Veracruz Es Una Fiesta
•Búnker fifí y sabadaba
•Ramos Alor se remodela
•Gasto frívolo en Salud
Luis Velázquez
¡Felicidades, doctor Roberto Ramos Alor, secretario de Salud! ¡Nuestros respetos, señor! Hemos leído la nota exclusiva publicada en Notiver (Noemí Valdez, 13 de julio, 8 columnas, portada) donde informa que usted...
gastará cuatro millones de pesos del presupuesto oficial para remodelar su oficina.
¡Súper, secretario!
Queda comprobado que el coronavirus "nos hace los mandados".
Es más, con su decisión frívola y vanidosa se une usted a la población de Tlacotalpan (comelitona y pachangón), Jamapa (carrerita de caballos) y Xico (fiestón religioso en la vía pública) que hicieron a un lado el virus y la sana distancia y el cubre-bocas y se lanzaron a la fiesta del corazón y las neuronas.
Cada vez más muertos en Veracruz por el COVID.
Cada vez más contagiados.
Cada vez más hospitales saturados.
Cada vez más enfermeras y médicos de la secretaría de Salud falleciendo.
Cada vez más enfermeras y médicos oficiales pidiendo ayuda, SOS a la población, para tener la materia prima.
Y usted, señor de señores, interesado y obsesionado con remodelar sus oficinas porque durante 19 meses (¡Mucho tiempo, caray!) ha necesitado soportar la forma en que se la dejó su antecesor.
¡Muy bien, señor!
¡Adelante, que los muertos y contagiados muertos y contagiados están!
Y más porque remodelar sus oficinas con 4 millones de pesos del presupuesto significa, de entrada, el visto bueno del góber bendecido de López Obrador.
Ojalá y su oficina quedé fifí y sabadaba, a tono con la práctica y filosofía política sexenal.
OFICINA REVOLCADA
Se ignora, por ejemplo, si el góber ya remodeló sus oficinas.
El secretario General de Gobierno.
La contralora.
La titular del ORFIS, Órgano de Fiscalización Superior.
El jefe máximo de la JUCOPO de la LXV Legislatura.
El profe Zen, de la SEV, otro frívolo y vanidoso.
Pero, bueno, si ellos solo dieron una revolcadita a sus oficinas, por ejemplo, quitando las fotos del ex gobernador...
Pintando el privado de color guinda y marrón...
Poniendo las fotos de Hidalgo, Morelos, Juárez, Madero y Lázaro Cárdenas...
Quizá, en un fervor patrio, político y religioso, la foto de López Obrador, aunque la orden sea que ni fu ni fa...
Allá cada quien su estilo personal de gobernar, ejercer el poder, ser y estar y vivir.
Usted, secretario, para adelante con los cuatro millones de pesos para remodelar su privado.
De paso, ojalá pudiera traer a su brujo de cabecera, su chamán, su bruja si fuera, para que le diera "una limpiecita" a su oficina y ahuyente los malos espíritus y las envidias y las intrigas, pues, y como asegura el diputado expriista, expanista, experredista, y ahora morenista, José Manuel Pozos Castro, "los demonios andan sueltos".
La vida es una fiesta, ¡qué caray! y cada día ha de vivirse con el acelerador hasta el fondo y un bidón de gasolina para evitar detenerse en la gasolinera.