Y como el marido sueña con ser escrito y escritor reconocido, queda acomplejado (y frustrado) ante la capacidad literaria de ella… Y es cuando el machismo fermenta sus entrañas…

ROMPEOLAS: 1) Le hace imposible la vida como escritora y la quiere cargar de hijos… 2) Le gritonea y humilla para hacerlo menos… 3) Le es infiel tanto con las estudiantes como con sus amigas… 4) Pretende adueñarse de su vida literaria y habla de ella con los medios restándole voz… 5) La exhibe en las juntas sindicales de los profes de la UNAM… 6) La vilipendia con sus padres y amigos… 7) Se burla de sus textos… 8) Le pasea a sus conquistas amorosas… 9) La planta en ceremonias y eventos importantes…

ASTILLEROS: Pero Rosario Castellanos se mantiene fiel a su vocación literaria… Llega un momento cuando lo deja de escuchar en sus desvarí­os para seguir tecleando todos los dí­as… Muchas veces escribe en la madrugada y toda la mañana y mediodí­a y tarde y otra vez en la noche… Era cien por ciento creativa y el esposo, pobrecito, incapaz de escribir varias cuartillas en un dí­a… Y lo más indicativo y significativo, sus libros se vendí­an, en tanto, los libros del marido quedaban en las librerí­as, incluso, arrumbados ante las ventas bajas…

ESCOLLERAS: De acuerdo con el filme, nunca pudo el marido superar la inteligencia incandescente ni la capacidad creativa de la escritora, su esposa… Toda la vida vivió acomplejado y frustrado… Incluso, lleno de venganza para minarla y disminuirla… Es, claro, lo peor que sucede cuando en una pareja la mujer es más, mucho más brillante, que el marido… Incluso, basta y sobra con que la mujer tenga un mejor trabajo, incluso, un cargo público o en la empresa, y perciba un salario superior, para que la mayorí­a de los esposos se inflamen de envidia y conviertan la envidia en rencor y hasta lleguen al feminicidio…

PLAZOLETA: La prueba de fuego para el marido habrí­a sido cuando el presidente Luis Echeverrí­a ílvarez nombra a Rosario Castellanos embajadora de México en Israel… Al otro extremo del mundo ella aterrizó sola… Sola viví­a en la Embajada… Divorciada quizá, para entonces… Allá encontró la muerte… Fue un dí­a de asueto para los empleados diplomáticos… Ella prendió la estufa para calentarse un cafecito y estalló… Y arrasó con su vida… En su existencia literaria y magisterial luchó por los derechos de las mujeres… Incluso, algunas de sus novelas cuentan las historias de las mujeres indí­genas de Chiapas soñando con la liberación…

PALMERAS: Nacida en 1925, fallecida en 1974 en Tel Aviv, con un hijo, Rosario publicó más de treinta libros… Entró a la historia nacional como una de las primeras feministas del paí­s, tiempo cuando el machismo alcanzaba plenitud en el quehacer humano… Y por tanto, la lucha social más dura y difí­cil… Las haciendas de Chiapas, pobladas de mujeres indí­genas, donde tanto los latifundistas y sus hijos como los capataces ejercí­an el derecho de pernada, por ejemplo… El México atroz, sórdido y sombrí­o…