a su amigo Lázaro.
Y por amistad aceptó a Judas como apóstol, aunque luego lo traicionara.
Los amigos, decía don Julio Scherer García, son piedras rodando en la ladera y en la ladera se acercan o se alejan.
Si tienes un amigo probado y comprobado, dice el viejito de los llanos de Sotavento, “te sacaste la lotería”. Y sin jugar.

DOS. Los examigos

La maldición bíblica es así: los únicos que en la vida traicionan son los amigos.
Más amigos nunca pudieron ser Octavio Paz Solórzano y Carlos Fuentes Macías, y hacia el final de los años terminaron peleados.
Fue cuando Paz publicó en la revista “Letras libres” un artículo furibundo de Enrique Krauze en contra de Fuentes y nunca lo perdonó.
Incluso, en la víspera de la muerte, Octavio Paz pidió a un amigo recíproco que le llevara a Fuentes para darle una disculpa y nunca aceptó.

TRES. Examigos memorables

Más amigos Gabriel García Márquez y Mario Vargas Llosa.
De acuerdo con las versiones, rompieron en aquel tiempo cuando Vargas Llosa andaba con una azafata.
Y el Gabo, cuentan, se ofreció como consuelo.
Tiempo después, Vargas Llosa y su esposa se reconciliaron. Y ella contó al escritor y al primer encuentro con el Gabo, y en la Ciudad de México, lo recibió con un puñetazo en la cara.
Uno y otro siempre evaden y evadieron hablar del tema. “Terreno peligroso” dijo Varga Llosa en una ocasión.

CUATRO. Sagrada religión amical

Amigos, amigos, amigos, Ernest Hemingway y Francisco Scott Fitzgerald y Jon Dos Passos.
Con Scott, la amistad se rompió con Hemingway porque el ego entre ambos era de dimensión descomunal y chocaron.
Y con Dos Passos, porque Hemingway se deslindó de la búsqueda de un amigo de Dos Passos cuando en la guerra civil española, desapareciera (se afirma, secuestrado por los comunistas de Rusia) y Hemingway dejara solo a Dos Passos.
Histórica y legendaria la amistad entre Fidel Herrera Beltrán y Miguel Ángel Yunes Linares.
Luego, en la competencia y rivalidad política, la amistad se disolvió y para siempre.
Legendaria la amistad de Marlon Ramírez y Raúl Díaz, ambos priistas. La amistad fue truncada cuando Marlon le asestó cuartelazo para quedarse con la regiduría primera en el Ayuntamiento de Fernando Yunes Márquez.

CINCO. Amigos para siempre

La vida, sin embargo, es así, “¡y qué le vamos a hacer!”.
Pero con todo, hay amistades entrañables y ejemplares. Por ejemplo, y entre tantos otros:
Los escritores Fernando Benítez y José Emilio Pacheco. José Agustín y Gustavo Sáinz. Sergio Pitol y Carlos Monsiváis.
Los periodistas Julio Scherer García, Vicente Leñero y Francisco Maza. Ángel Trinidad Ferreira y Francisco Cárdenas Cruz. Elías Chávez y José Leobardo Reveles.
Los políticos Fidel Herrera, José Murat, Ricardo Monreal y Alejandro Moreno.

SEIS. Enemigos… enemigos son

El filósofo de la amistad, teórico y práctico, dice que los hermanos son impuestos en el seno familiar, y por eso, a veces, suelen llevar caminos enfrentados y conflictuados.
En cambio, los amigos se eligen en el camino, y por eso mismo, tan cercanos. Pero, vaya paradoja, a veces tan lejanos.
Dice el viejito del pueblo:
“Los únicos que en la vida traicionan son los amigos. Porque los enemigos enemigos son”.
Cada quien tiene sus definiciones sobre los amigos… según le ha ido en la vida.
Pero Octavio Paz expresó quizá la más profunda concepción de la amistad. “Un amigo es el otro yo”, escribió.