Y durante el primero y el segundo dí­a de Cuitláhuac como gobernador, AMLO es el objeto supremo y único de su interés, en tanto gobernará para el millón 665 mil 824 jarochos que votaron por él hasta el tercer dí­a.
Todo por AMLO; el presidente, dice Cuitláhuac, que rescatará, ajá, a Veracruz.

LUNES
Yunes, su peor enemigo: Ronzón

Miguel íngel Yunes Linares ya terminó su periodo constitucional.
El maestro Carlos Ronzón resume su paso por Veracruz.
Uno. La ambición polí­tica de heredar el poder a su primogénito lo perdió. Más de veinte años buscando la silla embrujada del palacio de Xalapa para terminar en el nepotismo.
Dos. Su carácter y temperamento lo llevó a tener todo y perder todo. Incluso, le pasó lo mismo que en el sexenio de Patricio Chirinos Calero.
Secretario General de Gobierno, presidente del CDE del PRI, excluyó a las elites priistas en la elección municipal en que perdiera 107 alcaldí­as, y descarriló.
Tres. Todaví­a la semana anterior cuando inaugurara el puente Carlos Slim, que lleva al Nuevo Veracruz, en el puerto jarocho, expresó su más alta prioridad en la vida como son sus hijos. Y a los dos los enalteció.
El nuevo Paseo del Malecón, dijo, es el más bello del paí­s.
Por decreto, claro.
Y en contraparte, a ningún secretario del gabinete reconoció. El autoritarismo total y absoluto.
Cuatro. Yunes Linares, dice Ronzón, es su peor enemigo.

MARTES
Saldo negativo de un bienio

El saldo de la yunicidad fue negativo.
La inseguridad pública, degradada por los carteles. Más desaparecidos, más secuestrados, más balaceras, más muertos. En la última semana, un tiroteo empezó en la avenida Ruiz Cortines, de Boca del Rí­o y terminó en la avenida Urano, como en el viejo oeste.
Una terrible crisis financiera, el mismo desastre que Javier Duarte le heredó.
Veracruz, más endeudado, con un plazo mayor para pagar la deuda.
La migración a otras latitudes del paí­s, más agravada.
La pobreza, la miseria y la desigualdad económica y social, más acentuada.
En contraparte, nunca en el bienio azul fueron tocados asuntos básicos, como el medio ambiente, el agua, la agricultura, la ganaderí­a, la cultura.
Durante los dos años, los secretarios del gabinete legal fueron condenados al anonimato, sin moverse en la cancha mediática, a excepción del secretario de Seguridad Pública y del fiscal carnal.
La obediencia y la sumisión fueron los atributos, digamos, más valorados en el bienio anterior.

MIÉRCOLES
El sexenio que viene con Cuitláhuac

Cuitláhuac, dice Ronzón Verónica, ni en campaña ni después de la elección, ha expuesto ni desarrollado una idea completa y lo que expresa los lí­mites de su inteligencia.
Quizá tenga ingenio y genio para haber inventado un aparato para operar misiles para graduarse en Alemania como él mismo alardea, pero en materia polí­tica, está reprobado.
Peor: ninguna idea ni dimensión social y polí­tica tiene del arte de gobernar ni menos, del aparato gubernamental, más que para el reparto de los cargos públicos.
De pronto, su cosmetólogo le mejoró su imagen. Le quitaron las botas y/o botines que usaba, le quitaron los pelos parados, le quitaron los pantalones de mezclilla, y lo vistieron a la usanza polí­tica tradicional.
Además, dice Ronzón, se le mira y se le escucha hablar y actuar y reaccionar, y poca, baja, bají­sima confianza inspira.
Simple y llanamente, ningún liderazgo polí­tico y social ha demostrado en el terreno de los hechos.
Y aun cuando en ningún momento está obligado a saber y dominar todos los temas, está obligado a informarse… antes de hablar.
Y más, por una razón poderosa: desde hoy, primero de diciembre, y durante los próximos seis años, sus decisiones significarán la última palabra.

JUEVES
El chavo ruco

Su imagen pública es la de un chavo ruco, un adolescente prematuro y con un grado de inmadurez emocional que genera incertidumbre y zozobra en la difí­cil tarea de gobernar con el más alto sentido social.
En la mesa, puras ocurrencias.
Por ejemplo, su anuncio de crear la Secretarí­a del Mar y la Dirección de la Cultura de la Paz y los Derechos Humanos, y en donde la titular será la académica de la Universidad Veracruzana, Mayra Ledesma Arronte.
La ocurrencia de que a tono con AMLO y su Tren Maya, construirá el tren Coatepec-Xalapa-Banderilla.
El anuncio de que las casetas de Fortí­n y la Antigua serán quitadas para volverse gratis el paso en la carretera.
La versión de que el combate a los carteles en Veracruz es tarea federal y por tanto, se anticipó “lavándose las manos” cuando en todo caso hay corresponsabilidad en los tres niveles de gobierno.
Y, claro, circo para el pueblo con el anuncio de que reinstalará el Festival de la Salsa en Boca del Rí­o.
Puras ocurrencias, dice el politólogo Carlos Ronzón.

VIERNES
Nepotismo, S.A. de C.V.

En el equipo de Cuitláhuac, el perfil tí­pico de MORENA y que oscila entre los radicales, los chairos y los dueños de la verdad absoluta, los descubridores de las playas de Chalchihuecan, la izquierda delirante.
Incluso, reproduciendo el modelo priista del tráfico de influencias, el conflicto de intereses y el dedazo puro.
Un ejemplo clásico, inalterable:
Cuitláhuac impuso a su secretaria particular, Dorheny Garcí­a Cayetano, como diputada federal, la mismita que en el Congreso de la Unión resucitará la demanda penal de Javier Duarte y sus diputados duartistas en contra de Miguel íngel Yunes Linares en la Procuradurí­a General de la República.
Luego, la quiso imponer como coordinadora de los diputados federales de Veracruz en el Congreso de la Unión y ante el rechazo del resto de la bancada dio marcha atrás.
Un caso de nepotismo es con el primo de Cuitláhuac, Eleazar Guerrero, designado subsecretario de Seguridad Pública.
Pero, además, resulta que Eleazar fue subdirector administrativo en la secretarí­a de Seguridad Pública con Arturo Bermúdez Zurita al frente, tiempo de Javier Duarte.
Y subdirector administrativo en la secretarí­a de Infraestructura y Obra Pública con Fidel Herrera Beltrán de gobernador.
Además, el nombramiento del doctor Roberto Ramos Alor como secretario de Salud, cuando, primero, fue director del Hospital Regional de Coatzacoalcos durante unos 18 meses con Miguel íngel Yunes Linares.
Y segundo, Ramos Alor es dueño de un local donde funciona un antro en el sur de Veracruz, y/o dueño del antro, y en donde solí­a citar a los Morenos para asuntos oficiales.