En 2015 fue asesinada en la misma colonia su hermana, Emma Arbona Mendoza, de 31 años, madre de dos pequeños.
Los nenes de Emma se habí­an quedado al cuidado de Antonieta. Ahora la familia no sabe qué harán con tanto hermano de madre.
Antonieta fue asesinada la tarde del lunes en calles de Coatzacoalcos, y se sumó a la lista de mujeres asesinadas en Veracruz; 92 hasta junio pasado.
Se encontraba con su esposo, Miguel íngel Santiago Chapol, abordo de un coche blanco tipo Aveo, cuando fueron atacados por pistoleros que se fueron a la fuga.
Hasta el cierre de este reporte, Antonieta habí­a muerto camino al sanatorio.
El esposo se encuentra delicado de salud; grave.
Antonieta sacó dos disparos, uno en el cuello y otro en el tórax. Los dos disparos fueron mortales.
Algunos medios de comunicación manejaron la versión de que se habí­a tratado de un intento de secuestro, lo cual fue descartado por las autoridades en las primeras investigaciones.
Se trató de un ataque directo y sin intento de privar de la libertad a las ví­ctimas, según lo expuesto por los ví­deos de vigilancia.
La ví­ctima mortal se llamó Antonieta Arbona Mendoza, era ama de casa y contaba con domicilio en la colonia Constituyentes. En octubre de 2015, su hermana, Emma Arbona Mendoza, fue asesinada por un sujeto que estaba obsesionado con ella.
El ataque se dio en la colonia Emiliano Zapata, entre Zaragoza y Constitución, muy cerca de la base de la Policí­a Naval.
Ahí­ fue atacada Antonieta Arbona y su esposo, el albañil Miguel íngel Santiago Chapol.
Después del ataque, la pareja fue llevada a una clí­nica particular de Coatzacoalcos, en donde ella llegó sin vida.

MATAN ASU HERMANA

En octubre de 2015, la noticia del rescate de una menor de edad, que estaba encerrada en una casa de Coatzacoalcos, cimbró a la población, pues cuando lograron abrir la puerta, las autoridades localizaron a la niña de dios años, y a un lado, el cadáver de una mujer.
Ella tení­a la garganta lastimada, señales de violencia sexual, y la sangre bañaba la habitación, la menor tení­a los pies manchados con la sangre de su madre, que fue identificada como Emma Arbona Mendoza, de 31 años.
La mujer habí­a sido asesinada por Bernardo Solano, por quien hay orden de aprehensión y hasta la fecha no se ha ejecutado.
Solano mató a Emma presuntamente porque ésta no le hací­a caso, él, de 65 años, estaba enamorado de Emma, contó en esa ocasión su hermana ahora difunta, Antonieta. "Los periódicos decí­an que Solano era su pareja, pero no es verdad, él estaba obsesionado con ella".
Solano, vendedor de bolillos, ofreció a Emma Arbona un terreno, dentro de su solar, para que se hiciera su casa. El ofrecimiento parecí­a desinteresado, pero no era así­, acusó la familia que Solano estaba enamorado de Emma, y como no le hací­a caso, la violó y mató.