expulsó a los mercenarios del templo…Y las elites serí­an, no obstante, un remedo de los fariseos… Solalinde ha estado del lado de los migrantes y las cúpulas en el carril de los pudientes… Solalinde mira al Jesús que caminó en el mundo con pescadores, elegidos sus apóstoles, en tanto las cúpulas tienen de apóstoles a los señores del poder… Por eso, la distancia kilométrica y que incluye una mirada diferente sobre la realidad social…

ROMPEOLAS: En la primera semana de septiembre, el mes patrio por excelencia, Solalinde platicó con la XEU y tronó contra las élites de la iglesia católica… Les dijo, por ejemplo, que ellos, los otros ministros de Dios, han sido omisos ante los asesinatos de personas en Veracruz, entre ellos, los indocumentados… Y más, porque han tenido conocimiento de las prácticas de los grupos delictivos (La Jornada Veracruz, 12 de septiembre del año que corre)… Y, como se sabe, el lenguaje más expresivo y significativo en la vida es el silencio… Y el silencio, digamos, y como en el caso, ante los graves y grandes pendientes sociales, como el caso de Veracruz que desde hace ratito sostiene su economí­a local con los ingresos derivados de las remesas de un millón de paisanos sin papeles en Estados Unidos por encima de los ingresos de la caña de azúcar, el café y los cí­tricos, el trí­o de cultivos agrí­colas de Veracruz… Y no obstante, la iglesia callada, a tono, digamos, cuando a los 12 años de edad Jesús se le perdió a sus padres y lo encontraron en la iglesia discutiendo con los ideólogos… Y cuando sus padres le reprocharon Jesús contestó de manera contundente: “Debo estar en las cosas de mi Padre”… Solalinde está, vive cada dí­a, en los temas sustanciales del Señor Todopoderoso como son los pobres “y los pobres entre los pobres”…

ASTILLEROS: Solalinde fue categórico, hablando “al pan pan y al vino vino”… Por ejemplo, dijo de las elites eclesiásticas… “Les molestan mis declaraciones… En varias ocasiones les he dicho lo que está pasando y han decidido no hacer nada”… Por ejemplo, el fundador del albergue “Hermanos en el camino”, con sede en Ixtepec, Oaxaca, y sucursal en Acayucan, Veracruz, ha repetido millón de veces que “Veracruz es el peor paso de migrantes en el paí­s”… Luego, amplió su perspectiva sociológica de la realidad y dijo que “en Veracruz es el más grande y extenso cementerio de migrantes en el paí­s”… Fue aquel tiempo cuando las ONG de reporteros de México y del extranjero aseguraban que “Veracruz era el peor rincón del mundo para el gremio reporteril”… Y no obstante la cantaleta repetitiva de Solalinde, nunca hubo una respuesta católica de los jefes de la iglesia en la tierra jarocha para, digamos, empujar juntos la carreta como iglesia integrada en un solo haz de voluntades ante los gobernadores en turno…

ARRECIFES: Muchas cosas ha de sentir Solalinde de los ministros de Dios en Veracruz… En su plática con la XEU dijo, por ejemplo, sin especificar fecha, hora ni lugar, que se habí­a reunido con los obispos, menos con Rutilio de Coatzacoalcos, para hablar sobre la polí­tica migratoria… “Ahí­ estaban el cardenal Sergio Obeso y el arzobispo Hipólito Reyes Larios”, reveló… Pero la cumbre obispal con Solalinde fue luego del triunfo electoral de AMLO como presidente electo, toda vez que el sacerdote con sede en Ixtepec es amigo entrañable de Andrés Manuel López Obrador y quien le ofreciera una secretarí­a de Estado (la secretarí­a del Migrante)… Entonces, los obispos lo vieron como un sujeto de grandes beneficios para todos ellos y lo aceptaron en su seno, acomodaticios que parecieran… Pero desde hace más de dieciocho años, el sacerdote de la Teologí­a de la Liberación tiene como prioridad la calidad de vida de los migrantes y hasta apenas ahora, luego de casi dos décadas de indiferencia y desdén, lo voltean a mirar… Nada fácil serí­a que el Arzobispo de la Ciudad de México y el Nuncio Apostólico también le extendieran la mano, ¡qué caray!...

PLAZOLETA: Solalinde pertenece a la gran casta de la iglesia de la Teologí­a de la Liberación… Sus antecedentes están, entre otros, en Miguel Hidalgo, José Marí­a Morelos, fray Bartolomé de las Casas, Abad y Queipo, Sergio Méndez Arceo, Monseñor Rafael Guí­zar y Valencia y Samuel Ruiz… En el otro lado están los otros, los conservadores, digamos, los rojos, los rojos del PRI y del PAN que han sido… Y más allá de que las piedras rodando se encuentran en el camino, Solalinde y AMLO han comulgado en la misma utopí­a social, el mismo sueño, la misma profecí­a de libertad y dignidad humana… Uno y otros en la austeridad republicana de los santos varones, Benito Juárez, Francisco Ignacio Madero y Lázaro Cárdenas… Por eso, nadie dudarí­a de que si se mantiene en su ideario como sin ninguna duda será, la hora de los migrantes de México y de los migrantes de América Central en su paso por el paí­s ha sonado… Y las cúpulas eclesiásticas se transfiguran y adoptan con hechos el discurso central de Jesús, o de lo contrario, recibirán de AMLO un trato, digamos, institucional, pero el tabasqueño centrará su tarea de gobernar con Solalinde, cuya vida austera y republicana y honestidad y honradez “a prueba de bomba” significa la más alta garantí­a moral en un paí­s donde los pudientes, desde los polí­ticos hasta parte de la iglesia, han escuchado las tentaciones del poder…