Pasiones desquiciadas
En el Instituto Veracruzano del Deporte, IVD, el termómetro político y social ubica los temblores más disparatados del sexenio de MORENA en Veracruz. En 16 meses, tres cambios. El primero, David Pérez Medellín, duró 8 meses. El segundo, Víctor Iván Domínguez Guerrero, un semestre. Y ahora, un nuevo relevo. Se llama José Alberto Nava Lozano.
Quizá en ninguna otra dependencia tantos vaivenes. Y en tan poco tiempo.
Luis Velázquez
El jefe inmediato es el profe Zenyazen Escobar, secretario de Educación, habituado desde su juventud a los bamboleos y a los temblores y movimientos más intensos en la escala de Ritcher. Y, bueno, como Sigmund Freud decía que “infancia es destino” (y también la adolescencia y la juventud), entonces, quizá, ahora cuando está al frente de un ejército de profesores y burócratas, los estremecimientos continúan.
Desde luego, nadie dudaría de que el epicentro del temblor político, social y deportivo es más arriba. Quizá, y por ejemplo, y como hipótesis primaria, desde que Paco Bravo quedó fuera de la posibilidad, a partir, entre otras cositas, del “fuego amigo o enemigo”,
A los dos primeros titulares del IVD les fue igual, por ejemplo, que a la Contralora Leslie Garibo y a la directora del DIF estatal, Verónica Aguilera, renunciadas sin rendición de cuentas, pues nadie en el sistema político dimite al jefe máximo, el gurú, el tlatoani, el mero mero.
Incluso, y con una resignación franciscana, Domínguez Osorio publicitó en su facebook que luego de la dimisión obligada había “recibido grandes muestras de cariño que le dieron tranquilidad y sentido a mi alma y espíritu”.
El reportero Pedro Muñoz Zamudio, de Notiver, una de las voces más serenas, reflexivas y acreditadas, se ocupó del asunto. Y en sus textos, enlistó los días y meses fatídicos vividos allí:
Uno. La zozobra de los empleados desde hace dieciséis meses.
Dos. Las divisiones de los grupos políticos y deportivos.
Tres. La orden superior, háganos favor, de que el par de directores separados del cargo manejaran su salida “como voluntaria y por cuestiones familiares”, ¡vaya desgraciada y mendiga política oficial!
Cuatro. La inestabilidad política y social de la SEV en el manejo del IVD.
Falta, sin embargo, rastrear la pista de la enconada lucha política que se está dando, quizá solo en el IVD, acaso también en la SEV, quizá más arriba, digamos, en la oficina del góber jarocho de
Amlove, pues a la vista de todos resulta extraño, raro, indicativo y significativo que en 16 meses…, 3 directores.
Peor tantito si se considera, por ejemplo, que cada maestrito, cada director, trae su librito y su estilo personal de ejercer el poder y su conflicto de intereses y su tráfico de influencias, y en mentes revoloteadas así todo puede suceder en el tiempo de la izquierda delirante y radical.
Y es que, además, los cambios del jefe significan más cambios en la pirámide y escalera del poder. Y ni se diga de políticas públicas en caso de existir, pues con tantos ramalazos y manotazos mucho se duda.
VAIVENES POLíTICOS… POR LA INESTABILIDAD EMOCIONAL
La inestabilidad sicológica y siquiátrica, y claro, política, en el IVD está fuera de duda.
Incluso, bien podría sentirse y percibirse que en tan poco tiempo la SEV, como primera hipótesis, mira al IVD como una dependencia de acomodos y reacomodos para saldar compromisos pendientes.
De ser así, la expresión más burda y soez del manejo cien por ciento politiquero de las circunstancias políticas, sociales y deportivas.
“Veinte y las malas” que de por medio hay presiones políticas y cuotas pendientes de cubrir y reacomodos forzados y nombramientos al vapor, por dedazo, sin averiguar a profundidad la trayectoria deportiva de cada titular para evitar, en todo caso, tanto movimiento trepidatario.
Simple y llanamente, desde la cumbre del poder público están jugando con la pelota y el desarrollo deportivo de la población les vale.
Y si el góber de Amlove se la pasa preparando su clase de Matemáticas en línea a través de TV Más y desfogando su rencor y odio y deseo de venganza en contra del presidente municipal de Veracruz, entonces, nadie se detiene con mesura y cordura a tomar decisiones justas.
Y lo peor, pareciera que el barco ha perdido la brújula social y el rumbo.
Y más por lo siguiente:
El par de ex directores renunciados fueron vejados y humillados en sus legítimos derechos humanos, por ejemplo, debido al poco, limitado, escaso tiempo en que estuvieron al frente.
Y aun cuando Pedro de Lascuráin solo duró 45 minutos como presidente de la república luego del asesinato de Francisco Ignacio Madero y José María Pino Suárez, eran aquellos tiempos turbulentos, pasiones enloquecidas y desfogues por el poder, y en donde la traición provenía de los amigos, como el caso de Victoriano Huerta, “El chacal”, quien ordenara el crimen de Madero luego de nombrarlo jefe policiaco en la Ciudad de México.
