Propietarios de la polí­tica llegan a sentirse dueños del destino común.
Algunos ejemplos son los siguientes:
El gobernador y el secretario General de Gobierno contra el Fiscal… por el tema de la inseguridad, mientras el secretario del ramo guarda silencio, lejos de las candilejas.
“El dos de palacio” contra el fiscal sobre la existencia de un nuevo cartel en Veracruz. El cartel del siglo. No existe, dijo “El dos”. Existe, remató la Fiscalí­a.
El secretario de Educación, el famoso stripero de la región de Córdoba y Orizaba, contra su antecesor de la yunicidad.
Todo, por 77 plazas que fueron otorgadas en el bienio azul para los cuates y los amigos y los familiares y ellos mismos.
El secretario de Desarrollo Social de la Cuitlamaní­a contra su antecesora, la senadora panista, quien ha anunciado que está lista para su defensa.

DOS. Puro fuego pirotécnico

El secretario de Salud contra sus antecesores, argumentando una crisis humanitaria de salud pública, pero sin interponer una denuncia penal, quizá porque están programadas y ya le tocará el turno.
La directora del Instituto de Pensiones tronando contra cinco ex secretarios de Finanzas y Planeación (tres de la yunicidad, uno del duartazgo y otro del fidelato) por disponer en forma autoritaria de la llamada Reserva Técnica y nunca enterarla.
La Contralora en contra de sus antecesores, acompañando a varios secretarios del gabinete estatal de MORENA a interponer la denuncia, quizá como parte de un reality-show de la izquierda, se ignora si porque la ley la faculta.
Un diputado local del PAN, ex titular de la Junta de Coordinación Polí­tica, en contra dl presidente municipal de Xalapa.
Una diputada local del PAN, en contra del titular de la JUCOPO en la LXV Legislatura por las amenazas de muerte vertidas.
El titular de la JUCOPO en el Congreso local, el antiguo vendedor de automóviles, cantando en su camioneta cuando maneja y trepando el video a las redes sociales como hombre noticia que se considera.

TRES. Tragadero de honras

El secretario General de Gobierno en contra del presidente municipal de Isla asegurando que los policí­as locales emboscaron a unos migrantes con el resultado de una guatemalteca asesinada y 4 heridos, entre ellos, un menor.
El desdén del gobernador en contra del alcalde jarocho a quien cerró la llave de SEFIPLAN para el carnaval y ha tratado con menosprecio el festejo de los 500 años de la fundación del Primer Ayuntamiento de América Latina en tierra firme.
Incluso, el alcalde y la sí­ndica de Coatzacoalcos en la arena pública, trepados en el ring polí­tico, denunciándose a sí­ mismo de nepotismo, cuatismo, amiguismo y desví­o de recursos públicos.
El alcalde de Poza Rica, también de MORENA, enfrentado con parte del Cabildo por el nepotismo y el amiguismo.
La polí­tica, entonces, convertida en un destripadero de hombres y mujeres, en un tragadero de honras, en un ajuste de cuentas entre quienes llegaron al poder y se fueron, lejos del bienestar social en un Veracruz donde 6 de los 8 millones de habitantes están en la miseria, la pobreza y la jodidez según el INEGI y el CONEVAL.
Todos, declarándose honestos entre los honestos para servir a la población…