Invasión gatuna en palacio de gobierno
*“Don gato y su pandilla”, adueñado de los cargos públicos
*Hay en los políticos gatos bodegueros, modorros, bodoques, escurridizos, espías, delicaditos, frívolos, infieles, etc…
*Morris tiene la culpa de tanto carnaval
El gato Morris, candidato independiente a la alcaldía de Xalapa, ha despertado las pasiones a una parte de los casi 8 millones de veracruzanos y la conspiración gatuna ha llegado hasta palacio de gobierno permeado entre la elite política, alimentando la picardía y el humor jarocho.
Cierto, en otros municipios aparecieron más gatitos de candidatos: Tiziano, en Coatzacoalcos; Benito, en Minatitlán: Huellas, en Boca del Río, Mistón, en Papantla; Tomás, en Poza Rica; Chuletas, en Veracruz; Pancho, en Tuxtepec y candirata “Tita Larra Tota” en Xalapa.
Luis Velázquez
Pero, al mismo tiempo, el ingenio se multiplicó en la cúpula gobernante, desde el partido oficial, el PRI, hasta la oposición.
Por ejemplo, Fidel Herrera ya es conocido como “Don Gato”, el jefe de la pandilla gatuna.
A Juan Alfredo Gándara Andrade, candidato priista a la diputación local, exalcalde de Poza Rica, le llaman “El gato bodeguero”, porque cada vez la panza le crece, acatando así la sabia enseñanza del caricaturista Rius, quien publicara un libro intitulado “La panza es primero”.
Desde hace años merodea en el palacio principal de Xalapa “El gato modorro”, Ricardo Landa, exlíder del CDE del PRI, aquel que para quedar bien con su noviecita trepó a un caballo en una charreada en Acayucan y terminó en el hospital.
Ranulfo Márquez, fallido delegado federal de la Secretaría de Desarrollo Social, ex de todo, menos de gobernador, está clasificado como un gato de azotea; por tanto, y dentro de la pandilla gatuna, su nombre es Garfield…por si en adelante, y de acuerdo con la ley “Zeferino Tejeda Uscanga” alguien lo lanza de candidato a un puesto de elección popular y lo registra con su nuevo apodo.
Shariffe Osman, candidata priista a la alcaldía de Emiliano Zapata, tierna, finita, delicada, gatita Barbie, gatita reini, ha merecido el nombre de “Hello Kitty”, la gatita igual que ella.
Elizabeth Morales García, la peor alcaldesa en la historia de Xalapa, es, sin más, Gatubela.
Y Carolina Gudiño Corro, la presidenta municipal de Veracruz, la gata Flora.
Raúl Zarrabal Ferat, candidato a la diputación local por el distrito de Boca del Río, es el gato Benito Bodoque… por chiquito y gordito.
Enrique Ampudia Mello, subsecretario de Gobierno, Matute, el gato policía, que espía a los demás.
LA PANDILLA DE “DON GATO”, EL JEFE DE JEFES
Salvador Manzur, exsecretario de Finanzas y Planeación, incapaz de guardar un secreto y expresivo como cuando acuñara el término de “oro molido”, es Demóstenes, el gatito de la pandilla de “Don Gato”.
Carlos Brito Gómez, asesor del gobernador, mil años lo contemplan, Demóstenes, el gato tartamudo. Antes, claro, le llamaban “El taca-ta-ta-ca”.
Renato Tronco, exalcalde de Las Choapas, candidato a la diputación local por el distrito de Coatzacoalcos rural, es el “Gato con Botas” por rancherote.
Ainara Rementería Coello, diputada local, es la gata Duquesa…por razones obvias.
Erick Lagos Hernández, presidente del CDE del PRI, el gasto Azrael, el más perverso de todos los gatos, la mascota de Gárgamel, quien odia a los pitufos.
Jorge Alejandro Carvallo Delfín, exdiputado local, secretario particular del gobernador, es “Cucho”, el gato más enamorado de la pandilla de Don Gato, aun cuando también disputaría el honor con Erick Lagos, de igual manera como el gato Tomás O”™Malley, el gato más arrabalero y callejero, enamorado de la gata Duquesa.
Corintia Cruz, candidata a diputada suplente de David Velasco Chedraui por el distrito de Xalapa urbano, la gatita Marie, perteneciente al club de los Aristogatos.
Enrique Jackson sería el zorrillo Pepe Le Pew y Karime Aguilera la gatita Penélope, ambos estrellas enamorados en un filme cinematográfico.
Juan Antonio Nemi Dib, secretario de Salud, es Cheshire, el gatito gordito y chistoso de “Alicia, en el país de las maravillas”, el más sumiso y obediente a las órdenes de la “Reina de corazones”, quien sería en la leyenda María Georgina Domínguez, la vocera próspera, y quien merecería el título de la gata Felicia, la mala de los felinos.
Gonzalo Morgado Huesca, delegado federal del ISSSTE, ha entrado a la historia gatuna como Lucifer, el gato más perverso y malo.
Arturo Bermúdez Zurita, secretario de Seguridad Pública, es Súper Fisgón, el gato detective.
Tonatiuh Pola Estrada, candidato priista a diputado local por el puerto jarocho, es Stimpy.
EL GATITO MíS FINITO, DELICADITO Y TIERNITO
Miguel íngel Yunes Linares, por todos conocido, es el gato Tom…, que nunca puede atrapar al ratón y a quien todo sale mal. El ratón, claro, sería “Don gato”, Fidel Herrera.
Julio Saldaña, panista, candidato del PRD rojo a la alcaldía jarocha, es el gato Panza, que se pasa la vida enamorando a las gatitas de las colonias y las rancherías, “sabrosa carne de monte” como dice el contador Mario Tejeda Tejeda.
José Ramón Gutiérrez de Velasco, el peor alcalde en la historia jarocha, candidato priista a diputado local, es el gato Espanto, el criado de “Don gato” que será en el Congreso jarocho, pues ni modo que la cúpula priista lo deje operar a sus anchas.
Adolfo Mota Hernández, secretario de Educación, es Sweety, el gato más finito, delicadito y tiernito de la familia gatuna.
Guillermo Zúñiga Martínez, rector intergaláctico de la UPAV, Universidad Popular Autónoma de Veracruz, quedó clasificado como Mr. Kat, el felino extraterrestre, que siempre sueña en misiones espaciales, por tanto, estaría visualizando crear una UPAV en algún planeta del sistema solar.
Noemí Guzmán, secretaria de Protección Civil, es la gata Venus, que tiene dos colores en la cara, un pelaje especial también de dos colores, con un color en cada ojo y, por tanto, es la gata de las mil caras.
Como se advierte, desde Veracruz hay una conspiración gatuna. Morris es el culpable de tantas pasiones desordenadas.
POSDATA: hay en Veracruz dos opciones de periodismo marginal: blog.expediente.mx y elcronista.mx. Muchas, muchísimas gracias por navegar un ratito cada día.