Más todavía:
El góber de Amlove está cayendo, ha caído, en la misma práctica de Javier Duarte, quien corriera, cambiara y enrocara a un aproximado de ochenta y cinco funcionarios sin nunca, jamás, rendir cuentas, pues se consideraba el gran político priista de entonces.
Y es que el góber de la izquierda despidió al par de directores del IVD sin delicadeza, y de acuerdo con la ley, sin apegarse a la transparencia.
Nadie votó por AMLO para que ósmosis Cuitláhuac García ganara en las urnas y se convirtiera en una especie de capataz de la gran hacienda llamada Veracruz ni tampoco para imponer su voluntad, caprichos y berrinches.
El profe de Matemáticas sigue barriendo para atrás y para adelante. Y si, en todo caso, necesita los cargos públicos para otros… que cumpla con la ley.
Y si el par de ex directores cometieron posibles tropelías, entonces, también la ley ha de aplicarse.
Pero si por el contrario las presiones políticas se están atravesando, caray, la población electoral sufragó en las urnas a mediados del año 2018 harta, molesta, indignada, encabritada con tantos abusos y excesos del poder de las elites priistas y panistas.
Y pareciera, o de plano es… que los políticos guinda y marrón son iguales o peores.
Los dueños del poder.
EL CAPATAZ DE LA SEV
La experiencia de Pedro Muñoz como reportero deportivo apuntala las siguientes observaciones:
Una. De hecho y derecho, el primer maestro amarrado para la dirección del IVD fue Héctor Ruiz Escalante, entrenador de atletas de alto rendimiento, pero el sismo político lo tumbó cuando en la cancha pública manejaron desviaciones sexuales y que nada le hicieron, se mantuvo como secretario Técnico del Instituto.
Pérez Medellín, con todo y sus posgrados, entró al quite y el gusto le duró solo ocho meses pues fue despedido “de un día para otro”, cuando nadie lo esperaba y sin explicaciones.
Pero… en el camino, Pérez Medellín tuvo los cables fundidos con Paco Bravo, quien era el subdirector administrativo, con malos recuerdos de su tiempo como director de Fomento Deportivo del alcalde priista, Ramón Poo Gil.
Entonces, llegó al quite Iván Domínguez, procedente de su experiencia como promotor deportivo en el Ayuntamiento de Paso de Ovejas, “asegún” recomendado por un diputado.
Pero el profe Zenyazen Escobar le envió a María Fernanda Alonso como subdirectora administrativa, y los choques se dieron entre ambos midiendo fuerzas, puños y músculos.
Y luego de 6 meses de un bombardeo inusitado, ni hablar, Iván Domínguez cayó y María Fernando de Zenyazen celebró su victoria.
El profe Alberto Nava, el tercer director, es antiguo compañero de Zenyazen. Ambos estuvieron en la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, CNTE, y cuya dirigencia terminó odiando al secretario de Educación.
Y, bueno, con todo y que la política es así de inestable, pasional, irreflexiva, loca y represiva, “quítate porque ya llegué”, una cosita son las pasiones del corazón y del hígado, y a veces hasta del sexo, y otra, mil años luz de distancia, la política deportiva, en el caso.
Significa, entonces, que desde la secretaría de Educación están ejerciendo el poder con el mismo sentido patriótico de los priistas, exaltando el nepotismo, el tráfico de influencias, el conflicto de intereses, y lo peor, las pasiones pasionales.
Casi casi, la cúpula educativa sintiendo que Veracruz es su hacienda porfirista y ellos los grandes capataces.
¡Ay, Zenyazen!, si a otros el bulliyng de la infancia los marcó muy feo, el titular de la SEV desea que la población electoral olvide su pasado strippero imponiendo su voluntad, caprichos, berrinches, odios, rencores y venganzas.
En el camino soñó con el IVAI, Instituto de Acceso a la Información, para su esposa, quien ya de por sí era, o es, funcionaria en la LXV Legislatura.
Y si tales son los amigos de Cuitláhuac en el ejercicio del poder, caray, ¡qué pobreza amical!
VÃctor Manuel Cinta Paz 01 Abr, 2020 - 17:41
Zenyazen nunca fue militante de la CNTE- fue del MMPV. Y ahora formaron sin sindicatito que, se llama. MMV. Su servidor es Fundado nde la CNTE desde 1985, con varios profesores de la zona Boca del RÃo, y Puerto de Veracruz y Zenzayen inicio 1913, en el MMPV. Por lo cual si me permiten decir NO, Fue Militante de la CNTE, hubo vinculaciones en la tal llamada reforma educativa, con la CNTE, cómo organización emergente. Pido de Favor realizar algún aclaración cunado me den el espacio de acuerdo años 22 Principios de la CNTE, que nace el 1979. A cuarenta años. Y no q tenido mercenarios de la polÃtica como Zenzayen.