recompensa...De hecho y derecho, 250 mil pesos por cada desaparecido ubicado, y lo que, caray, parece burla… Y desaparecidos hace 9 años y hace 6 años y hace 5, 2 y un año… Es decir, hace mucho, demasiado, excesivo tiempo… Y, bueno, desde el lado, digamos, humanitario y solidario con las mejores causas, se reconoce el esfuerzo… Pero al mismo tiempo, demasiado tarde cuando el bienio azul está más ocupado y preocupado por una buena rendición de cuentas… Es “lavarse las manos” fuera de tiempo…

ROMPEOLAS: El nuevo anuncio de la Fiscalí­a con las recompensas es polisémico… Tiene varios significados… Por ejemplo… Mientras por el ex Fiscal, Luis íngel Bravo Contreras, ofrecí­an 5 millones de pesos de recompensa por datos sobre su paradero, y en tanto por “El Bukanas”, el descarrilador de trenes en la región de Córdoba y Orizaba, ofrecen un millón de pesos, y otro millón de pesos por el ex secretario de Seguridad Pública, José Nabor Nava Olguí­n, la Fiscalí­a de la yunicidad ofrece apenas, apenitas 250 mil pesos por datos que lleven a la ubicación, más que de los asesinos, de los desaparecidos… De entrada, pareciera que desde alguna zona oscura del poder están desvalorizando la vida humana… O en todo caso, creando y recreando el concepto de mexicanos de primera, de segunda, de tercera, de cuarta y de quinta categorí­a… Y más, si se considera, por ejemplo, que los desaparecidos lo fueron en tres municipios indí­genas y campesinos como son Ixhuatlancillo, Misantla y Cuitláhuac, aun cuando tres entidades urbanas (Xalapa y Poza Rica) también están en el centro del infierno…

ASTILLEROS: La Fiscalí­a también ofrece, y desde hace ratito, otra recompensa por los asaltantes de un negocio de Boca del Rí­o… Y si se suman las ofertas tipo viejo oeste resulta que la mayor parte han resultado inoperables… Incluso, y en el caso de la captura del ex Fiscal Bravo Contreras, y a pesar de los 5 millones de pesos por su cabeza (pues tan peligroso era, o es, considerado), nadie los pudo cobrar porque la policí­a lo ubicó y detuvo antes… El dinerito, se dijo, paró en la Comisión de Atención a Ví­ctimas, sin que nadie conozca el resultado social… El caso es que la nueva oferta para localizar a los 8 desaparecidos parece un reality show para ganar, digamos, espacio social, polí­tico y mediático, pero sin que, por ejemplo, levante expectativas en los familiares… Y menos, en el caso de las demarcaciones indí­genas…

ARRECIFES: En otras ocasiones, la Fiscalí­a ha repetido el modelo y estrategia, luego de que la Procuradurí­a General de Justicia de la República, PGR, ha explorado y mucho la posibilidad… En el mes de febrero de este año, la Fiscalí­a ofreció 24 millones de pesos por rastros que llevaran a la ubicación de 96 desaparecidos (18 mujeres y 78 hombres), sin que, y por desgracia, nadie conozca, al momento, el resultado… Es decir, por un lado, el sonsonete y la cantaleta (“¡Ahí­ viene el lobo!”), y por el otro, la opacidad… Todaví­a peor: la pifia completa… Por ejemplo, en la lista de febrero con el pago de 24 millones de pesos de recompensa, incluí­an el nombre de un desaparecido, Pedro Alberto Huesca Barradas, quien se desempeñaba como Agente del Ministerio Público en la ciudad de Cardel en el tiempo de su secuestro, duartazgo pleno… Y resulta que cuando los restos óseos del fosario de “Colinas de Santa Fe” fueron examinados detectaron que en el ADN dio como positivo el examen genético sobre Huesca Barradas, y quien luego de su secuestro y desaparición, los jefes policiacos, policí­as y malandros que lo levantaron lo asesinaron y sepultaron…

PLAZOLETA: Hay en Veracruz una larga y extensa y sórdida y siniestra noche amarga… Tanto que, con frecuencia, y en la incompetencia, negligencia, indiferencia y desdén, los polí­ticos y funcionarios públicos suelen resbalar… Por ejemplo, el gobernador electo, Cuitláhuac Garcí­a Jiménez, dijo al corresponsal de Proceso, Noé Zavaleta, que una de sus tareas prioritarias será esclarecer el asesinato de los 24 reporteros en Veracruz, más el caso de los 3 trabajadores de la información desaparecidos… Y esclarecer significa ubicar y detener tanto a los asesinos fí­sicos como intelectuales… Y, bueno, de entrada, se trata de una osadí­a demasiada temeraria, incluso, sin sentido, hablar así­… Y más, porque el primer periodista ejecutado en el sexenio de Javier Duarte fue Noel López Olguí­n, de Noticas de Acayucan, el primero de junio del año 2011… O sea, hace siete años y meses…

PALMERAS: Y ofrecer y garantizar y asegurar que los asesinatos de reporteros (entre tantos otros civiles) serán esclarecidos, caray, es como decir a un niño que el dí­a de su cumpleaños el Señor Todopoderoso, Dios, Yahvé, bajarán del cielo y le cantarán las mañanitas… Es el mismo caso de apostar a la procuración de justicia en Veracruz como en el viejo oeste… Ni siquiera, vaya, podrí­an ni con la ayuda de “Los hermanos Almada”, “El llanero solitario” y/o Batman y la Batichica… Lo menos que ha de esperarse es el respeto por los desaparecidos y sus padres y hermanos y demás familiares y un discurso donde los derechos humanos sean refrescados por completo… El tiempo de la fe y la esperanza social está descarrilado en Veracruz… Incluso, con tantos desaparecidos, secuestrados y asesinados, Veracruz está peor que Ayotzinapa, Nochixtlán, Tanahuato, Tlatlaya y San Fernando, Tamaulipas con los 72 migrantes ejecutados hasta con el tiro de gracia…