La juez que lleva el caso de los dos detenidos por el enfrentamiento a balazos la semana pasada en Atzalan no admitió ninguna de las pruebas ofrecidas por la defensa, pero sí­ aplicó las medidas cautelares solicitadas por la Fiscalí­a, prisión preventiva hasta por un año y cuatro meses de investigación complementaria.
La defensa de los detenidos indicó que la audiencia de vinculación a proceso, por la carpeta 02/2020, se celebró la noche del jueves en la Sala Dos del Distrito Judicial de Jalacingo, en donde se vinculó a proceso a Albertino N y Nicolás N por delitos contra la salud en la modalidad de posesión simple, ultrajes a la autoridad por medios violentos y posesión de vehí­culo con reporte de robo.
La defensa denunció que el caso está plagado de irregularidades y es notorio que “hay lí­nea desde el gobierno” para que los dos hombres se queden detenidos, y así­ justificar el mal actuar de la policí­a.
La juez asignada Saray Hernández Pérez no quiso admitir a los testigos ofrecidos por los abogados, quienes afirmaron en todo momento que la versión dada por la Policí­a Estatal, es falsa, tampoco aceptó diversos peritajes que confirmaban que al menos uno de los detenidos fue sacado de su casa de forma violenta, sin orden de aprehensión, vulnerando sus derechos humanos.
Su señorí­a tampoco quiso tomar en cuenta una prueba en donde se cuestionaban las coordenadas ofrecidas por la policí­a, sobre el lugar ocurrieron los hechos, y que al confirmarlas con un proveedor de servicios de GPS daban la ubicación de un poblado en Birmania y no en Tepeczintla, Atzalan.
Esas coordenadas son las que están registradas en el Informe Policial Homologado elaborado por los policí­as que participaron en ese operativo y que el dí­a de la audiencia de control ni siquiera se presentaron para ratificar sus dichos ante la juez.
Pese a estas irregularidades, la togada afirmó que no eran necearí­as las pruebas y aceptó por completo la acusaciones de la Fiscalí­a, en voz del fiscal Iván González Rodrí­guez.

DETENIDOS
Albertino N y Nicolás N fueron detenidos la noche del jueves de la semana pasada, en el poblado mencionado, después de la incursión de varios elementos de la SSP presuntamente para un operativo contra la delincuencia.
Los oficiales sin embargo allanaron casas, golpearon a hombres y encañonaron a mujeres y niños. Testimonios recabados por este reportero en el lugar de los hechos, indican que se trató de un atropello a los derechos humanos de los habitantes del pequeño poblado asentado en la zona serrana de Atzalan, en un cinturón de alta marginación.
Esa noche asesinaron a Bellarmino Cardeña y su nieta, Marí­a Madgalena, de once años, además, tres oficiales de la SSP salieron lesionados después de que Berllardino Cardeña les disparó con su escopeta, y otro, horas después, murió a consecuencia de los mismos disparos.
La familia del hombre, que resultó ser coordinador del programa Sembrando Vida del gobierno federal, indicó que él solo defendí­a a sus seres queridos del ataque violento de los policí­as y que para los momentos del operativo en ese poblado Bellarmino Cardeña ni si quiera sabí­a que se enfrentaba a la ley, pues todo se dio durante la madrugada, en medio de la oscuridad.
En el pueblo, familiares de los detenidos, así­ como vecinos, sostienen que son inocentes, pues esa noche se les apresó porque se metieron a defender a sus seres queridos cuando presuntamente eran violentados por los oficiales.
Sobre esta audiencia, la Fiscalí­a General del Estado de Veracruz no informó nada. Antes dieron a conocer diversos boletines donde se informan sobre reuniones de la encargada del despacho de la Fiscalí­a General del estado, Verónica Hernández, así­ como algunos otros asuntos menores.

ERAN TRES DETENIDOS
El jueves la S.S.P. informó que por ese operativo se habí­an detenido a tres sujetos, Marcelino, Nicolás y Albertino N.
Sin embargo, en las horas previas, el primero en lograr su libertad fue Marcelino N, a quien la S.S.P. acusó de portar “un arma tipo revólver, calibre .38 especial”.
Incluso, dos dí­as después de los hechos, para el funeral, Marcelino N ya se encontraba en el pueblo participando en el entierro de su amigo Bellarmino Cardeña y de la niña de 11 años.
Sus familiares explicaron que fue dejado en libertad cuando rápidamente se comprobó que él no habí­a atacado a ningún policí­a, que habí­a llegado a defender a sus familiares quienes estaban siendo vejados por los oficiales.

REACCIONA UNA SEMANA DESPUÉS
La diputada del distrito de Perote, que tiene influencia en Atzalan, Ivón Trujillo, se pronunció en la tribuna del Congreso Local una semana después de los hechos.
Durante los primeros dí­as, la legisladora guardó silencio ante la noticia sobre el homicidio del abuelo y la nieta.
Sin embargo, el caso escaló en medios de comunicación y apenas el jueves pasado, una semana después, es que la legisladora se subió a la tribuna a exigir a la Fiscalí­a el esclarecimiento de los hechos.
Hasta ahora, ni la diputada ni el alcalde, José Homero Domí­nguez Landa, se han parado en el área para saber de primera mano que ocurrió durante ese operativo.
El edil, de hecho, se ha dedicado a sabotear las manifestaciones que han sido convocadas por los habitantes para exigir justicia.
La única que se paró en el lugar y realizó acercamiento con las familias fue la titular de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos, Namiko Mazumoto Bení­tez, quien inició diversas diligencias para iniciar la queja, así­ como para acercar apoyo sicológico a las ví­ctimas.

CUITLíHUAC, SE BURLA DE LA PRENSA
Y mientras el titular de la Secretarí­a de Seguridad Pública, Hugo Gutiérrez Maldonado, ya dijo que se está investigando a los oficiales y si actuaron mal se les castigará, el gobernador Cuitláhuac Garcí­a Jiménez, ha guardado silencio.
Garcí­a Jiménez ofreció disculpas, al iniciar su gobierno, a los padres de los cinco chicos de Playa Vicente ví­ctimas de desaparición forzada en Tierra Blanca.
También hizo un acto protocolario para disculparse con la familia de tres jóvenes sustraí­dos por la policí­a y la delincuencia en Papantla.
Igualmente se disculpó por los pensionados golpeados en Plaza Lerdo, Xalapa, durante 2016.
Y próximamente, se sabe, se disculpará por los oficiales de Úrsulo Galván que fueron privados de la libertad y hasta ahora nos e sabe nada de ellos.
Sin embargo, todos esos casos pasaron durante el duartismo, y los atropellos cometidos bajo su administración, simplemente los soslaya, como hizo en Tierra Blanca, al dar una entrevista a la prensa que lo cuestionó sobre diversos temas, pero entre ellos su postura por los señalamientos contra su policí­a por parte de indí­genas de Atzalan.
El mandatario, para evadir la pregunta, se burló del reportero que le lanzó el cuestionamiento y raudamente se marchó para evitar hablar.