Cae Pepe Mancha del CDE del PAN
Foto de Yerania Rolón
El Tribunal Electoral Veracruzano anuló la elección para presidente del CDE del PAN y aun cuando el CEN del PAN había tomado la protesta a Pepe Mancha, habrá nuevas elecciones partidistas.
Revés, entonces, del Tribunal, primero, para Pepe Mancha, y segunda, para su padrino, Miguel íngel Yunes Linares.
El tribunal halló que hubo anomalías en más del 85 por ciento de los centros de votación.
Incluso, ha de recordarse que en su momento, el candidato independiente a la yunicidad, Joaquín Guzmán Avilés, denunció que se trataba de una elección de Estado pues desde la gubernatura azul de dos años era inducida y favorecida.
Desde días anteriores, el mal fario se venía encima de Pepe Mancha.
Primero, cuando el ORFIS documentó el dedazo de la secretaría de Infraestructura y Obra Pública de Julen Rementería del Puerto para otorgar obra pública a las empresas constructoras de Pepe Mancha.
Y luego, cuando el diputado presidente de la Mesa Directiva de la LXV Legislatura, José Manuel Pozos Castro, exhibió los jugosos convenios de publicidad que desde la LXIV Legislatura otorgó el diputado presidente de la Junta de Coordinación Política, Sergio Hernández Hernández, a su gurú y mecenas, Pepe Mancha, para un periódico digital que el tuxpeño registró a nombre de su señora madre.
En la LXV Legislatura, Pepe Mancha impuso a su esposa de diputada local pluri, y quien es su socia en las constructoras.
También impuso a su chofer como regidor en el Ayuntamiento de Coatepec.
Y a una pareja matrimonial amiga, como regidores en el Ayuntamiento de Minatitlán.
Y en Tuxpan, un primo presidente municipal, lo tratan como el señor feudal, su imperio y su emporio, y en donde le siguen la pista por presuntos contratos de obra pública.
Exsíndico en el Ayuntamiento tuxpeño, donde fuera señalado de abuso sexual con todo y denuncia, Pepe Mancha brincó a la cancha panista estatal donde operara con todo para los Yunes.
En el Felipismo se estrenó como constructor de los llamados Pisos Firmes asociado con su examigo, el ex diputado federal, ahora su enemigo, Víctor Serralde, aliado de Joaquín Guzmán Avilés.