones, Mayra, con su carácter, alguna vez tuvo un desliz y habría sido un tanto prepotente con algunas personas.
Incluso... que llegó a gritar a gente cercana al gobernador.
Y las quejitas se fueron acumulando.
Y al gobernador le empezaron a llegar las quejas.
Y el góber de la 4T la dejó de recibir.
5) Otro error es que ella quería abarcar más de lo que era su área.
Se reunía con personas y funcionarios en la Ciudad de México y no avisaba al Secretario de Gobierno, el jefe inmediato,
Que se metía en actividades que no le correspondían.
Por ejemplo, quería que la Comisión Estatal de Derechos Humanos le rindiera cuentas, lo que no puede ser porque por ley la comisión es autónoma.
6) Eso le fue cerrando puertas, porque los celos y los cotos de poder en esos niveles sln canijos.
Por eso, desde mediados del año 2021, aprox., ella empezó a hablar de su renuncia.
Y que buscaría al gobernador para hablar en corto, y que, por cierto, nunca se concitó.
7) Aislada, una manera de Mayra Ledesma de cerrar su ciclo fue cuando sacó el Diagnóstico del Manejo de Fosas Comunes en el Estado de Veracruz que habla de la situación en los municipios de Acayucan, Coatzacoalcos, Poza Rica, Minatitlán y Xalapa.
Ese diagnóstico -según la gente cercana al caso- no era parte de sus atribuciones, no le tocaba, y no le gustó a la Fiscal General.
Y como la licenciada Verónica Hernández es muy cercana al secretario de Gobierno, y a quien debe el cargo, se molestó.
Más porque Mayra mandó el documento por WhatsApp, y ni evento hubo para presentarlo, pues se lo cancelaron.
Un mes después del informe... dejó el cargo.
El manotazo de la Fiscal ante el secretario General de Gobierno fue determinante.
Éric Cisneros tomó el machete y ajustó cuentas.
"Aquí mando yo" habría exclamado.