cargando

En twitter:

8 Columnas
Lunes 06 abril, 2020

El coronavirus... visto desde la azotea de una casa


Por Noé Zavaleta/Tomado de Crónica de Xalapa

Un escuadrón de dos motociclistas, tres camionetas 4í—4 y una patrulla de la Secretaria de Seguridad Pública (SSP) “patrullan” las colonias Francisco I Madero, Emiliano Zapata y el popular-turí­stico Barrio de El Dique.

  • Por pandemia, Crónica desde la azotea

Los observo desde la azotea, a una distancia tan sana, que el Subsecretario de Promoción y Prevención de la Salud del Gobierno Federal, Hugo López Gatell, estarí­a orgulloso de mí­. Los Policí­as estatales está vez no buscan delincuentes, ni previenen el delito ”“y miren que por estos rumbos circulan demasiados aficionados de lo ilí­cito-, van con cubrebocas y transitando lentamente. Como si la vida no avanzará, como si los minutos no transcurrieran, como si un segundo fueran diez.
Con altavoces en mano van recomendando a la gente: “solo salir lo extremadamente necesario”; “quedarse en casa”, “acatar las instrucciones del gobierno federal en las noticias”. Reiterar una y otra vez que está época no es vacacional, sino un aislamiento preventivo por ”“insisten, una y otra vez-, pandemia por Coronavirus. Ahí­ van los oficiales, promotores sanitarios de a pie, velando no por la seguridad, sino por la salud. Acatando órdenes y el cambio de discurso gubernamental y polí­tico. El cual, apenas hace dos semanas, era de “abrazarse” y “salir a restaurantes”.
En una de las esquinas de la calle Reforma, la carnicerí­a luce saturada. Es domingo de “carnitas y chicharrones”. La fila abarca más de media cuadra. Cada clienta y algunos clientes, ocupan entre metro y metro y medio de distancia. “Susana Distancia en acción”. Que difí­cil resulta calcular 150 centí­metros, que fácil es pesar 900 gramos de bisteces. El sol pega a plomo, el calor sofoca en las alturas, es cerca del mediodí­a. Una señora le pasa gritando al carnicero: “guárdeme un par de huesos para mi perro”.
El barrio amaneció tí­mido. Poco bullicio, no hay mucha afluencia vehicular. El zapatero, tan recurrente a sus bohemias de domingo con caguamas y ron barato con sus amigos en su local de calzado. Está vez cerró las puertas. En la pollerí­a, desde la azotea, se empiezan a ver ya señoras con cubrebocas. La despachadora del producto aví­cola hace lo propio. A falta de gel antibacterial, alcohol rebajado con agua.
Bajo a la terraza y escucho a un par de vecinas: “Aun no hay gel antibacterial ni cubrebocas ni alcohol en ningún Chedraui… espero surtan pronto”. En una fotografí­a en su celular, una le comenta que en Casa Ahued ”“la tienda del funcionario federal, Ricardo Ahued- el litro de gel antibacterial casero está en casi 80 pesos. El lucro económico, por delante de la solidaridad.
A lo lejos, a 500 metros de distancia luce imponente la cúpula del santuario de la Virgen de Guadalupe en el Barrio de El Dique, una iglesia de las más importantes para venerar a la Virgen del Tepeyac. Está cerrada, sus seis pesadas puertas de madera están bajo llave. Los más senectos del barrio no la recuerdan cerrada desde la persecución cristera en 1931, cuando el gobernador del Estado era Adalberto Tejeda.
Muy cerca de ahí­, en el Paseo de Los Lagos, corredores y paseadores de mascotas se resisten a dejar de concurrir a este cuerpo de agua artificial. Los comerciantes ambulantes tampoco. La cuarentena, como una condición social solo para privilegiados. Desde la azotea donde me encuentro, no se alcanza a escuchar nada de lo que por allá pasa.
Recargado en un viejo tanque de gas estacionario veo los segundos y minutos pasar. Gatos en las azoteas siguiendo su vida normal, estirándose, ronroneándose e impregnando tejados con sus olores. Marcando territorios.
Dos perros merodeando la carnicerí­a en espera de cometer un atraco a punta de sacar la lengua y enternecer los ojos, para que alguna clientela resulte “asaltada” por bondad y se desprenda de un trozo de carnitas.
Taxis circulan dando vueltas a las manzanas del barrio. Dos de cada tres unidades circulan vací­as. Tocando claxon, exhortando al peatón a abordar el vehí­culo en este domingo caluroso. “La clientela está escaseando, esto se desploma”, me contaba uno el pasado viernes. Me insistí­a que al tener cerrados bares y discotecas y con la Central de Autobuses (CAXA) vací­a, por ahora ”“insiste- no hay ni siquiera donde pepenar a los clientes.
El celular repiquetea. En notificaciones del pajarito azul (twitter) pulula la noticia de que falleció en el hospital del ISSSTE en el puerto de Veracruz un “posible enfermo” del coronavirus” que vení­a de Tlacotalpan. Continua en boga cibernética, que un empresario xalapeño dio positivo al Covid-19 y que se encuentra haciendo cuarentena en la capital del paí­s. Otra más: Ya hay medio centenar de “casos sospechosos” de Coronavirus en Xalapa, que habrán de ser confirmados o rechazados los próximos dí­as. Más allá de lo viral: El último e impostergable llamado de Gatell a permanecer en casa, durante un mes, para detener la curva de contagio.
“Los mexicanos nos creemos invencibles”, habrí­a dicho hace dos semanas el futbolista mexicano, Héctor Herrera, jugador profesional del Atlético de Madrid y quien la cuarentena le ha tocado en uno de los paí­ses con mayor número de muertos en el mundo por Covid-19: España. Y Herrera, pareciera tener razón, mientras en mi azotea y sus alrededores no pasa nada, en el celular pasa mucho. El humor negro del mexicano se sigue riendo y pitorreando de la pandemia y las autoridades. Este domingo, cí­rculo de forma viral. Un meme de un mexicano pidiéndole perdón a López Gatell ”“personificado como un santo pegado a la pared- por haber salido a la tienda por una Coca Cola: “Te he fallado” y una lagrima escurriéndole por el ojo derecho. Sí­ los dí­as siguen así­, entre chunga, simulación y pifias gubernamentales, ni una beatificación de Gatell en la Villa de Guadalupe en el norte de la Ciudad de México podrá salvarnos.


Deja un comentario

Acerca del blog

Blog de noticias desde Veracruz.
Aquí, deseamos contar la historia de cada día.
Y cada día es un nuevo comienzo.
Y todos los días se empieza de cero...

Portal de noticias de Veracruz.