Ley seca: el daño patrimonial para los dueños de bares, cantinas, antros y prostí­bulos.
Ley seca: el peor tiempo para los alcohólicos y bebedores sociales.
Ley seca: una medida extrema en el tiempo de la inseguridad, la zozobra y la incertidumbre en la vida cí­vica.
Ley seca: así­ como estamos y andamos, el riesgo de que los establecimientos puedan quebrar, como han quebrado otros más.
Ley seca: la medida democrática más sabia en tiempo de elecciones para que la gente pueda expresarse en las urnas.
Ley seca: la medida negociada por el presidente Lázaro Cárdenas del Rí­o como presidente de la república con los dueños de fábricas e industrias ligadas al alcohol y la cerveza establecida para disminuir el consumo en las regiones indí­genas, campesinas y obreras del paí­s.
Ley seca: nunca, jamás, en su vida, Pancho Villa, el jefe máximo del ejército más poderoso del paí­s y de América Latina, la División del Norte, treinta mil guerrilleros, se tomó unos traguitos, abstemio que era, con todo y casarse en veintinueve ocasiones y en la madrugada, luego de luchar en el campo de batalla.
Ley seca: en su rancho en Canutillo, Pancho Villa estableció la ley seca..., todo el tiempo.
Prohibido tomar. Prohibido emborracharse. Prohibida la venta de licor, aguardiente y pulque. Libertad total para tener esposa y amantes.
Ley seca: el gobernador de Tabasco, Tomás Garrido Canabal, prohibiendo la venta de licor y cerveza como medida extrema para garantizar el núcleo familiar.
Ley seca: Veracruz, en uno de los primeros lugares nacionales en el consumo de licor, cerveza y pulque.
Ley seca en Xalapa. La llamada Atenas veracruzana.
Camina, entonces, a la purificación moral la población, sobre todo, la masculina.
Ni un borracho más.

LA COMUNA DE TOMíS MORO
El reporte oficial del alcalde es así­:
Con la ley seca los fines de semana y prohibido el uso excesivo entresemana, el beneficio social es el siguiente:
No riñas.
No accidentes automovilí­sticos.
No heridos. No muertos en las calles y avenidas y carreteras.
No intoxicaciones.
No conflictos de género.
No madrizas de hombres machitos a esposas abnegadas.
No dinerito tirado en el alcohol, los cigarros, quizá la droga, quizá el comercio sexual.
El arzobispo de Xalapa, gracias a su tocayo, el presidente municipal, feliz y dichoso con la integración familiar que están logrando en el tiempo del coronavirus, acuartelados todos, sin probar gotitas de alcohol.
La vida ideal.
El sueño paradisiaco.
Tomás Moro lo concibió en la comuna.
Emiliano Zapata también.
Y ni se diga Panchito Villa.