y admiro la sencillez con que se conduce Cuitláhuac, que dirige la tercera entidad más importante del paí­s”.
Cuitláhuac Garcí­a contestó los elogios al definir a Batres como un excelente operador polí­tico en el Senado de la República.
“A él le tocó dirigir las reformas del presidente (Andrés Manuel López Obrador) al arranque de su gestión, y no fue fácil. Hubo que convencer, habí­a que conducir, y lo hizo acertadamente”.
Destacó que fue la operación polí­tica de Batres la que dio vida a la Guardia Nacional, que hoy realiza labores de combate a los grupos delictivos en varias partes del estado.
Puso en relieve que en la búsqueda de la Cuarta Transformación del paí­s, Batres fue el primer dirigente nacional del Movimiento con quien debieron coordinarse.
“Cuentas en Veracruz con un gran compañero” dijo el mandatario.

EL EQUIPO PERDEDOR

La votación del lunes en el Senado de la República no favoreció la reelección de Martí­ Batres como presidente de la Mesa Directiva. El Morenista fue derrotado con 29 votos frente a 33 que obtuvo Mónica Fernández, alfil de Ricardo Monreal.
“Hablaba conmigo y me decí­a “no me voy a meter, tú vas muy bien. Tú estás muy bien, tú has hecho un gran papel”. Apenas me daba la vuelta y me clavaba un puñal en la espalda hablando con cada uno, para decirles que no me apoyara”, dijo Batres tras conocerse el resultado.
Ricardo Monreal respondió a los señalamientos de su homologo y afirmó que “en polí­tica, las decisiones que se toman suscitan controversia y hasta polarización. El grupo parlamentario de MORENA votó en libertad. Comprendo las reacciones y las descalificaciones: son injustas, pero actuaremos con tolerancia y altura de miras”.
La disputa Batres-Monreal es considerada la primera gran crisis de MORENA, desde que el presidente Andrés Manuel asumió la presidencia de la República, y en medio de la fractura, Cuitláhuac Garcí­a ha mostrado su simpatí­a por Batres.