de ley para revisar, ajustar y reajustar, y bajar hasta donde sea posible el precio de las medicinas y lo que de siempre ha constituido un abuso y un exceso.
Y lo peor, confabulado el presidente de la república en turno.

REMITENTE: Las medicinas son más encaras en el paí­s tres veces más que en otras naciones.
Una familia de clase baja, por ejemplo, con ancianos enfermos y familia enferma gasta el 40 por ciento de su ingreso raquí­tico en medicinas.
Un amigo lo dice así­:
“Antes, en la juventud, andábamos en discos, antros y moteles. Ahora, ya viejos, en el consultorio médico, en las farmacias, en el quirófano y en la iglesia rogando a Dios que nos lleve lo más pronto posible”.
Desde el Senado, Ricardo Monreal está trascendiendo en acciones de interés social. Por ahí­ camina su iniciativa para reducir los intereses bancarios a los préstamos y que son onerosos, una carga terrible para la economí­a familiar.

ENTREGA INMEDIATA: La iniciativa de ley del lí­der de la bancada parlamentaria en la Cámara Alta es para que a partir de la fecha, con AMLO presidente de la república, los precios de las medicinas sean establecidos con un alto sentido social por las secretarí­as de Salud y Economí­a, desde luego, razonando con los dueños de las empresas de medicinas tanto nacionales como internacionales.
La mecha está prendida. Ninguna duda de que pronto los farmacéuticos se lanzarán en contra de Monreal, igual, igualito que los banqueros en su momento.
He ahí­ la Cuarta Transformación del Paí­s, con hechos y acciones.

ACUSE DE RECIBO: El urólogo dice que de cada diez personas de 60 años de edad en adelante que pasan enfrente, 9 están enfermas de la próstata.
Y el mal de la próstata se atiende (mucha, muchí­sima necesidad de miccionar, por ejemplo) o el cáncer caerá invencible e inderrotable.
Cierto, el urólogo dice que con un tratamiento médico se puede librar, aun cuando algunos enfermos los desmienten.
Pero, bueno, una sola medicina para el tratamiento médico, Proscar, cuesta 1,598.75 pesos y trae treinta pastillitas, una por dí­a, una cajita al mes.
Y tal cantidad resulta paradójica, por ejemplo, porque hay pensionados que reciben tres mil pesos mensuales de pensión, si bien les va.
Por eso, el súper jonrón con casa llena en el cuadrilátero del senador Ricardo Monreal.
La Cuarta Transformación del Paí­s pasa por regular con justicia social los precios de los medicamentos.

CARTA EXTRAVIADA: La iniciativa de ley también incluye revisar la calidad de la llamada medicina genérica.
Hay doctores, por ejemplo, que de plano la prohí­ben porque significa otra estafa mayor.
Y si circulan los genéricos se debe a la complicidad de la secretarí­a de Salud con los grandes consorcios nacionales e internacionales de medicinas.
Y peor, porque los genéricos nacieron como un gran fraude al cobijo de la jodidez económica de las clases bajas y medias. Son espejitos, fuegos pirotécnicos, “tomaduras de pelo”.