cargando

En twitter:

Malecón del paseo
Lunes 18 octubre, 2021

Maestra de la vida

•Secretos del amor
•“La Quinceañera”

EMBARCADERO: Hacia el siglo pasado, la mitad de aquella generación de jóvenes y la otra mitad aprendió los secretos mágicos del amor en el prostíbulo “El cafetal”... Era famoso entre la muchachada porque allí llegaba cada fin de semana una señora de unos treinta años de edad a quien apodaban “La quinceañera”... Y le llamaban así porque únicamente aceptaba la relación sexual con chicos de unos 15, 16, 17 años promedio y a quienes trataba con toda la paciencia y prudencia

Luis Velázquez

para llevarlos a la magia de los cuerpos biológicos.

ROMPEOLAS: Entonces, había par de casas de antros en el pueblo… El otro se llamaba “El burro” y era montón de cortesanas vendiendo, como rezaba Agustín Lara en una de sus canciones, “caro su amor”… En “El cafetal” eran pocas las mesalinas y una de ellas “La quinceañera”… Incluso, con fama pública de que solía bajar su tarifa a la mitad y con frecuencia, hasta en abonos… Un trío de compañeros la había descubierto y la promovía en el salón de clases… Eran ellos una especie de sus cabilderos, y lo hacían en nombre de la salud sexual…

ARRECIFES: Ella hablaba de una misión apostólica en la vida… Y por eso mismo, antes del festín solía platicar con cada chico imberbe sobre los misterios del amor… Incluso, hasta tenía un libro de biología con el cuerpo humano para explicar las funciones de cada parte… Desde entonces aquella generación conoció de los males de la próstata y que tantos estragos suele causar cuando se tiene media vida, digamos, unos cincuenta años… Ella decía, y con justa razón, que de cada diez hombres de sesenta años que pasan enfrente, nueve están enfermos de la próstata y tienen graves problemas para miccionar día y noche…

ESCOLLERAS: Un chico quedó prendido de “La quinceañera”… Y la celaba y echaba pleito a los demás porque deseaba la exclusividad… Pero ella, inteligente y perspicaz, siempre reacomodaba las pasiones descarriladas porque estaba consciente, firme y segura, de su papel… Por nadie tenía preferencia… Trataba con finura y exquisitez a todos por igual… Nunca se emborrachaba ni menos consumía drogas… Era una gran señora… Muy limpia… Con todos los cuidados médicos del mundo… Y nunca, nadie, se lamentó de su amistad… Y fue, sin duda, la mejor profesora de la vida…

PLAZOLETA: Años después, descubrimos, de manera tardía, que todos fuimos unos ingratos con ella… Un día, ella desapareció de “El cafetal” y la casa aquella que ardía de noche y día perdió su encanto… Nadie, sin embargo, sabía su nombre y su origen y destino… Unos aseguraban que vivía en la ciudad jarocha, otros que en Córdoba y otros que en Orizaba, pues a veces, aseguraban haberlo visto bajándose del tren de pasajeros… Pero nadie, siquiera, tuvo la delicadeza y la gratitud de preguntar su nombre, aunque ella mintiera…

PALMERAS: Muchos años después nos topamos en una calle de Orizaba… Ella habría tenido unos 55 años… Peinaba canas, pero la hacían más atractiva e importante… Permanecía delgada con caderas exuberantes… Ella caminaba acompañada de una chica quizá entre 18 y 20 años y era su retrato… Madre e hija, guapas y atractivas… Me miró y la miré… Sonrió con la mitad de una sonrisa y sonreí… Pero fue un chispazo… Ella siguió caminando sin detenerse a un saludo breve… Atónito, pasmado, nervioso, nunca me atreví a detenerla y ni modo le llamara “Quinceañera”… Se perdió en medio de la gente tomada de la mano de su hija y por más y más que la miré nunca volteó hacia atrás…


Deja un comentario

Acerca del blog

Blog de noticias desde Veracruz.
Aquí, deseamos contar la historia de cada día.
Y cada día es un nuevo comienzo.
Y todos los días se empieza de cero...

Portal de noticias de Veracruz.