La comparecencia de un secretario tímido y técnico…
•Por Noé Zavaleta
Mañana gélida y tenue lluvia para la comparecencia de un secretario tímido, muy técnico y que parpadea cada tres segundos, como muestra de nerviosismo ante las cámaras de televisión. José Luis Lima Franco, Secretario de Finanzas y Planeación (SEFIPLAN), está sentado en el pleno...
Tomado de Crónica de Xalapa
legislativo, apenas 17 de 50 diputados lo acompañan. Afuera de la sala Venustiano Carranza, las legisladoras de Morena se empujaban cortésmente, estiraban los tacones de sus zapatillas y alzaban sus morenos cuellos para colarse en la fotografía. Del gabinete de Cuitláhuac García, Lima Franco es algo así como su Maluma, pero en versión introvertido.
En la salutación del secretario pozarricense lo acompañan empresarios -desconocemos sí para respaldarlo o para cobrarle facturas pendientes- acuden también las titulares de organismos autónomos, los ya llamados: “Sacrificados del presupuesto 2021”, el titular del Organismo Público Local Electoral (OPLE), José Alejandro Bonilla, la presidenta del IVAI, Naldy Rodríguez Lagunes, la presidenta del Tribunal Electoral, Claudia Díaz Tablada, la de Derechos Humanos, Namiko Matzumuto y el presidente del TEJAV, Roberto Pérez.
Rodríguez Lagunes llega mojada y rayando la suela a la comparecencia, camino más de una cuadra por toda la calle Encanto: “creo que necesito un chofer”. Tendrá que valorar si la austeridad republicana y la tijera presupuestal a su dependencia se lo permite el próximo año.
En el pasillo por donde circulan los empresarios, tres edecanes en ceñidos vestidos negros, pero bajadas del cielo, acompañan a los hombres del dinero a su lugar de invitado en el inmueble legislativo. Los representantes de la iniciativa privada sonríen nerviosos, sudan frío detrás del cubrebocas, se aprietan los labios. Algunos rezando por que algún fotoperiodista morboso les tome una foto y luego se cuele por ahí en algún periódico digital; otros empresarios -los mandilones y casados- rezando porque ocurra lo contrario y nadie tome nada.
En su mensaje de comparecencia, José Luis Lima Franco suelta una idea y parpadea tres veces. Habla de resultados claros y firmes en momentos adversos; asegura que se necesitó de inteligencia financiera para enfrentar el Covid 2019, pues se tuvieron que reorientar 946 millones de pesos al sector salud para atender la contingencia sanitaria.
“Hay un fortalecimiento financiero y un buen manejo de la deuda. Aumento de sueldos a los empleados estatales en cuatro por ciento. Hoy los aguinaldos se pagan a tiempo y ya no son problema”.
Y ahí se va, el estadista financiero de Veracruz, cuya única sombra la tiene en el piso de abajo, con el Subsecretario de Ingresos, el primo-hermano, Eleazar Guerrero. Lima Franco asegura que “Veracruz va muy bien”, pues hoy hay transparencia y disciplina financiera.
En la insaculación de preguntas y respuestas, los diputados de Morena y PAN volvieron a hacer sinergia -como lo hicieron el miércoles en la comparecencia del Secretario de Gobierno, Eric Cisneros-, para crear de forma exprés el club de los elogios al gabinete de la Cuarta Transformación.
Juan Manuel Pozos Castro, diputado local de Morena y en vías de pedir licencia definitiva para buscar la alcaldía de Tuxpan, intervino con preguntas intrascendentes, pero firme en soltar el espaldarazo al titular de Sefiplan: “Le agradecemos señor Secretario por estas respuestas contundentes y el trabajo muy eficiente que está realizando”.
La panista, María Josefina Gamboa, quien apenas el miércoles pasado le encontró una decena de virtudes a Cisneros Burgos; hoy volvió a sacar un catálogo de flores para el encargado de las finanzas veracruzanas.
“Le agradecemos al diputado que siempre nos atienda la llamada. Siempre tan amable y diligente y no como otros secretarios que no contestan ni el teléfono”.
Ojos de borrego a medio dormir de Gamboa Torales para Lima Franco, pero también de Rosalinda Galindo, y hasta de la panista-morenista, Ana Miriam Ferráez.
Lima Franco aseguró que para el 2021 se va con un reto grande: Seguir amortizando la deuda de Veracruz dejada en los últimos tres sexenios y continuar en una ruta de austeridad, sin contraer más deuda. Confiesa el tesorero de Veracruz que los créditos a corto plazo le siguen robando el sueño.
Mientras tanto, en la Sala de Prensa, tan propensos a ver llegar la sangre al río entre el partido en el poder y los políticos de oposición, extraña el trato de terciopelo y el echado de flores de diputados propios (Morena) y extraños (PAN) a José Luis Lima, el secretario que habla poco, parpadea mucho, políticamente no opera nada, pero pareciera, que sí trabaja.