Desdén de Fiscalía General en secuestro del niño de Acayucan
•La madre pidió ayuda al personal y le dijeron que debían pasar 72 horas
•Ella buscó a a su hijo y lo encontró sin vida y ultrajado
•El menor, de 10 años de edad, trabajaba ocasionalmente en una tienda de conveniencia y pedía limosna
IGNACIO CARVAJAL
Dolores López Chontal, madre del pequeño José N, de 10 años, confirmó que personal de la Fiscalía General del Estado de Acayucan no le quiso tomar la denuncia posteriormente a la desaparición de su hijo, quien 24 horas después ella misma localizó en un lote baldío, sin vida y ultrajado.
Los restos del menor de 10 años son velados en una humilde casa de Acayucan.
Las personas acarrean agua, leña y cazos para preparar los alimentos de los dolientes que llegan a acompañar a la familia.
La tragedia no deja de cubrir a esta familia que se dedicaban al comercio y a pedir monedas en la vía pública ante el desempleo que dejó el estancamiento laboral por el COVID-19.
Desde hace algunos meses, contó su mamá, los ingresos de la familia bajaron y el pequeño José de 10 años tuvo que dejar por completo la escuela para ocuparse en trabajos temporales y hacer mandados.
Eventualmente se paraba en una tienda de conveniencia de esa zona, donde abría la puerta a los clientes o los ayudaba con el mandado.
Por ese gesto le daban una moneda, que llevaba a su casa para ayudar con el gasto.
Aunque su madre dijo que también se acababa de dar cuenta de que una persona lo explotaba laboralmente en Acayucan, lo ponía a pedir limosnas y posteriormente se las quitaba.
En entrevista breve con reporteros de la región, la mujer afirmó que la tarde del lunes su hijo desapareció cuando se encontraba cerca de un OXXO.
Que lo último que le dijo era que deseaba ir a casa a comer arroz con leche y en un descuido, desapareció.
Aunque se dedicó buen rato a buscarlo en las proximidades no le encontró, ni pista de quien pudo habérselo llevado.
Con esa duda se presentó a la Fiscalía General del Estado en Acayucan, donde no le quisieron levantar la denuncia.
Vecinas que le acompañaron, y que estaban presentes en el funeral, confirmaron que la mandaron a su casa a esperar "72 horas para poder sacar la alerta".
Desesperada -contó la mujer - se regresó a su casa, pero al día siguiente, acompañada de otros vecinos, comenzó a buscar en la zona.
Fue en un predio de la colonia El Roblar, en el lote de una vieja construcción, donde encontró al pequeño ya sin vida y evidentemente violentado sexualmente.
A más de 48 horas de la tragedia, la Fiscal Verónica Hernández Giadans no ha emitido ningún comunicado oficial sobre esta grave violación a los derechos humanos.
Al igual que el doble feminicidio en el puerto de Veracruz, ocurrido en una vivienda de la colonia Flores Magón, la fiscal ha optado por el silencio de los sepulcros.
Y para atrás, desde que fue ratificada, Verónica Hernández se ha comportado en silencio ante las graves violaciones a los derechos humanos que se cometen ya en su administración.
Dolores López Chontal dijo que hasta ahora no cuenta con informes oficiales sobre el presunto detenido en relación al homicidio de su hijo, aseguró que la Fiscalía no se ha puesto en contacto con ella desde que le entregaron el cadáver.
En pasillos del poder trascendió que el asegurado tenía una relación sentimental con la madre y que la principal línea es la venganza.
En el sepelio recordaron al pequeño José como un chico trabajador y sacrificado por su familia y que soñaba con algún día ser elemento de las fuerzas armadas.
"Mi hijo quería ser de la Marina, eso soñaba, pero ellos le quitaron ese sueño" dijo.
La mujer finalmente dijo que espera justicia y espera que los responsables del homicidio "terminen igual que mi pequeño".